Justo al frente mío había un chico de cabellos negros y aretes plateados con forma de cruz, su cara presentaba miedo y vergüenza al verse acorralado, no podía escapar de los ojos felinos de la mujer que lo veía entretenidamente con curiosidad y sorpresa, su mano aún estaba aferrándose a la carta mientras que la extendía para dejarla en el casillero, al ver que la hermosa joven lo había descubierto no pudo dar otro movimiento quedándose quito en su mismo lugar. Era más que obvio que iba a dejar una carta en un casillero ajeno.
Pero tal vez hay una forma de salvarse, tal vez diciendo que era solo el que llevaba las cartas de la persona que en realidad las escribía para ella, pero si hacía eso significaría mentirle a una mujer que no lo merece, se sentiría como el peor humano que haya pisado la tierra, pero era la única forma de salvarse de esa situación.
— Y-yo. — Maldijo al ver que las palabras hacían fuerza para no salir como el quería. — Verás, yo no las escrib-
— ¿Jungkook?
Al escuchar su nombre, sus nervios aumentaron como espuma. ¿Lo conocía? ¿Cómo? Si casi nunca le había hablado, la única vez que lo hizo se enamoró perdidamente de ella, el día en que le dio un simple lapicero ¿Acaso ese día también fue especial para ella?
— Eres de la selección de Basket junto con mi hermano ¿No? — O no, solo lo conocía por ser amigo de su hermano. — ¿Tú eres el que me ha estado entregando esas hermosas cartas?
Jungkook juraba ver brillos en sus ojos, sus labios amenazaban con afirmar esa pregunta, sin embargo, sus nervios salieron a flote al ver que Jennie caminaba hacia él con rapidez, sus inseguridades llegaron con más fuerza ¿Qué pasaría si le decía que no quería que le vuelva a entregar ni una carta?
— Y-yo — Sus palabras fueron interrumpidas por un fuerte abrazo de la más pequeña.
Sus mejillas se calentaron dándoles un tono rojo, pero quería preguntar.
— ¿Sabes quien soy? —Dijo con repentina voz firme y con unos rápidos y delatadores latidos.
— ¿Cómo me iba a olvidar del chico que me pidió mi lapicero porque otros niños habían robado el suyo? —Su voz salió tan suave y segura que le causó un pequeño escalofrío.
Al parecer no era el único que pensó que ese momento fue especial. Se sintió emocionado que no puso más que corresponder aquel abrazo.
Disfrutaron del calor ajeno queriendo aferrarse aún más, pero tenían que aclarar las cosas.
Jennie fue la primera en separarse hasta solo tomar una de las manos del más grande.
— ¿Tú me escribiste todo este tiempo estas cartas?
Jungkook quería decirle que si, pero una pequeña parte de su ser aún le decía que no debía o iba a empeorarlo todo ¿Desde cuándo decir un "Si" se volvió más pesado? A la mierda ¿Qué hay que perder?
— Si.
Pudo ver como los ojos se abrían con sorpresa para luego formar una tierna sonrisa que iba dirigida a él y solo a él, no había nada mejor en este puto mundo que eso.
— Tal vez no te conocía bien, pero sé con exactitud que me enamoré profundamente de la persona que escribió tan hermosas cartas.
Su corazón no paraba de latir con fuerza ante tal declaración, ¿O sea que si tiene una oportunidad con su amor de la infancia? Maldición, claro que si la tenía, se lo acaba de decir en su cara.
—E- entonces ¿Te parece si nos conocemos mejor? Ya sabes, pasar tiempo juntos sin cartas de por medio.
Jennie tomó su mano para empezar a caminar por los pasillos.
— Me encantaría la parte de conocernos, pero me siguen encantando tus cartas...
Y aunque ellos no lo sabían en ese entonces, solo la muerte los iba a poder separar y bendito sea el papel que iban a gastar por el resto de sus vidas, ya que nunca iban a aburrirse de llenar sus vidas de esas palabras llenas de cursilerías, cursilería que amaban con cada espacio de sus corazones y que iban solo a agrandar su amor, ahhh, Jungkook jamás se iba a cansar de ver esa sonrisa de Jennie cada vez que ella veía una carta nueva cada día ya sea en su casillero del instituto y universidad, debajo de la almohada de su primera casa juntos, dentro de su mochila en donde llevaba su comida al trabajo y hasta logró poner las cartas dentro de las sábanas en donde descansaba sus pequeños gemelos. Le encantaba tanto hacer esos detalles, para ella, y solo para ella.
RUTA JUNGKOOK FINALIZADA.
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Wнσ ғell ιn lσve wιтн нer? ᴶᵉⁿᵏᵒᵒᵏ ᵒʳ ᵀᵃᵉⁿⁿⁱᵉ
Romance¿Quién se enamoró de ella? Desde hace un tiempo, Jennie Kim ha estado recibiendo tarjetas de amor, ¿Pero de quién? Esa era una buena pregunta. Habían dos opciones validas, y su grupo de amigas y ella buscarían la respuesta. ¿Por qué? Porque tal vez...