Papá soltero✔ Hija prodigio✔ Y...¿¡Mamá sustituta!?✔

18: Una sonrisa de hipocresía.

Shikamaru y Temari fueron los primeros en llegar apenas la noticia sobre la rubia se esparció en la aldea, Choji y Karui tampoco se hicieron esperar, llevando con ellos un poco de comida y regalos. En cuestión de minutos una celebración pequeña tomo forma, por supuesto que la vivacidad de Lee no podía faltar, ni la dulce Temari. La sala principal de la recidencia Uzumaki se llenó de risas y voces.

Ino, pesé al cansancio que su cuerpo todavía presentaba, no podía permitirse quedar atrás, recibió tantos abrazos como lágrimas de parte de esos amigos que sin duda ya estaban como una segunda familia para ella. Sin embargo ninguno le permitió colaborar en la cocina, vaya, técnicamente su cocina, y no lo decía por su relación (al fin formal) con el rubio, no, lo decía porque apenas sus piernas tuvieron fuerzas para sostenerse comenzó sus quehaceres domésticos, aunque Naruto le hubiese arrebatado la escoba apenas la vio quitando las telarañas de las repisas. Sintiéndose inevitablemente inútil, se rindió dejándose caer en el sofá individual, las risas y el ajetreo de trastes llegaron hasta sus oídos, muy sobre la música que alguien había puesto, un ambiente culinario y cálido del cual estaba rotundamente excluida.

Dormí durante un par de días, no se me cayeron las manos. Alegó pero todos la ignoraron de manera olímpica, casi empujándola fuera del lugar.

Y Naruto, ese traidor. Fue el que la saco a rastras llevándola lejos de la zona de trabajo y dejándole en la desértica sala, porque todos estaban en la cocina. Exceptuando a Tsunade que simplemente se quedó en el comedor destapando con una singular alegría la botella de sake que Choji había llevado. Miró a Himawari construir un nido con los cojines de los sofás en el piso, dejando a sus peluches sobre estos mientras fingía darles órdenes de cuidar a la muñeca de vestido amarillo y cabello revuelto que parecía ser la princesa de un grandioso reino imaginario. Ino pensó en los grandes y fantásticos escenarios que estaban en la mente de la pequeña, sonriendo de ternura, la niña también giró a verla regalándole la sonrisa más pura que pudo presenciar.

-¡Ino-shan!

Abrió los brazos recibiendo el pequeño cuerpecito que corrió en su dirección, sintió sus manitas aferrarse a su cintura. No, la felicidad en su pecho no contaba con ninguna descripción posible. Acarició esos finos mechones azabaches, esas mejillas redonditas y esa frente diminuta, un angelito que iluminó su vida y la llevo sin problemas a la felicidad. Porque esa niña no solo robo su corazón, también lo unió con el hombre al cuál amaba.

-¿Quiedes juga comigo?

Deposito un beso en su cabecita.-Claro que sí mi cielo.

Bien, tal vez no pudo cocinar el guisado de ciervo que tanto quería probar, sin embargo fue una reina ada que había sido secuestrada por un feroz simio ogro que la encerró en una torre muy alta, la cual fue rescatada por la mejor ninja de toda Konohagakure que derroto al villano con un jutsu de cosquillas mortales.
Cuando los demás entraron llevando consigo una variedad de platos con el olor más delicioso que pudieron imaginar, Himawari lanzaba su ataque de patadas especial mientras Ino clamaba que su heroína saliera victoriosa. Naruto se unió a la historia levantando a la poderosa ninja por el aire y dando vueltas con ella entre risas escandalosas.

Más risas, más pláticas. Ya no era capaz de negar cuan feliz estaba.

Su familia, en toda la extensión de la palabra. Sus ojos encontraron los de Naruto, al otro lado de la estancia que servía los platos de comida, y de nuevo esa explosión de sentimientos arrasó con todo a su paso.

-La próxima vez traeré a ChoCho para que juegue con Hima -Dijo Karui sentándose en el sillón consiguiente al suyo. La voz de la mujer la regreso de golpe a la realidad girandose para verle.

-Vaya, eso sería muy bueno. Hima parece querer mucho a ChoCho, creo que esperaba que viniera hoy.

-Sí, quería traerla pero ya sabes lo hiperactiva que es, y todavía no teníamos claro... -Bajo la mirada buscando la mejor palabra, pero Ino lo entendió.

-¿Qué tan bien estaba?

Karui rió. Qué tan mal estaba. Esa venía siendo la verdadera pregunta, la tristeza en los ojos de la morena le hizo preguntarse qué tan mal la vieron para temblar con solo verla bostezar.

Unos fuertes golpes en la puerta hicieron que Naruto abandonará su tarea dejándosela a Shikamaru que de mala gana recibió el cucharón alegando que él era un invitado.

Soltó una risotada antes de caminar y perderse por el pasillo de la puerta principal. Ese día todo había sido de sorpresa por lo que únicamente portaba una playera blanca y sus habituales pantalones, desde el regreso de Ino su insomnio había desaparecido mágicamente por lo que su rostro parecía tan brillante como en su infancia. Ahora que la tenía a su lado de nuevo, nadie sería capaz de quitársela. Se lo prometió y lo cumplirían.
Sin embargo la ocasión especial no debía de tener oscuridad en ella.

Su mano giró el picaporte abriendo la puerta rápidamente para recibir a quién fuera con una enorme sonrisa. Pero está se esfumó casi de inmediato.

Ahí frente a él, con un ramo de flores multicolor y una cajita tan pequeña que le cabía en la mano, encuentra en papel rojo, esa sonrisa que ahora le producía malestar y ese rostro que no podía ver si sentir enojo, estaba de pie, tan relajado que parecía irreal.

¡Cierra la puerta, mocoso!. Gritó Kurama, pero no pudo moverse.

-¿Qué haces aquí? -Sí voz sonó más cortante de lo que pretendía. Al final de cuentas aquel hombre solo era su antiguo compañero de equipo.

-Creo que eso es claro, Naruto.

-Para mí no... Sai.

Y odio su sonrisa, odio la manera en que sus ojos se clavaron con un odio lleno de prepotencia bajo esa máscara de tranquilidad. Odio sentir que se trataba de un enemigo, porque quizá no tenía pruebas, pero algo le decía que aquel rostro detestable había ayudado a que Ino quedará en coma.

-Vine a ver a Ino-Chan -Dijo con una sonrisa...

Una sonrisa de hipocresía.

Continuará...

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Hola!!!!

Ya sé, desaparecí mucho tiempo, perdón!!! Este año fue una tortura, sin embargo les agradezco mucho por seguir adelante y los nuevos lectores que le dieron una oportunidad a esta historia.

Desde luego también a los que han estado desde que la comencé, tienen un lugar en mi corazón, gracias!

Procuraré que el próximo capítulo sea más interesante jajajaja

Los quiero mucho

Nos leemos pronto 🌻🐝