Las Apariencias Engañan 2[El regreso de Tinny]

Cap 4. Encuentro Inesperado

Narra Tinny

Me desperté temprano eran las 6 de la mañana, no pude dormir bien pero me eh acostumbrado a eso rápidamente,ya que estos últimos años nunca pude descansar muy bien; me levanté y me fui a lavar la cara y el cabello. No tenía mucha ropa que ponerme asi que tomé una playera blanca que era muy grande; un pantalón negro y unos tenis. Salí de la habitación de huéspedes y me dispuse a ir a desayunar, justo en el momento en el que bajé las escaleras ví como Oliv se estaba despidiendo de mi madre para poder irse, me dio un vistazo  y su cara se lleno de enojo y salió enojada de la casa.

Tinny?- escuché decir a mi madre que me volteó a ver sorprendida- ¿porqué estas despierta?

Estoy un poco acostumbrada a levantarme a estas horas- dije y ella volvio a poner su cara como si se lamentara por todo lo que me paso.

Vuleve a la cama- dijo ella con una dulce sonrisa.

No tengo sueño; prefiero salir al jardín- dije y caminé hacia afuera.

Mi madre estaba muy angustiada por mí y la historia falsa y no me gusta verla asi es triste; fui caminando tranquilamente por el jardín era muy diferente a como lo recordaba solo una cosa no había cambiado; el columpio seguia en el mismo lugar, la misma sensación de cuando era pequeña me invadió pero no me digne a acercarme; seguí avanzado por el jardín, el frío viento que soplaba hacia que mis mejillas se enfriaran, poco a poco la luz del sol iba invadiendo cada rincón del lugar y el rocío que había en las hojas de las plantas empezó a caer; entré a la casa y fui a la cocina por algo de comer.

Buenos días- dije entrando

Buendos días señorita Tinny- dijeron al unísono las sirvientes

Se levantó muy temprano hoy y aún no está listo el desayuno- dijo la cocinera principal

No se preocupe, esperaré un poco más entonces.- dije y salí de la cocina hacia la sala 

Solo llevaba un día aquí y me era muy difícil andar por mi casa, estaba desorientada y mi mamá afortunadamente llegó a mi rescate.

¿Estas perdida hija?- dijo con una pequeña burla

Un poco; me es muy difícil ubicarme aquí- dije y ella solo sonrió

Sígueme- dijo y me dio un recorrido por toda la casa para que no me volviera a pasar lo mismo. Cuando terminó estaba listo el desayuno, hoy iria a comprar ropa y cosas necesarias para mi habitación así que cuando terminé el desayuno me despedí de mi mamá y salí a encontrarme con el chofer y un guardaespaldas que mi padre me dio para que no se despegara de mí ni un instante.

Salí, eran las 7:30 de la mañana, los negocios o tiendas apenas iban a abrir, algunas tiendas de ropa igual apenas iban a abrir, entré a la primera que me pareció una buena opción y empecé a elegir ropa al azar que me parecia muy bonita. Tomé especialmente una falda negra, una blusa del mismo color de manga larga y fui al probador a cambiarme; salí y como los tenis que llevaba no me convencian, así que después de comprar la ropa, fuimos a una zapateria; compré un par de botas negras de agujeta, unos converse negros y unas zapatillas de plataforma negras. Me puse las botas negras y les dije que queria ir al jardín o parque de la iglesia antigua, una vez ahí di instrucciones de que fueran a comprar la pintura que necesitaba y otras cosas útiles. Yo quería estar sola por tan solo un momento.

Me acerqué a un tronco de un árbol que antes era grande pero que ahora solo quedaba un pequeño fragmento de el, ese tronco era mi favorito de todo el lugar, siempre que me dejaban salir venia aqui a pasar el rato dibujando o escribiendo, pasaba mis tardes muy a gusto y ,de igual forma, en ese lugar conocí a mi primer amor, Eddie, el chico que cada tarde cuando estaba aquí venia a hacerme compañia y a ponerme de buenn humor, pero que ahora el, como muchos piensa que estoy muerta.

Solté un suspiro y seguí mirando atentamente el lugar, recordando muchas cosas y lamentando otras; ni siquiera supe cuanto tiempo habia pasado, cuando de repente escuche la voz de mi guardaespaldas por detras mio, volteé para mirarlo pero de igual forma mi atención se la llevo un chico que estaba de pie mirandome fijamente. Lo reconocí al instante y se me congeló el corazón, mi mente me llevo al día en el que el se me declaró y no le di una respuesta; mi guardaespaldas dijo que la pintura ya estaba en el auto que si necesitaba algo más y seria demasiado descortés el irme sin hablarle así que pedí un poco de tiempo. 

Cuanto tiempo sin verte Eddie- dije con una ligera sonrisa intentando ocultar el dolor que sentía por dentro.

¿En verdad eres tú? - preguntó con una cara llena de confusión como si no lo creyera y de tristeza  y yo no aguanté ver su expresión y solté una risa luego le miré con una expresión que reflejara el porque me estaba preguntando algo tan obvio, pero luego recordé que yo ya no era la misma de hace dos años.

Ha pasado mucho tiempo...- dije con un poco de tristeza - no me sorprendería que que ya no me reconozcas.- dije y me sentí aún peor.

Ciertamente ha pasado mucho tiempo- dijo con una suave voz que reflejaba lo mal que el igual se sentía y yo solo bajé la cabeza- y claramente has cambiado un poco al igual que yo.- dijo y los dos nos miramos por un momento.

Levanté mi mano para saludarlo y puse una sonrisa, aunque por dentro me estaba muriendo de tristeza, dolor y culpa por verlo, aún tenía mi mano extendida hacia el, cuando se lanzó sobre mí  en un abrazo. Quedé paralizada ante esa acción que verdaderamente no esperaba ni por un momento, sentí que si me soltaba bruscamente eso lo lastimaría aún más de lo que ya estaba, escuché un sollozo muy bajo y me separé lentamente de el, por  pura curiosidad quería saber si estaba llorando pero al separarme él rápidamente se limpio algo en su mejilla, lo miré por un momento y le dije:

Lo siento por no corresponder tu abrazo, me tomaste desprevenida y ya no me gustan los abrazos- dije muy incómoda

Perdóname a mí entonces- dijo igual incómodo

Te perdonó- dije y volví a poner una ligera sonrisa- me tengo que ir fue un gusto volver a verte Eddie- dije y extendí de nuevo mi mano

¿Te vas tan pronto? - dijo y me sorprendió, no esperaba esa pregunta, todo lo que el hacia o decia me tomaba desprevenida; desvíe la mirada, y por inercia comencé a bajar mi mano, pero antes de que la bajará por completo, el volvió a hacer algo que me dejo sin habla, tomó mi mano eh hizo que volviera a poner mi mirada en el.

Igual me encanto volver a verte- dijo con una sonrisa, sentí un calor subiendo por mis mejillas y el soltó mi mano, me despedí de el y miré a mi guardaespaldas que seguía detrás mio, le dirigí una mirada de vamonos y el lo entendió de inmediato, cuando iba a subir al auto, mire de reojo y el me estaba mirando, una sonrisa se mostró en mi rostro y luego subí. Como era posible que nos encontraramos tan pronto; pero tarde o temprano tenía que volver a ver a la gente que alguna vez conocí.