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Roma

De pequeña siempre leía libros fantasía romántica, donde la protagonista era de corazón noble y tenía asegurado su final feliz, mi corazón se aceleraba con cada historia que leía y aspiraba en un futuro tener un típico romance cliché...
Jamás lo obtuve. Casi terminaba mi adolescencia y jamas tuve el típico "romance adolescente", ni siquiera sé cómo se siente estar enamorada.

─ Deberías salir, el día está lindo para que lo desperdicies aquí encerrada

Papá asomó su cabeza por la puerta de mi habitación, yo dejé a un lado el libro de poesías y lo miré, se veía reluciente y a la vez cansado, su camisa blanca estaba espectacularmente planchada y traía unos vaqueros azules, pero sin dudas iría a la cena programada con sus amigos solo para complacer a mi madre.

─ Hoy no estoy de ánimos, quizás mañana salga con Simonett ─mentí. Ciertamente hubiera salido con ella si nada hubiera pasado

Él asintió y se miró en el espejo de mi cuarto.

─ ¿Le gustaré a tú madre esta noche?

─ A ella le gustas desde que te conoció, hace veintiún años atrás ─sonrio apenas.

Amaba que mi padre se esforzará por seguir gustandole a mi madre a pesar de las peleas y aunque ella era un tanto difícil, también sabía que él era una debilidad para ella.

De pequeña solía decirle a mi abuela paterna que deseaba una relación como la de mis padres y ser como mi madre en un futuro, ella arrugaba su nariz y decía con su acento latino que lo que pedía era un pecado y que mejor me metiera con un narco adinerado o un viejo que me deje su herencia que conseguir un amor falso como el de mis padres.

Jamás entendí lo que ella quería decirme.

Mi padre salió del cuarto y yo dejé el libro a un costado, pasé el resto de la tarde viendo documentales sobre asesinatos en YouTube, me dirán loca pero es una obsesión para mí ver esos tipos de videos.

Vi varios casos hasta que mi celular sonó, un número extraño me había mandado un mensaje.
Abrí rápidamente el mensaje para chequear quién era.

Hey desnalgada no te he visto por aquí en un rato y te extraño feamente

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Hey desnalgada no te he visto por aquí en un rato y te extraño feamente

Además de que Ashtray esta más odioso de lo normal sin tú presencia que hasta ni Fezco lo soporta ya

Vuelve por favor

Att: tu única y favorita Rue, por cierto tu narco Chucky no quería pasarme tu número y tuve que robarle el celular

Sonreír al ver de quién era e inmediato contesté que también la extrañaba y que algún día iría a visitarla, también mencioné brevemente el por que ya no iba

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Sonreír al ver de quién era e inmediato contesté que también la extrañaba y que algún día iría a visitarla, también mencioné brevemente el por que ya no iba.

Empezamos a hablar y ella me contó sobre su novia, Jules, me contó que era trans y que salían hace algunos meses, me pareció una rara pero bonita relación.

Cuando Rue se despidió de mí y mis padres salieron de casa, recorrí mi casa en poleron y calcetines.
Era lindo estar en casa sola, sentía libertad y podía hacer cosas sin tener el ojo de mi madre encima.

Caminé hasta la entrada de galería de artes, el lugar que mi padre había mandado hacer solo para mí y donde antes solía pasar días enteró creando pinturas.

Una explosión de emociones recorrió mi cuerpo antes de poner la mano en el picaporte de la puerta.

Hace años no pisaba ese lugar y supongo que aún no era el momento de entrar.

Volví a la cocina a pasos lentos y tomé una botella de vino.

Ashtray

─ Cierra la puta boca, Rue, esto no es un juego

Ella dejó de hablar cuando Fezco la retó.
Habíamos ido a la casa de Lorie y los gran hijos de puta me encerraron en un armario, desnudaron a Fezco para ver si no tenía algo encima y a Rue la mojaron porque no se quería sacar la ropa.

Ella estaba drogada y sentía adrenalina del momento pero realmente nos había sacado de quicio a Fezco y a mí.

Gracias a dios se quedó callada el resto del camino al igual que nosotros.
Llevamos a Rue hasta su casa y luego fuimos a la nuestra, Fezco dijo que saldría un rato, yo sabía que iría a ver a Simonett, ella ya no venía por obvias razones y se encontraban en un punto exacto.

Yo, por mi parte, fui hasta la habitación de la abuela a ver si estaba todo bien y luego me fui a dormir.































más adelante contaré el por que Roma no puede entrar a la galería

𝘐𝘋𝘍𝘊 / 𝘈𝘴𝘩𝘵𝘳𝘢𝘺Donde viven las historias. Descúbrelo ahora