Vida Alternativa (Furry Yaoi)

El Centro Comercial

Estábamos caminando por los pasillos de FurSonez, llevaba al león con su correa a la vez que leía el manual.

– Bueno, según el instructivo, debemos ponerle un nombre

– ¿Qué tal Leo? – Sugirió Haze.

– ¿No crees que es demasiado genérico...?

– Dijo Drake el dragón – Concluyó Haze con un tono burlón.

– Buen punto – Me agaché para hablar con "Leo" – Oye ¿Te gusta ese nombre? –Sorpresivamente, Leo asintió con la cabeza.

– ¡Entonces es definitivo, bienvenido a la familia Leo! – Exclamé mientras le acariciaba la cabeza.

– ¿Qué más dice el manual? – Preguntó Haze.

– Bueno – Me levanté del suelo – dice que debe tener un lugar cómodo para vivir, supongo que mi departamento bastará

– Wow, no sabía que tenías tu propia casa, ¿Tu familia es parte de los nobles?

– Emm... No Haze, d-de dónde vengo tener una casa es algo normal

– ¿Enserio?, suena descabellado, pero cambiando de tema, ¿Algo más?

– Bueno... También menciona que debemos comprarle juguetes, principalmente masticables

– Ya me adelanté – Dijo alguien detrás de mí.

– ¡AHHH! – Gritamos Haze y yo a la vez, pude notar que Leo también se sobresaltó.

– Lamento asustarlos, pero compré juguetes para ese león – Dijo Ulises con una bolsa en las manos.

– B-bueno, g-gracias Ulises – Dije recuperándome del susto – Y-y, por cierto, se llama Leo

– Bueno, mucho gusto Leo, soy Ulises – Dijo ofreciéndole la mano, a lo que Leo respondió olfateándola – Oh... cierto...

– Entonces... Seguiré leyendo el manual – Dije – Aquí dice que Leo ya fue entrenado para ir al baño, pero hay que ayudarlo a... a-asearse – Me sonroje ante el pensamiento de ayudar a bañar a Leo.

– ¡DRAKE LO HARÁ! – Gritó Haze.

– Concuerdo – Dijo Ulises.

– O-oigan... y-yo no...

– ¡Está decidido!, Drake bañará a Leo – Exclamó Haze dándome un golpecito en el brazo – ¿Por qué a mí?

– Cambiando de tema, ¿Debemos comprar algo más? – Preguntó Ulises – Porque si es así hay que aprovechar el centro comercial

– Pues, ¿Iremos a alguna otra dimensión?

– No, solo volveremos a la tuya, como pediste

– En ese caso podríamos comprar comida – Sugerí.

– Esta bien, necesitamos mucha comida si planeamos vivir contigo por un tiempo

Salimos de FurSonez y empezamos a caminar por el centro comercial, al principio todos volteaban a vernos, principalmente a mí y a Leo. Las miradas constantes me hacían sentir nervioso, hasta que alguien se acercó a nosotros.

– Hola, disculpa, ¿Ese león es tuyo? – Preguntó una pantera que parecía de mi edad.

– Emm... S-si

– Es tan... ¡Lindo! – Exclamó arrodillándose para tomarse una foto con el – Me alegra saber que aún siguen adoptando a estas indefensas fursonas, ¿Cómo se llama?