~ ¿Pasado o felicidad? ~ [ TaniZai - Soukoku ]

Primer encuentro y el beso 🎐

Aquel día en el colegio era como otros: con los maestros avanzando su área asignada y los alumnos prestando las máxima atención posible. Junichiro Tanizaki estaba entre aquellos estudiantes, sin embargo este miraba por la ventana hacia la salida de su colegio. Su aula estaba en el 3 piso de aquel edificio y su sitio junto a la ventana, justamente por ello era que la vista de la entrada era increíble... De repente vió algo que le llamó bastante la atención; un chico entraba al colegio con una calma que resultaba desesperante. Para Junichiro era bastante extraño que un alumno ( si ese chico lo era ) entrara al colegio siendo tan tarde y más con esa calma, lo siguió con la mirada hasta que desapareció de su vista. Estuvo pensando en aquel castaño hasta que el profesor le pidió que leyera cierto artículo. Tanizaki se puso de pie y leyó lo pedido. Después olvidó por completo al chico castaño. Simplemente creyó que era un alumno desinteresado de esos y ya... No le vio nada raro... Desde ese momento se enfocó en prestarle atención al maestro, tal vez fue por eso que no vió cuando una ambulancia se estacionaba en la entrada y varios profesores del edificio 1 acompañaban a dos paramédicos que a su vez empujaban una camilla en la que estaba aquel chico castaño... Y si. Esa fue la primera vez que Junichiro vió a Dazai. La primera y sin embargo no le había dado una impresión especial. De hecho, no volvió a recordar a ese chico ni la situación en la que lo conoció hasta años después... Cuando lo vió en la agencia. Fue totalmente inútil que el pelinaranja tratara de evitar por completo a Dazai. Este resultaba ser incluso a veces muy engorroso. Sin embargo, Tanizaki se las arregló para saber si aquel día el castaño lo había visto. Mas Dazai se encontraba extrañado por su comportamiento, incluso llegó a creer que le gustaba al pelinaranja por los nervios y ganas de evitarlo del ya mencionado... Aún así todo esto quedó en el olvido luego de un tiempo y Junichiro pudo continuar tranquilo su trabajo. Igual que Dazai, sea lo que sea que estuviera haciendo.

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La mayoría de veces que trataba de suicidarse, Dazai era rescatado por una buena persona que pasaba por el río y lo veía o por el mismo Atsushi quien ya empezaba a acostumbrarse a su actitud. Sin embargo aquel día fue distinto, cuando abrió los ojos no vió al albino, en su lugar vió a un Tanizaki con el pelo y la ropa mojados. La luz del sol ya ocultándose hizo que el brillante pelo de Tanizaki fuera como fuego, al menos así le pareció al castaño, este se puso de pie y miró a Tanizaki ( que aún no notaba que Dazai se había levantado pues estaba muy absorto mirando el atardecer ) y como si fuera un impulso inevitable le acarició el cabello. Tanizaki se exaltó ante aquella acción y volteó de inmediato, al ver a Dazai ya de pie sonrió.

- Al fin despiertas... estaba a punto de hacerte respiración boca a boca - Obviamente aquello lo decía en broma, pero hizo que Dazai se sonrojara levemente. Tanizaki aún con su sonrisa se puso de pie y se sacudió la ropa.

Era bastante extraño lo que sentía Dazai en aquel momento, una mezcla de emoción y admiración al chico que tenía delante. Recordó que había sentido aquello solo por una persona : Chuya... El castaño sacudió su cabeza un poco y suspiró, creía imposible sentir aquello por otra persona ahora... luego del engaño del pelirrojo había quedado más que convencido de que el amor no era para él, además por qué tan de repente? conocía a Tanizaki hace mucho, no? De no ser aquello lo que sentía... entonces que era?
El pelinaranja pareció notar la turbación de su compañero y pasó una mano delante de su rostro para sacarlo del trance.

- Hey Dazai! estás bien?

- Eh? S-Si... estoy perfectamente...

Tanizaki dijo algo sobre una misión que tenía que resolver con Kunikida y que ya se había tardado mucho, luego procedió a despedirse y empezar a caminar hacia el puente. Sin embargo Dazai lo jaló impidiendo que se fuera. De esta manera quedaron en una posición un tanto comprometedora, el castaño lo tenía abrazado por la cintura mientras el pelinaranja tenía ambas manos en el pecho del contrario. Las mejillas de ambos cobraron un tono carmesí leve. Pese a aquello Dazai sonrió dulcemente ( eso le pareció a Tanizaki aunque jamás lo había visto sonreír así ) y así mismo le dió un tierno beso. El pelinaranja estaba muy confundido y sobre todo: asustado.
Cuando se separaron ambos estaban sonrojados, sin embargo Tanizaki fue quien no dejó hablar al otro y se fue como alma que lleva el diablo por dos razones:

- Estaba avergonzado y creía muy fervientemente que aquello había sido un error o un juego del castaño.

- Y por último, Kunikida lo esperaba para la misión y ya se había tardado mucho.

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