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—Capítulo 2—

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—Capítulo 2—




Comenzamos a caminar, alejándonos de la residencia

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Comenzamos a caminar, alejándonos de la residencia. Pasábamos por tiendas y restaurantes (en los que más de uno se me hizo agua la boca por el olor que emanaba dentro).
Y aunque llevábamos el GPS, realmente deambulábamos perdidos.

Llegamos a un campus, no sé cómo, pero llegamos, perooooooo, no sabíamos cuál era.

Chicos que seguramente eran de años mayores, entraban y salían como si conocieran ese lugar tal como la palma de su mano, pero ellos no se detenían. También habían algunas chicas caminando por la acera mientras chismorreaban. Y por último, los grupitos, tanto de chicos como de chicas que estaban parados en un sitio específico y nadie se paraba a hablarles.

Lo hubieras dejado en nadie mamasita, NADIE.

Al menos así fue hasta que metí la pata.

Pero vamos, no me juzguen, al principio yo sólo quería ayudar.

A una chica de uno de esos grupitos, la cual tenía el cabello tintado de rojo, se le había caído su cartera.
SU CARTERA.
A todos y más en un lugar así, les importaba su cartera, ahí tienes tus identificaciones, tarjetas y dinero, dah.

Y yo, tan buena gente, me acerqué a recogerla y le toqué el hombro, ella volteó con una cara de pocos amigos, aunque ella era muy linda físicamente.

—¿Que quieres?– soltó bruscamente.

—Hola, se te cayó est...

—¡¿Por qué carajos tienes mi cartera?! Eres una maldita ladrona–intenté hablar pero ella se adelantó–, seguro debes ser becada, porque nadie de Wenvelvey haría eso. Maldito sea el día en que esta institución decidió dar becas y ayudar a gente mediocre y sin futuro como ustedes...

Quiera o no, esas palabras hirieron, siempre había sido una persona sentimental, el simple hecho de que alguien alzara la voz al hablar conmigo o diera una mínima palabra hiriente, hacia que sobrepensara, que mis pensamientos y sentimientos ganaran, incluso a veces podía hasta llorar. Mis amigos sabían eso, por eso, en el momento en que Eva intervino, fue como una salvación para mi.

Verdades OcultasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora