Habits - Jikook

IX

Yoongi les había pedido que fueran al hospital, y eso habían hecho a pesar de la lluvia que estaba cayendo. En ese momento los tres se encontraban sentados en la sala de espera, por lo que había dicho Min, debían esperar a que terminaran de vendarle la mano, ya que había estado hace rato con el tema de los puntos.

— Así que...— Tae llamó la atención de sus amigos — Un puñetazo al espejo.

— Juro que fue increíble — Admitió el rubio — No sé de donde sacó esa fuerza para romperlo.

— Eso da siete años de mala suerte — Comentó el de sonrisa cuadrada.

— Dudo mucho que la mala suerte le importa ahora bebé — Terminó por decir Yoongi tomando la mano de su chico — ¿Y a ti qué te pasa? — Preguntó mirando a Jimin.

El castaño los miró, pero nuevamente su vista se dirigió hacia la puerta en la cual debía estar Jungkook del otro lado, tal como si hubiera sabido que el pelinegro iba a salir de ella en ese preciso momento.

— Oh que bien, al fin sos libre — Dijo alegremente Min, pegando un salto de su asiento y acercándose al más alto — ¿Duele?

Jeon asintió — Un poco, aún tengo anestesia local, pero supongo que va a doler más después — Después de su respuesta, su mirada se dirigió a los acompañantes del rubio — Oh, hola.

— Hola Jeon — Lo saludó Tae alegremente — Linda herida eh.

Jungkook sonrió — Supongo que se me fue un poco la mano.

Y ahora solo podía mirar a Park, quien tenía su completa atención en la mano herida.

— ¿Jimin? — Tae intentó llamar su atención dándole un pequeño codazo para que reaccionara.

El castaño suspiró — Si ya no tiene que hacer nada acá supongo que lo mejor será irnos.

Esa respuesta dejó a todos sorprendidos, estaba raro, actuaba raro y al menos sus amigos eso lo sabian al cien por ciento.

— Si...supongo que deberíamos llevar a Jeon a su casa y de ahí ir a la nuestra — Coincidió Yoongi en un intento de que la mala actitud de su amigo no acaparara la atención de todos — El auto está en el estacionamiento.

— Tranquilos, yo puedo tomarme un taxi — Ya habían hecho suficiente por él, tampoco quería ser una molestia.

Pero el rubio no lo permitió — De eso nada, te llevamos y al menos vemos que estés bien.

Jungkook sonrió — En serio no quiero ser una molestia ahora.

Y Tae interrumpió — Créeme cuando te digo que no va a estar tranquilo si no te lleva a tu casa.

Entonces, accedió — Está bien.

••••••

Dentro del vehículo se encontraba Yoongi manejando, Taehyung en el asiento del copiloto y Jungkook con Jimin en los asientos traseros. Usualmente esa siempre fue su distribución dentro del auto, pero en ese momento el castaño hubiera preferido ir adelante en vez de estar junto al pelinegro.

No podía quitar su mirada de la mano herida, romper un espejo así...parecía mucho, algo torpe, y por suerte le había sacado bastante barata.

Por supuesto que Jungkook notó la mirada del castaño encima de su mano, por eso mismo dirigió su vista hacia el rostro del salvador de su otra noche.

— Estoy bien — Susurró para que Yoongi y Taehyung siguieran disfrutando de la música que estaban escuchando y cantando en los asientos de adelantes — ¿Sucede algo?