Izuku se sentía preocupado.
–¡Estúpido! ¡¿De qué diablos te preocupas?! ¡Ni siquiera lo conoces! -Gritandose a si mismo, su madre le llamó la atención desde el cuarto de a lado. –¡Lo siento, mamá! Tch, ¿Qué me sucede...?
Aún si negó la esperanza que tenía de encontrarse con Katsuki, sonrió cuando lo vió desde la ventana llegando al parque. Pero de nuevo, el ojirubí fue golpeado aunque por otra chica diferente, Izuku no podía sonreír a eso.
–¿Cuánto falta? -Preguntaba cada dos minutos a su compañero, Sawabe.
–¡Por Dios, cállate! ¿Sabes cuánto tiempo ha pasado desde que me preguntaste? ¡Ni tres segundos!Aún falta una hora para salir, la clase a penas y comenzó, ¿Por qué tanta prisa en irte?
–¡Porque...! ¿Eh? ¿Porqué...? ¿Por qué? ¿Por qué tengo tanta prisa?
–¡Tonto, eso es lo que te estoy preguntando yo! -Se inclinó un poco hacía él para alcanzarlo y proporcionarle un golpe en la parte trasera de la cabeza. –Midoriya, ¿Qué te sucede? Ayer también parecías algo ansioso, pero desde hace un rato que te ves como... Muy nervioso o algo por él estilo. ¿Te sientes mal? ¿Necesitas usar el baño? Puedo decirle a sensei por ti, si es que te da pena.
–¡El que lo hagas por mi me daría más pena! ¡...Y no es eso!
–¡Silencio! ¡Estoy dando clase, este no es sitio para platicar! -Los regañó el profesor.
Después de eso no hablaron más. Izuku espiaba a Katsuki por la ventana esperando a que este no se fuera. Ni el mismo se daba cuenta que lo que hacía no tenía ningún sentido. ¿Para qué quería tanto poder verlo?
Sin embargo, cuando estuvo copiando los apuntes en su cuaderno, y luego regresó la vista hacía la ventana, por más que miraba hacía el parque, aquel chico, ya no estaba.
–Ya no debo preocuparme. -se dijo a si mismo en voz alta pero solo lo suficiente para que él se escuchara y no los demás.
–Pueden irse ahora, los veré mañana, no olviden hacer sus deberes. -Les advirtió el profesor.
Como no tenía ánimos de nada, Izuku tardó en salir del colegio, y para cuando por fin lo hizo, la mayoría de alumnos ya no estaban.
–Debe ser bueno tener prisa. -Comentó con sarcasmo, más que nada, celos.
–Ojalá tú también la tuvieras.
–¡¡Tú!!
Recién daba la vuelta en la puerta de entrada cuando se topo a Katsuki recargado en la pared.
–¿Por qué te tomó tanto tiempo salir? He estado esperando aquí como un tonto, ¿Sabes? -Izuku estaba aún sin palabras, Katsuki pensó que quizá fue un poco duro con sus palabras para alguien que aún no conocía. –Ayer me fuí y no te pregunté tu nombre siquiera, tampoco me presenté, lo cual es raro porque te dije otras cosas personales pero no mi nombre.
–También olvidé presentarme. -Agradecia internamente el encuentro. –Midoriya Izuku.
–Bakugo Katsuki.
Tanta formalidad los hizo sonreír para terminar riendo un poco.
–¿De verdad me esperaste mucho tiempo?
–Algo así... Pero no es que tenga algo que hacer, en realidad no me estaba quejando, solo bromeaba.
–Ya veo.
“¿Y ahora qué?" La pregunta llegó a los dos al mismo tiempo.
Izuku no podía admitir que estaba feliz ahora que sabía su nombre, sería raro.
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Primer Amor - [Finalizada]
RomanceDos estudiantes que no van a el mismo instituto, pero terminan conociéndose.