Campo de Fuego (III)

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Naruto miró al carruaje con pesadez. Era tan grande que parecía una casa pequeña y estaba siendo tirado por cuarenta caballos. Dentro estaba su hermana seguramente. Estandartes de leones rojos en un fondo de plata volaban en el cielo junto con el de su propia casa.

Los Reyne era una casa hermana. Su medio hermana mayor se había casado cuando tenía 17 años, y su mano derecha Gawain Reyne, había nacido de ese 'próspero' matrimonio para su suerte.

— Y decias que me parecía — escucho a Visenya a su lado mientras apretaba su brazo haciendo que se sujetaba — Yo nunca me montaria en una cosa así —

Naruto solo pudo soltar una risa camuflada, pero darle totalmente la razón a la reina. Su hermana se parecía a ella en lo oscura y seria. En eso se parecía, no en que una tenía problemas psicológicos y paranoicos, como su hermana.

— No en todo os parecéis, mi reina — comentó Naruto mientras se giraba y daba una sonrisa a la mujer de su lado y ver como las mejillas de estas se colocaban un poco. Deducía que era vergüenza o enfado — Pero cada uno tiene sus problemas. Excepto yo —

Vio de reojo como esos ojos amatistas rodaban hacia atrás con molestia clara. Porque se sentía tan relajado con ella a su lado. La había conocido hace unas horas, pero es como si la conociera desde hace tiempo.

Era por el extraño parecido que su cabeza quería hacer con Sayuri. Una mujer fuerte, independiente, oscura, extraña relación con fuego y con problemas de confianza que no dejaba salir, pero se podía ver perfectamente cuando la conocías.

No quería entrar más en ese torbellino de pensamientos que era su cabeza ahora mismo y más cuando tenía a la pesada de su hermana a punto de salir por esa puerta del carruaje — Tyson — o ya había salido

— Morgana — saludo a su hermana. El  pelo rubio pálido, que parecía blanco, lo tenía tan largo que caía por su espalda, pero había rastas en su pelo decorando. Los ojos azules oscuros no tenian nada de emocion y parecian mas negros que azules. Tenía un vestido negro, plateado y dorado. Las joyas sonaban mientras levantaba su mano para que fuera besada, la cual no iba a ser besada — Te veo igual de estirada como siempre —

Naruto le regaló una sonrisa a su hermana, la cual frunció el ceño y bajó su mano un poco molesta — Te veo igual de chistoso como siempre querido hermanito — comentó Morgana su voz

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Naruto le regaló una sonrisa a su hermana, la cual frunció el ceño y bajó su mano un poco molesta — Te veo igual de chistoso como siempre querido hermanito — comentó Morgana su voz. Sonaba como siempre fría y alejada.

— Espero. No me gustaría perder lo único que me diferencia de ti — vio cómo el ceño fruncido se profundiza —Ahora querida hermana, esta mujer tan bella a mi lado, para mi suerte no es mi esposa, pero te puedo presentar a la Reina Visenya Targaryen, mi... —

— Prisionera — comentó Visenya normal mientras baja su cabeza y la saludaba todavía agarrada de su brazo — Su majestad Tyson me ha comentado sobre usted sin importar mi posición, todo cosas buenas —

Historias de Naruto por la Historia de PonienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora