En 2 años.

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Narra Hinata:

Aproveche que estaba en la cocina y le marque a uno de los guardias que vigilaba los alrededores de la casa para avisarle sobre la situacion y que buscara refuerzos, ya que no podia pelear con todos y al mismo tiempo cuidar de que no les hagan nada a mi equipo.

Despues de marcarle agarre un arma que tenia atrás del refrigerador, no pregunten por que tenia esa arma ahi.

la guarde debajo de mi camisa y justo a tiempo ya que alguien entro a la cocina.

Kageyama: Oye Hinata, por que duras tanto? - dijo este al lado del marco de la puerta -

Hinata: Que no puedes vivir sin mi? dame un respiro. - dije para soltar una risa y este me insultara -

Kageyama: Deja lo idiota, los muchachos me dijeron que viniera por ti.

Hinata: Oh, entonces no viniste por cuenta propia? Me lastimas. - dije haciendo cara de dolido -

Kageyama: Deja de jugar y apurate. - dijo haciendo cara de fastidio -

Hinata: Ya voy, ya voy. - dije agarrando un cuchillo y sacando el pastel del refrigerador -

Cuando ya había picado el pastel en diferentes partes las lleve a la sala junto con Kageyama y las repartimos de una rebanada a cada uno.

Los muchachos charlaron y rieron hasta que ya estaba anocheciendo y cada uno se fue a su respectiva casa menos Kageyama, este se quedo uno rato mas charlando con Hinata.

Hablaron de cosas triviales por aproximadamente 30 minutos hasta que este decidio irse.

Kageyama: Adiós, debo llegar a casa.

Hinata: Adiós Kageyama, cuídate.

Hinata acompaño a este hasta la entrada de su casa y allí mismo se despidieron.

Hinata se dio cuenta de que Kageyama habia dejado su bolso de entrenamiento asi que supuso que Kageyama no tardaría en darse cuenta y se devolvería a buscarlo.

Pasaron aproximadamente 3 minutos desde que salio Kageyama cuando escucho sonar el timbre de su casa y este abrió la puerta lentamente.

Hinata: Que tonto eres, se olvido esto ka-

¿?: Hinata Shoyo, no?

Mierda.

Narra Kageyama:

Sali de la casa de Hinata hace como 10 minutos y me acabo de dar cuenta que deje mi bolso, que idiota soy.

Me dirigí corriendo devuelta a su casa para llegar mas rápido, pero cuando llegue a su casa e iba a tocar el timbre me di cuenta que la puerta estaba abierta.

Se que era de mala educación entrar a casas ajenas sin pedir permiso, pero esto me daba mala espina.

Abrí la puerta lentamente y vi mi bolso tirado en el suelo y todas las luces apagadas.

Kageyama: Hinata? Estas aqui?

Dije mientras avanzaba con cuidado y escuche un ruido proveniente de la cocina.

Me asome con nervios a flor de pie y ahí lo vi, tenia una cuerda en la mano y apenas me vio se puso nervioso.

Hinata: Oh, Kageyama, volviste por tu bolso? - dijo este sonriendo -

Kageyama: Si, que estas haciendo? - dije mientras me acercaba

Hinata: Nada nada, estaba a punto de cenar algo.

Kageyama: Con una cuerda?

Hinata: Eh? Que cuerda? - dijo escondiendola detrás suyo -

Kageyama: No lo se, cual sera? - dije con sarcasmo y cada vez acercándome mas a la cocina -

Hinata: Es que-

No pudo terminar de hablar ya que sono una notificación de mi celular.

Kageyama: Es Miwa, me voy. - dije dando media vuelta y caminando -

Hinata: Adiós.

Narra Hinata:

Kageyama estuvo apunto de encontrar el cuerpo inconciente y amarrado que se encontraba abajo del mesón de la cocina.

Hinata: Eso estuvo demasiado cerca para mi gusto. - dije para marcarle a algun guardia para que este viniera a recoger al hombre y lo investigaran -

Despues de que vinieran por el hombre cerré con candado toda puerta y ventana por la que pudieran entrar, ya de por sí se me hace raro que solo me haya atacado uno.

Me dormí e hice la rutina aburrida de todos los dias ya que estaba suspendido.

Paso una semana asi estando en casa y haciendo las tareas que me mandaban mis compañeros de clase.

Kageyama me venia a visitar despues de clases o cada entrenamiento, nos quedabamos estudiando o haciendo cualquier estupidez para pasar el tiempo, y asi podria decir que paso toda la semana.

Ya era lunes, asi que me preparé para ir al Karasuno.

En el camino me encontre con Kageyama y con el me fui el resto del camino.

El dia paso sin ningun problema y en el entrenamiento no hubo nada raro menos por Nakahara que no hacía mas que mirarme feo o retarme.

Continuara...