Jiang X1n

✿╏ Extra II. Rey de los platos venenosos

En medio de la noche, hubo un fuerte viento, truenos y relámpagos fuera de la casa.

Lu Shang normalmente dormía poco, y se despertó con los truenos. Últimamente, había estado muy ocioso, no se cansaba en absoluto durante el día, así que si se despertaba por la noche, le sería imposible volver a dormirse. Así que, habitualmente, miraba por la ventana.

Tal vez debido al efecto de El Niño, el tiempo en los últimos años había sido bastante extremo. O bien hacía tanto calor que era un completo dolor estar fuera o bien llovía a cántaros con graves inundaciones. Al ver la enorme lluvia de esta noche, Lu Shang se preguntó cuánta gente iba a sufrir de nuevo las inundaciones.

Mientras Lu Shang pensaba, un calor junto con una cabeza peluda se acercó de repente a la nuca de Lu Shang.

Una vez más, varios truenos resonaron en el cielo. Eran terriblemente fuertes, como si los sonidos estuvieran justo en sus oídos, incluso el sistema de alarma de los vehículos se activó por los fuertes truenos. En la oscuridad, Li Sui rodeó con sus brazos la cintura de Lu Shang y susurró: "¿Tienes miedo?".

Lu Shang se inclinó hacia él, hizo una pausa por un momento y luego su boca esbozó una ligera sonrisa: "Un poco".

"No lo estés, me aferraré a ti". Li Sui se apresuró a acercarse y acortar la distancia, abrazó a Lu Shang con fuerza, hasta estar pegados.

Los truenos continuaban, y parecían ser cada vez más fuertes. En la oscuridad, Lu Shang reía sin emitir ningún sonido. Relajó su cuerpo y dejó que Li Sui lo abrazara con fuerza, no señaló los latidos anormalmente acelerados que venían por detrás de él.

Llovió toda la noche y sólo dejó de hacerlo cuando llegó el amanecer. Cuando abrieron la puerta por la mañana, les dio un ligero susto. Las calles de abajo estaban llenas de aguas residuales, había ramas flotantes y basura por todas partes. El agua estaba a la altura de la parte inferior de la pierna de un adulto.

"No es seguro salir, quédate en casa hoy", dijo Lu Shang, deteniendo a Li Sui que estaba a punto de salir a trabajar, su tono sonaba autoritario.

Originalmente, Li Sui había planeado algunas reuniones con socios de cooperación por la mañana. A juzgar por la inundación actual, el tráfico de hoy debía ser malo. Llamó y, como era de esperar, entre los cuatro socios de cooperación, tres estaban atascados en el tráfico, así que decidieron cancelar la reunión por ahora. También llamó a la tía Lu para comunicarle que no tenía que ir a trabajar hoy. Li Sui se arremangó y preparó el desayuno para Lu Shang.

"¿Ya tomaste tu medicina?", preguntó Li Sui.

Lu Shang estaba viendo las noticias y dijo sin prestar mucha atención a Li Sui: "Lo haré más tarde".

Li Sui puso los huevos fritos en un plato y vio que Lu Shang no se movía. Subió las escaleras y recogió la medicina, luego sirvió un vaso de agua para Lu Shang. Li Sui le dio el vaso a Lu Shang y le preguntó: "¿Qué estás viendo? ¿Qué te encapricha tanto?".

En el televisor ponían las noticias locales de la mañana. Anoche, algunas aldeas cercanas estaban gravemente inundadas, varias escuelas también lo estaban. Los departamentos competentes estaban organizando las labores de rescate, pero no eran optimistas.

Lu Shang frunció el ceño y se tragó la medicina, luego sacudió la cabeza.

Durante la comida, los dos charlaron un rato. Entonces, Li Sui se dio cuenta de que Lu Shang estaba un poco distraído hoy. Extendió la mano y tocó la frente de Lu Shang: "¿Te sientes mal?".

"No". Lu Shang retiró la mano y vio que Li Sui seguía mirándolo. Lu Shang explicó después de pensarlo un poco: "Sólo estoy pensando en un viejo asunto. Cuando la industria del préstamo estaba en alza hace unos años, una pequeña empresa de préstamos vino a verme con la esperanza de cooperar con Tong Yan. Querían ofrecer algunos préstamos para aliviar la pobreza a los aldeanos. En aquel momento no vi potencial en la industria, además de que los beneficios no eran elevados, así que dejé de lado el asunto. Mirando ahora hacia atrás, debería haberle prestado más atención".