Verdad tras verdad

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Alessandro Grey

Un silencio inundó la sala acompañado de movimientos incómodos por parte de mi familia, sin embargo yo estaba de lo más de tranquilo, como ya es de costumbre mi padre molestó se levantó de su mueble y se sirvió una copa de vino, todo esto bajo la atenta mirada de mi madre a quién le molesta que beba a frente a ella.

—Deja de hacer tanto drama Alessandro y dinos de una maldita vez que es lo que sucede

—No estoy haciendo drama, sencillamente no soy yo quien debería de estar de pie frente a ustedes

—¿Y según tu quien debería de estar hay de pie Alessandro? Déjate se estupideces y di de una maldita vez lo que tienes que decir

—Empecemos por lo básico, no hablarán a menos que yo de el permiso, no alzarán la voz, no me interrumpirán y por último, en este lugar mando yo y a donde sea que vaya mando yo, ahora mismo ninguno de ustedes tiene el poder suficiente para dar órdenes aquí

Dejando eso en claro, mi familia guardo silencio, pasaron cinco segundo hasta que tomo un poco de aire por lo nariz y lo boto lentamente.

—Alguien intenta matar a un miembro de esta familia y aún no sé a quién exactamente, las llamadas que han estado haciendo para amenazar a la familia se han estado haciendo desde la casa Grey — Después de decir aquello puede ver el terror en los rostros de casi todos los presentes —

—No estoy entiendo nada... — Las palabras de Emily salían por si solas y entre susurros, se podía apreciar que se encontraba bastante perturbada — No entiendo nada...

—¿Que no entiendes Emily? — Dije mientras l observaba atentamente —

—Todo...no hay nada que este entendiendo, me estoy desesperado y al mismo tiempo cansando...

—Hagamos algo, se que Emily no es la única que se encuentra en ese estado, digan todo lo que sienten y hagan todas las preguntas que quieran

—¿Porque nunca nos hablaste de este lugar Alessandro? — El primero en hablar fue mi padre y no pregunto de manera amable —

—No tengo porque hablarles de nada si no me complace hacerlo, mandé a construir está mansion a los dieciocho años

—¿Quienes son esos hombres? — Con voz temblorosa pregunto Alejandra —

Antes de contestarle, la observé de pies a cabeza, después la mire a los ojos por varios segundos, desde lejos podía ver qué se estaba poniendo nerviosa y sin nadie esperarlo, contesté la pregunta de Alejandra provocando que se asusten.

—Trabajan para mí, los movimientos que hacen es por respeto, les recomiendo — Hice una pausa de tres segundo para después hablar nuevamente — No, les ordenó que no se les acerquen y mucho menos hablen con ellos

—¿Porque tiene esos animales aquí? — Está vez hablo Tokio —

—Cuidan y ayudan a mis hombres con la mansión

—¿En que lugar o países estamos exactamente? — Pregunta Gabriel mientras miraba todo el lugar —

—Estamos en Rusia, pero si las cosas van mal, tendremos que irnos a otro lado que es preferible no ir, en el caso de ustedes

—¿Y a donde iríamos en ese caso? — Pregunta Alejandra —

La miró fijamente y sin evitarlos mis vista viaja a un pequeño bicho que tiene en cuello de la camisa.

—Tienes un bicho en el cuello de la camisa — Por un momento jure verla pálida —

—No importa, no has respondido mi pregunta

There are secretsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora