Registro de Contraataques de Transmigracion Rápida de la Carne de Cañon (2)

Capítulo 267: Debería lavar tu alma sucia

Situ Qingyu no era el único que había cambiado repentinamente su actitud hacia ella, Luo Junyan había comenzado a venir a la residencia del primer ministro todos los días con regalos. Todos eran preciosos tesoros raros.

Ning Shu sospechó aún más. ¿Estos dos estaban tratando de cortejarla? Se cubrió la cara, emocionada. Nunca se había imaginado que, como una persona que ni siquiera tenía cinco puntos de encanto, algún día tendría gente tratando de cortejarla. Nunca había recibido tal trato cuando era carne de cañón.

Sin embargo, su entusiasmo pronto fue aplastado. El guardia oculto dijo: –Esos dos hicieron una apuesta para ver quién podía hacer que te enamoraras primero. No me preguntes cómo lo sé, simplemente lo sé. Bien, estaba escuchando a escondidas.

Ning Shu se sintió estúpida por estar emocionada. Resultó ser una simple apuesta de quien se queda con el corazón de la belleza se queda con la belleza.

Ning Shu:...

Como era de esperar, los perros no pudieron cambiar su hábito de comer mierda.

Por un momento, en realidad pensó que había ganado encanto, pero los protagonistas masculinos solo se sentían atraídos por este cuerpo de protagonista femenino. No tenía nada que ver con su encanto personal.

Ahora Luo Junyan estaba flotando frente a ella nuevamente.

Cuando Ning Shu observó su expresión tiránica de presidente, supo que estaba a punto de comenzar a brotar algunas palabras temáticas.

– Mujer, ven con este príncipe. Este príncipe puede darte un estatus noble y una vida más lujosa –. Luo Junyan le ofreció la mano a Ning Shu. –Este príncipe te apreciará.

– He oído que hay más de treinta concubinas en su residencia ya. Si esta humilde niña va, ¿no será esta humilde niña destrozada inmediatamente por esas concubinas? – Ning Shu hizo una expresión de miedo e impotencia mientras negaba con la cabeza. –No hay muchas mujeres aquí.

– Este príncipe está dispuesto a dispersar su patio trasero por ti. ¡Eres la única que este príncipe desea tener! – Luo Junyan estaba bastante agitado, su saliva casi golpeó la cara de Ning Shu. Ella se cubrió apresuradamente la cara con un pañuelo, dejando ver solo sus ojos grandes y brillantes mientras decía: –Pero esta humilde chica no se atreve a creerle al príncipe. ¿Y qué van a hacer esas otras mujeres si las echan?

– A partir de ahora, serás la única mujer de este príncipe. Este príncipe no tocará a Ninguna otra mujer. No necesitas preocuparte por esas mujeres, este príncipe les dará una suma de dinero que será suficiente para que sigan viviendo –. Luo Junyan prometió apasionadamente.

Ning Shu: Joder, ¡qué cabrón! Todo lo que le importaba era follar, después de eso, ¿la perseguiría sin importarle?

Qué repugnante.

Ning Shu estaba extremadamente disgustada con él. Nunca había considerado lo difícil que sería para esas mujeres una vez que las echaran. Esta era la era antigua extremadamente estricta que todavía defendía los tres principios y las cinco virtudes con meticulosidad. Incluso cuando la protagonista femenina vivía felizmente con los siete pequeños enanos, todavía tenían que encontrar un lugar remoto para llevar a cabo sus vidas a fin de evitar el juicio público.

Ning Shu recogió la taza de la mesa de piedra y le arrojó el agua a la cara. "¡Maldito, deberías lavarte el alma sucia!"

– ¡Ah! ¿Qué le pasó a mi mano? ¿Por qué se salió de control? Wuuwuuwuuu... –Mientras se limpiaba las lágrimas, salió corriendo del pabellón, ignorando la expresión de conmoción en el rostro empapado de Luo Junyan.

– Señorita, espere a esta sirvienta, espere a esta sirvienta, ¡ah!– Yue Lan persiguió a Ning Shu. – !¡Señorita!

Ning Shu corrió todo el camino de regreso a su habitación. Yue Lan había corrido tan fuerte que casi no podía respirar. Mientras jadeaba para recuperar el aliento, balbuceó: –Señorita, ¿por qué, por qué nunca espera a esta sirvienta?

Ning Shu bebió una taza de té y luego dio un largo suspiro. Después de eso, se volvió hacia Yue Lan y dijo: –Su señorita está a punto de dejar este lugar. ¿Qué vas a hacer?

– Esta sirvienta seguirá a la señorita. En vida, esta sirvienta será la sirvienta de la señorita, en la muerte, esta sirvienta será el fantasma de la señorita. Señorita, no deje a esta sirvienta atrás –. La expresión de Yue Lan era resuelta.

Ning Shu ya no quería lidiar con esos dos hombres, así que decidió darse prisa e irse mientras pudiera. Sin embargo, antes de irse, primero tenía que darle al general y al príncipe un gran trauma.

El hecho de que hubiera logrado evitar ser violada por estos dos contaba como completar la mitad de la tarea, ya que de alguna manera, había logrado evitar la historia original.

No podía retrasar más las cosas. Si a esos dos se les acababa la paciencia y la violaban directamente, ni siquiera tendría un lugar para llorar.

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