La Hermosa Tierra de Ámbar

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Estaba en la misma pradera con flores de mis sueños, me levanté y busqué a Ulises sin éxito – Supongo que no esta en mi sueño esta vez – Caminé un rato en busca de alguien.

– ¡Hola, ¿Hay alguien ahí!?

Mientras más caminaba, más relajado me sentía, el aroma de las flores y la suave brisa me hacían sentir como una nube. Me detuve para disfrutar el momento cuando noté a alguien sentado en la hierba, era la misma fursona irreconocible de mi anterior sueño. Me acerqué para verlo mejor cuando noté que estaba abrazando a mi peluche – Espero que eso sea una señal de que no es un abusivo – Trate de decir algo, pero mi boca no hacía ruido. La fursona dio unas palmaditas en la hierba a su lado indicando que me siente junto a él. Accedí a su oferta, podía notar que se veía triste, así que, por impulso, decidí darle un abrazo. Noté como su cara se sonrojó repentinamente, su pelaje era muy suave, quería abrazarlo por siempre, pero finalmente escuché algo.

– ¿Qué estás haciendo?

Desperté ante la voz.

– Buenos días Ulises

– ¿Por qué abrazas el árbol?

Rápidamente salté hacia un lado avergonzado, estaba abrazando a un árbol, pero más importante, estábamos en un bosque de hojas naranjas.

– ¿D-donde estamos?

– Esta es nuestra primera parada – Respondió Ulises mientras comía una manzana.

Antes de poder preguntar algo más, me quedé viendo la manzana que Ulises tenía, por alguna razón, tenía demasiada hambre.

– ¿Quieres comer algo?, estos viajes suelen dar hambre – Ulises sacó un envase rectangular de su maleta y me lo entregó. Sin pensar, lo abrí y me comí el contenido, eran unos macarrones – Son los mejores que he probado, aunque quizás solo sea por el hambre

Gracias, y, por cierto, ¿Dónde están tus lentes?

Ulises puso su mano en su cara para verificar que no estaban.

– Eso explica porque mis ojos duelen tanto

– Tranquilo, las buscaré por ti

Empecé a buscar las lentes de Ulises mientras él se cubría los ojos, según lo que él me dijo, sus ojos son sensibles al color, pues viene de una dimensión en blanco y negro. El lugar en el que nos encontrábamos era hermoso, había hojas otoñales regadas por el suelo, se escuchaba a los pájaros cantando y el suave flujo de un río. La búsqueda no duró mucho pues encontré las lentes cerca de un arbusto, pero al recogerlas noté algo a la distancia. Era un pueblo, se veía muy medieval – ¿En qué época estamos? – Volví con Ulises y le entregué sus lentes.

– Gracias Drake

– Ni lo menciones – Dije con un tono optimista – Oye ¿Y qué hacemos aquí?

– Reclutando a el siguiente miembro de nuestro equipo

– ¿Y él es...?

– No lo sé, vinimos a descubrirlo

– Pero ¿Qué necesita tener?

– Debe ser una fursona útil, eso es todo

– Entendido, ¡Vamos al pueblo!

– ¿Pueblo?

– ¡Sip!, encontré uno por ahí – Dije señalando el camino hacia el pueblo

– Tal vez sea útil, vamos

Nos dirigimos hacia el pueblo, aproveché el camino para tomar algunas fotos con mi celular – No debería usarlo mucho, no creo poder cargarlo aquí – Cuando llegamos, vimos a varias fursonas y personas comprando en un pequeño mercado.

Vida Alternativa (Furry Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora