Skater Boy (Robby Keene/Hawk)

14

A mitad de mi sueño, me desperté. Tenía demasiada hambre incluso si había fumado un par de cigarros. Cheque mi teléfono y Tory me estaba invitando a una fiesta junto a los cobra Kai.

Mi tía era más abierta, era la clase de persona que no le pides permiso, solo le avisas.

Me mire al espejo. Me veía demasiado demacrada y enferma, tenía mis ojeras muy remarcadas al igual que las clavículas, y me veía demasiado pálida. Cheque otras partes de mi cuerpo, mis costillas empezaban a notarse un poco y tenía moretones por todo el cuerpo. Mi muñeca ya podía cerrarse si la rodeaba con mi mano, y mis brazos tenían unos vellos particulares, bueno, en realidad era lanugo.

Quizás había llegado demasiado lejos? Me sentía en conflicto, por un lado me veía delgada, frágil, pero por otro lado me estaba arruinando.

Quería ser capaz de tener mayor control, ya de ni si quiera tener hambre y poder hacer mis cosas con normalidad, sin que sintiera demasiado frío, sin que me desmaye, sin que tenga que ver con comida todo el tiempo.

Y aún así, aunque fuera delgada, me seguía sintiendo igual. No había cambiado nada y me había mentido a mi misma todo este tiempo, odiaba mi cuerpo, odiaba las estrías asquerosas en el por haber perdido tanto peso, la piel floja que me quedaba de ello.

Pero no quise pensar más en eso, quizás hoy, si bebía un poco más, se me iba a olvidar todo.

Me maquille el rostro, intentando ocultar las facciones que me hacían ver enferma, y también en dónde estaban las estrías, pues quería usar un vestido.

Me fui en mi auto a la fiesta y me encontré con Tory, quien se divertía bastante con los demás, Aisha no había ido.

Tory me llevo con los demás y comenzamos a jugar beer pong, y a mí me tocó beber.

Me sentía fuera de mi misma, nunca había bebido tanto. Y entonces uno de los chicos de cobra Kai se me acercó:

-Oí lo que te dijo el sensei, eso apesta.
Asentí.

-Sabes? Estás pastillas me ayudan a concentrarme, y además, te quitan el hambre.

-Lo quedé viendo, desconfiada-

-Oh vamos, es bastante obvio que tienes un problema. 

-Intentas drogarme?

-Claro que no, intento ayudarte a quedarte en el equipo. Me las receta el psiquiatra por el déficit de atención. Es más -Dijo abriendo el frasco y tomándose una pastilla- mira los efectos.

Al tomar la pastilla el chico se veía más eufórico, con más energía y concentrado. No sabía si podría estar fingiendo. Me quedaba poca confianza en los demás.

Regreso a sentarse conmigo.

-Y bien?
-Como se llama tu medicamento?
-Aderrall.
-Dame unos minutos y regreso aquí, está bien?

Fui al baño a buscar en el navegador sobre el Aderall y lo que me decía era cierto. Era justo lo que necesitaba.

Sin pensarlo más, acepte una pastilla y comencé a sentir demasiada energía y concentración. Fue como una bomba junto a lo que había bebido pues me sentía más despierta que nunca.

-Si quieres más, este es mi número- me dijo el chico
Guarde su número, resultaba obvio que querría más.

Me puse a bailar con mis amigos a una manera más suelta, y con Tory, Miguel y Hawk nos estábamos divirtiendo bastante. Estaba feliz de que ellos estuvieran ahí. No me sentía en mis cinco sentidos. Pronto, Miguel y Tory se pusieron a bailar juntos más cerca, así que me quedé bailando con Hawk, pero de lejos.