𝓓𝓮𝓼𝓬𝓸𝓷𝓸𝓬𝓲𝓭𝓸 - ˢᵗᵃᵗᵉʰᵘᵐᵃⁿˢ -

Capítulo 22

Nota: acabo de terminar el volumen 4 de Sha Po Lang así que no me hago responsable de nada de lo que pase aquí.
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México regresó a la hacienda, todo estaba silencioso, era de esperar ya que la situación se había puesto muy tensa en tampoco tiempo.

Tenía información nueva más comenzaba a tener un sentimiento extraño, algo le decía que no debía decírselo a nadie.

Era como un sexto sentido — aparte del paternal — que le decía que algo andaba mal, no aparecía mucho, solo de vez en cuando, la mayoría de veces desgraciadamente había acertado. Como la vez que sintió que no debían enviar los barcos petroleros, terminaron hundidos lo que lo llevo a meterse en la segunda guerra mundial junto con sus águilas, también apareció el día de la conquista, sentía que algo estaba mal y que sucedería un gran cambio.

Con todo el dolor de su corazón, comenzó a hacerse ideas que no sonaban tan bien, le incomodan incluso le causaban alguna clase de desprecio o asco.

Esperaba que su sexto sentido se equivocara está vez.

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Baja California Sur dormía tranquilo en su habitación, ya había recuperado el color que perdió hace algunas horas después de caer desmayado.

El último recipiente de suero con medicina se filtraba a su sangre y cuerpo.

— Ya se encuentra mejor — afirmó el médico aunque todos podían notarlo, sintieron como su respiración se liberó.

— ¿Que le pasó? — preguntó Baja California preocupado por el Estado de su hermano.

— Aún lo estamos analizando — volteo a ver a México buscando alguna clase de indicación o permiso, eso aparentaba, México asintió y el médico regresó su mirada a los Estados — al parecer es un síntoma nuevo que se presenta con el químico pero no estamos seguros para sacar esas conclusiones. — concluyó.

— ¿El químico? — Baja California tenía muchas dudas y pocas respuestas.

— Si — el médico no quería hablar más, no solo por lo que eso implicaba sino porque no tenía la información necesaria para poder informar como era debido — Despertará a más tardar en dos horas, después de eso podrá regresar a hacer sus actividades diarias solo tiene que reposar si se llega a sentir mal de nuevo — informó — llámenme si necesitan algo — se despidió.

— Muchas gracias Doctor — los estados agradecieron en coro antes de que el médico se fuera.

Baja California suspiro con alivio después de que el doctor se fuera, su hermano del alma estaba bien y eso lo alegraba mucho.

— Que alivio — exclamó con exageración — Si se moría él, yo también.

— Literal

Los Estados comenzaban a recuperar su compostura calmada y relajista. México sonrió ante la vista de sus hijos comportándose poco a poco como antes.

Era conocimiento común que las cosas no podrían regresar a ser como antes, necesitaban resolver el principal problema antes de poder hacerlo, necesitaban recuperar a los incapacitados.

Sin ellos las cosas no eran igual.

09 de Noviembre. Ciudad de México, Isla México.

Veracruz entró nuevamente a esa habitación.

A pesar del dolor físico y mental que tenía en esos momentos no podía faltar a su palabra de acompañarlo todos los días.

Desde ese día en que esa persona se apareció en la habitación Oaxaca no había dado otra señal, lo que ocasionaba que Veracruz perdiera un poco de esperanza con el pasar de los días.