8; El viaje escolar (pt-1)

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Hoseok rodó los ojos al ver como su mejor amigo llegaba a última hora. Nego divertido al escuchar como todos lo mandaron a la fila después intentar llegar hacia él para entre meterse en ésta. A ver si así dejaba de ser tan impuntual.

Su vista regreso al frente, frunciendo el ceño inconscientemente al ver una cabellera rubia interponerse en el objetivo que buscaban sus ojos, Rose le estaba tapado la mirada hacia cierto omega con ojos felinos.

—Muy bien, ahora irán subiendo al autobús y tomarán aciento según el orden —explico el maestro Woo con voz pasifica.

«Claro, como si alguien fuera a hacer caso».
Pensó el alfa con sarcasmo.

Así era todos los años en cada viaje escolar y este no sería la excepción; los maestros organizaban esto solamente por diversión, nada obligatorio asistir y claro que Hoseok bien podría haberse quedado en casa, cómodo, en una blanda cama y con su preciado internet o terminando la saga que dejó pendiente, no obstante, cierto omega asistiría y, aunque Hoseok jamás lo admitiría, esa era la razón por la que se encontraba en esa fila con el sol quemado su piel y ¿Siendo empujado por una estampida humana?

El alfa por poco y cae de cara al suelo pero logro evitarlo a último segundo, algunos no tuvieron tanta suerte. Una vez que logro reponerse, corrió también entre la multitud que se apresuraba a entrar al autobús como si su vida dependiera de eso.

—¡En orden! —chillo el maestro Woo. Adiós a su voz pacífica —, ¡Dije en orden! —gritaba el maestro desesperado.

Al final el hombre se terminó rindiendo ¿qué se iba a hacer? ese era el mismo escenario de todos los años.

Hoseok se apretujo a fuerzas, recibiendo un golpe en un brazo de parte de una omega, bueno, no la culpaba, él haría lo mismo en su lugar. Una vez dentro busco rápidamente con la mirada a cierto omega que se encontraba apretujando contra su pecho al Kumamon que le había regalado una semana atrás.

«Tierno». Pensó Hoseok. Casi al instante sacudió la cabeza como queriendo despejar esa idea. «No, no es para nada tierno». Se corrigió.

Apresuró su paso hasta sentarse justo detrás de Yoongi y sin perder el tiempo empujó con sus piernas hacia delante, ocacionando golpear levemente la espalda del omega, quien inflo las mejillas y frunció el ceño y, sin molestarse en voltear le mostró el dedo corazón.

Yoongi no necesitaba voltear para saber que se trataba de él, sus acciones simplemente lo delataban.

—Los omegas no deberían ser así de groseros. Por eso nadie te quiere —se acerco a susurrarle el alfa.

—¿Por qué mejor no te vas a otra parte? Aqui no te quiero, alfa idiota.

—Solo estoy aquí para no romper la costumbre, ya sabés que en cada viaje escolar me ciento tras de ti.

—Sí, claro, lo haces para irme fastidiando. Que infantil.

—En realidad es para ir cerca de mi omega —sonrio al ver como Yoongi se volteaba a verlo con el ceño fruncido, mas su sonrisa se desvanecido al ver cómo NamJoon se sentaba al lado del omega —. Oye, señorito sabelotodo, ese lugar está apartado para Jimin.

—Oh lo siento, ví que estaba desocupado así que pensé: es mi día de suerte. Y me apresure a llegar aquí —dijo, dirigiéndose al omega e ignorando al alfa que no hacía más que fulminarlo con la mirada.

—Esta bien, Jimin ira al lado de Hoseok. Apuesto a que estarás encantado de llevar cerca a tu omega —le dijo Yoongi a Hoseok, riendo para sus adentros al ver la cara de inconformidad del alfa.

No es que Yoongi no quisiera ir junto a Jimin, como siempre en cada viaje escolar, es solo que le daba pena correr a NamJoon siendo que éste siempre lo trataba bien.

—Yo encantado de ir junto a mi omega —respondio Hoseok entre dientes, aún con la mirada sobre el otro alfa que no hacía más que sonreír por estar sentado cerca de su crush.

Su lobo no paro de gruñir molesto debido a eso. Estaba celoso pero jamás lo admitiría. Fingió coquetear con Jimin cuando este llegó haciendo aquello en voz alta para que Yoongi lo escuchase, quien por cierto, fingía no oírlo y reía sobre todo lo que decía NamJoon aunque esto no tuviese gracia.

—Hobi, das pena ajena —le susurro Jimin, quien para nada se tragaba el cuento de que Hoseok lo pretendía.

—Tú cállate.

—Ambos dan pena ajena —siceo jmin mirando como su mejor amigo hacia de cuenta que no escuchaba los gruñidos de Hoseok y pretendía prestarle atención a Namjoon.

Jimin nego, no entedia a esos dos. Por que no simplemente admitían que estaban locos el uno por el otro y dejaban aún lado su “rivalidad”. Escucho como Taehyung se reía hasta el final del autobús (causa de ser el último en la fila) y al voltear a mirarlo, éste lo saludo con una de sus características sonrisas cuadradas. Sus mejillas se tiñeron de carmín. Bueno, no es como si confesarse a quien te gusta fuera algo fácil.

Una Extraña Enemistad [HopeGa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora