Kiss the boy ✈ Rensung/Sungren

v e n t i s e i

Llevaba todo el fin de semana mirando su teléfono como si Renjun de repente fuera a salir de la pantalla a besarlo de nuevo.

Después de que Renjun lo besara en el aeropuerto, Jisung había corrido hacia él tratando de alcanzarlo para conseguir una explicación, sin éxito porque entonces se fue, pero había tomado su teléfono casi inmediatamente para llamarlo y preguntarle qué mierda había sido eso.

Cuando el número sonó fuera del área de servicio, Jisung se prometió que lo intentaría más tarde y aclararía las cosas con Renjun. Pero entonces el vuelo de Renjun aterrizó, Jisung había colocado una alarma en su teléfono para saber exactamente a qué hora lo haría y había pasado las últimas dos horas del vuelo esperando a que la alarma sonara.

Y cuando sonó, Jisung presionó el nombre que tenía para Renjun en los contactos, pero lo miró por un minuto entero antes de dejarse caer sobre la cama y soltar un suspiro, mientras dejaba que la pantalla se quedara en negro y olvidando su idea inicial de llamar a Renjun en cuanto aterrizara.

Siendo honesto, se acobardó cuando finalmente tuvo la oportunidad en frente.

Renjun lo había besado, había salido corriendo hacia él y había mandado todo a la mierda para besarlo y Jisung literalmente se había quedado echado en su cama, mirando hacia el techo y pensando en que no estaba listo para escuchar su voz.

Es decir, hace menos de una semana había descubierto que se sentía atraído hacia otro chico y todavía estaba confundido y dentro del proceso de aceptarlo por completo, sumándole a eso que hace menos de tres horas, el chico por el que se siente atraído decidió besarlo antes de irse a otro país que estaba a poco más de dos mil kilómetros de distancia.

Si lo disculpan, esa era demasiada información que procesar.

Además, tenía un mejor amigo que por supuesto que no había dejado de mencionarle el dicho de su familia, como si Jisung necesitara escucharlo en medio de una crisis bisexual causada por el primo de su mejor amigo.

“Huang Renjun siempre consigue lo que quiere”, ¡já! Así deberían ponerle al libro de su historia de amor. Si es que había una.

Y ahora eran las seis de la madrugada, dos días después de que Renjun regresara a China y ahora probablemente estaba en Jilin, durmiendo pacíficamente mientras Jisung se comía las uñas de las manos y pensaba si escribirle un mensaje o no. Había decidido dormirse temprano solamente para poder enviarle un “Hola” y sí, si se sentía patético, porque al final no consiguió dormir las ocho horas y había despertado a las cuatro, pero todavía no era hora de mandarle mensaje porque en Jilin eran las tres.

Esperaba que a Renjun no le resultara raro que lo hubiera ignorado olímpicamente desde el sábado y que ahora le mandara un mensaje el lunes, fingiendo que nada de lo que pasó antes de que se fuera sucedió.

También esperaba que no creyera que estaba asqueado y sólo creyera que tenía una crisis existencial por la cual necesitaba fingir que no se habían besado. Aunque era probable que no entendiera eso, pero Jisung no quería explicárselo todavía, porque como tal, Renjun no se le declaró, él sólo... Lo besó y ya, eso no contaba como declaración, ¿o sí? No habían dicho lo que sentían por el otro y tampoco eran novios así que...

Respiró hondo, escribió “Hola♡” apresudamente, contó hasta cinco, porque era su número favorito, y luego presionó enviar.

Diez segundos después, debajo del nombre del contacto se leía “escribiendo” y entonces llegó el mensaje, por el cual Jisung casi se cae de la cama.

“Injun🍋:
Perdón.
Creo que deberíamos hablar
¿Puedo llamarte?”.

Al principio, Jisung pensó en escribirle que no y bloquearlo apresuradamente antes de que pudiera mandarle mensaje o llamarlo, pero luego creyó que eso le mandaría un mensaje equivocado respecto a cómo se sentía.