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La lluvia caía pesadamente, golpeando cada gota fuertemente contra su ventana, era como si el cielo supiera su dolor y estuviera llorando sus lágrimas; las lágrimas que ya no querían seguir cayendo por su rostro para no demostrar su debilidad y que había caído cruelmente en la trampa del amor. O más como una trampa de desilusiones.

A un lado en la mesa cerca a la ventana, una taza de chocolate caliente yacía desde hace ya 20 minutos cuando el ama de llaves ingresó a la habitación ofreciendo la caliente bebida para combatir el intenso frío. Faltaban solo 3 días para uno de los días más especiales del año, sin embargo la emoción que pudo sentir cualquier otro de los años pasados estaba completamente desvanecida. Para él esa fecha sólo significaba un día más cerca a decir adiós al hogar que lo albergaba. Una lágrima traviesa recorrió su rostro al recuerdo de las palabras de su esposo hace dos días.

"¿qué harás cuando regreses a Boston?"

Esas palabras habían terminado por derrumbar todo rastro de esperanza en su corazón. Sabía que era irónico como hace año y medio juro que nunca podría amar a ese hombre cuando éste rogaba de rodillas por una oportunidad y ahora parecía como si los papeles hubieran cambiado y era Yoongi el que silenciosamente rogaba por una oportunidad para no abandonar el lado del hombre que paso a paso se había ido ganando su corazón.

-¿Yoongi?.... te traje otro... - el ama de llaves observó la taza que no había sido tocada sobre la mesa, intercambiándola por una nueva llena con el líquido caliente.

-¿se fueron?... ¿e-esa mujer sigue acá? – interrogó Yoongi sin quitar los ojos de las gotas que seguían golpeando contra su ventana Seokjin sabía perfectamente a quien se refería su joven amigo. Kim Jennie había llegado a la mansión un par de horas antes que la espesa lluvia empezara a caer. Ahora mismo Jennie y Jungkook se encontraban encerrados una vez más en el despacho de éste. Exactamente como los últimos dos días.

Los dos días que Jungkook había estado completamente distante de Yoongi, evidentemente evitando estar cerca a él.

-siguen en el despacho – respondió Seokjin con voz serena, pasando el brazo sobre los hombros del menor

-te puedo confesar algo Seokjin... - Yoongi apoyó su cabeza en el hombro del ama de llaves, dejando que la pesadez en su corazón se aligerara.








Park Jimin jugaba con el control remoto del televisor mientras su novio daba vueltas con la cabeza baja por todo el pequeño departamento, el apuesto doctor ya se había acostumbrado a esta nueva rutina de su novio, aprendida los últimos 3 días desde que su mejor amigo Jeon Jungkook le informó del regreso de su ex novia.

-vas a hacer un hoyo en el piso – habló Jimin sin ganas, fingiendo concentración en el televisor

-no puedo dejar de pensar en esos dos... ¡Jungkook es un completo idiota! – se quejó Taehyung, acomodándose en el sofá al lado de su novio

-eso lo sabemos todos, pero no hay mucho que podamos hacer al respecto – Jimin pasó un brazo alrededor de la cintura de su novio, trayéndolo más cerca a él.

-¡cómo puede ser tan idiota de creer en Jennie! ¡Y peor aún dejarse convencer por ese truco tan pasado de moda!

-¡hey no te molestes conmigo! ¡El idiota es Jungkook! – reclamó Jimin ante el repentino cambio en el tono de voz de su dulce novio

El Bello y la Bestia - KOOKGI (ADAPTACIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora