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Angy iba comiendo sus gomitas y dulces mientras caminaba por uno de los patios, hasta que vio a alguien familiar entre un muro

Cuando el chico alzó la mirada la pequeña sonrió y fue hacia él corriendo

"Al parecer estás bien"

"Hola! Si, ando bien, oh! No pude darte las gracias por ayudarme en el callejón esa noche... no traigo nada para... oh! Quieres mis dulces? Se que no es mucho pero quiero agradecerte por ayudarme"

El chico la miró un momento en silencio, pero tomo solo un dulce de la bolsita de la niña.

"No deberías estar en clase?"

"Lo estaba, pero arme una revuelta y mi profe está hablando con mi papá"

"Ja! Eres un problema"

"Jeje, yo lo llamaría ser inteligente, la señora esa no debió entrar a esta escuela"

"Y por qué eres tú la que cree poder decidir sobre los demás, mocosa?"

"No decido sobre los demás"

"Entonces?"

Angy le explicó sobre como fue la maestra y todo el asunto de la revuelta que armó.

"Vaya, y yo que creía que eras indefensa"

"He estado entrenando! Me ves? He crecido!"

"Si, ya lo veo sonsa"

"No me digas así, me llamo Angy"

"Deberías tener cuidado a quien le das datos personales niña, cómo estás tan segura de que no voy a lastimarte?"

Angy lo miro confundida y luego le sonrió tranquila

"Me salvaste una vez, por qué me lastimarías después?"

"Que tal si soy un villano?"

"No tienes cara de villano"

El joven se puso en cuclillas y la miró, ella aprecio más su rostro, era un joven, ella diría que traga años. Sus ojos la hipnotizaron por completo, eran azules profundos e intensos, le recordaron a las llamas con las que la protegió aquella noche

"Ja! Te comió la lengua el gato corazón? Me temes aho- ah??"

Angy lo había tomado por las mejillas

"Tienes ojos bonitos"

El chico se preguntó para si mismo si acaso la niña no veía las quemaduras que iban abarcando de a poco su rostro, pero vio la sinceridad en la mirada de la pequeña

"No me... temes?"

La nena negó con una sonrisa

"Quieres otro dulce? Tengo muchos, te doy los que gustes"

"Que tramas?"

"Quieres ser mi amigo?"

"Por qué querrías-"

"Anda! Podemos ser amigos! Tu me has cuidado, quiero cuidarte también"

El chico la miró un rato y después profundizó su mano en la bolsa con golosinas.

"Que quieres niña?"

"A qué te refieres?"

"Algo quieres preguntarme, hazlo, antes de que me arrepienta"

Angy pensó poquito y después sonrió otra vez

"No me dijiste tu nombre, quiero saber tu nombre, puedo saber tu nombre? Por qué yo te dije mi-"

Mi RDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora