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Había olvidado lo genial que era caminar bajo la luna, también había olvidado la libertad que solía sentir en momentos como este, apenas llegué, todo estaba a oscuras, mis compañeros salieron de igual manera, y los que están, debieron dormirse, después de todo, nuestro ultimo año viene con muchos problemas, me quedé sentaba afuera, comiendo la ultima brocheta, Katsuki solía quedarse despierto hasta que llegara...

— Bienvenida – miré al causante de esa voz, frente a mí, mi hermano sostenía un bento – tu favorito.

— Gracias – lo tomé sintiendo el calor de comida – esta bueno – mis lagrimas bajaban impidiendo ver con claridad.

— ¿Qué hiciste el día de hoy?

— Papeleo, Endevor, mando papeles – trataba de seguir con mi entusiasmo, al igual que Katsuki se había sentado frente a mí – tendré una misión pronto, ya sabes, dice que debo presumir que tengo un buen maestro. ¿Qué tal el tuyo?

— Bien, las clases algo pesadas – comenzó a sobarme la espalda, haciendo que siga llorando – iré a dormir, duerme tu también, la vieja bruja salió con el viejo de viaje.

— Podemos hacer pijamada y ver películas.

— Debes levantarte temprano.

— Un día sin dormir, no hay problema.

— ¿Qué veremos?

— All Might, tu favorito – rompí a llorar – con un poco de curry picante.

— ¿En el salón?

— Donde gustes – dejé a un lado mi comida abrazándolo.

— No debes guardarte estas cosas – me abrazaba, habíamos dicho lo que siempre hacíamos cuando volvía a casa.

— Hermano..., quiero volver a verlos – lo abracé con fuerza – quiero que estén en mi graduación, quiero enamorarme, quiero casarme, quiero que papá me lleve al altar y tu amenaces a mi pareja y que mamá te golpee por hacerlo.

— Hermana...

— Quiero verte crecer, quiero verte cumplir tu sueño – aferrarme a él mientras lloro y tiemblo como gelatina había sido un detonante que no esperaba.

— Hermana, lo harás, y yo haré todo eso, somos fuertes, estarás bien, regresaras de tu misión, me darás comida picante cuando vuelvas y hablaremos de lo que hiciste para luego mirar el cielo – sentir su voz quebrarse dolía.

— Hermano, quiero que te cuides mucho, yo estaré bien – escuché algunos pasos venir en nuestra dirección, pero simplemente, no podía detenerme – te quiero hermano.

— También te quiero.

— ¿Katsumi? ¿estas bien? – frente a mí, Hado-san se veía preocupada, asique solo asentí.

— Si, sólo, fue un momento que recordé y eso, estoy bien – tomé la caja de comida ya vacía, y se la devolví a Katsuki – gracias hermano.

— Si, descansa – lo vi irse, pero se detuvo al ver a otra presencia ahí - ¿qué hacen aquí pelos de mierda y pikachu?

— ¿He? Bueno, te tardaste, asique vinimos a verte – yo los miraba, eran buenos chicos, Katsuki tiene buenos amigos, tomé mis cosas caminando hacía la entrada - ¡Katsumi-sempai! ¡espere!

— ¿Ah? ¿qué sucede? – Kirishima se veía nervioso, mientras que los demás nos daban espacio, claro que Kaminari se llevó a Katsuki - ¿vas hablar?

— ¡Lo siento! – se estaba disculpando con reverencia y todo – no quería hacerte sentir mal, sólo que creí que no sería correcto decir que tuvimos una cita sin tu consentimiento, también lamento ser el causante de haberte hecho llorar.

Hermana de Katsuki Bakugou - Eijiro KirishimaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora