Temporada 1, capítulo 14:
Tails no quería encontrarse con ningún ser vivo en su camino a lo más recóndito de la isla, razón por la cual, al distinguir la cabeza brillante de Eggman, se molestó más de lo que hizo en toda su vida.
—¡Eggman! —Tails adoptó su postura defensiva, con el ceño fruncido y los brazos delante de él listo para atacarlo, pero se veía bastante vulnerable él solito en el claro del bosque y con un arbusto de rosas al lado. Sonic vio cómo su zapatilla izquierda se desplazó unos centímetros a la derecha y sintió que se enamoró de él otra vez.
Chocó el móvil de Eggman ante esa radiante distracción.
—¡Mi Tails! —Olvidó por completo el cuerpo en el que se encontraba y saltó del medio de transporte que usó, lo que fue equivalente a casi torcerse la espalda. Orbot y Cubot se acercaron a él para que pudiera enderezarse, aún sin entender qué hacían ahí. Después de tronar su columna, el erizo se giró hacia el menor y corrió con los brazos abiertos para alcanzarlo—. ¡Mi vida! Mi pequeño Tails, te he extrañado... en media hora lejos de ti.
—¡¿Qué estás haciendo?! ¡Aléjate, Eggman!
Sonic definitivamente no esperaba que Tails le diera un cabezazo para separarse. El zorro se sacudió hasta la punta de las orejas cuando se libró de su agarre y agitó sus colas como si las hubiera lastimado al intentar expresarle su amor.
El cuerpo de Eggman cayó al suelo y, siendo Sonic, continuó admirando la imagen de su pareja en un ambiente tan tranquilo como solo lo puede hacer parecer Tails.
—Aj. Bien, ¡te derrotaré, Eggman! No necesito a Sonic conmigo para eso —espetó nuevamente como un luchador.
—¿A Sonic? —Sonic inclinó un poco la cabeza ante esa mención, ¿qué estuvo haciendo Eggman en su cuerpo?
—Sonic... ¡No necesito a Sonic!
El cobalto observó mejor al zorro y notó lo que fue más angustiante para él: sus mejillas. Tails tenía el semblante de haber tenido una mala racha y su rostro húmedo de lágrimas era lo único que el erizo podía imaginar.
—¿Qué ha pasado? —preguntó, ignorando la apariencia que adoptó—. Me encargaré de quien lastime a mi lindo Tails...
—Sonic decidió que ya no quería mentirme, no quiero estar cerca de él para nada —manifestó, sus ojos expresaron tristeza y el erizo lo correspondió con preocupación—. Me ha utilizado, ¡pero no lo necesito para vencerte! Puedo probar que no... ¡Ay!
Sonic volvió a aferrarse al menor tanto como podía, sentía que podía rodearlo por completo. Tails intentó alejarlo en vano, sin entender qué estaba pasando, pero de todas formas se puso a lloriquear en el hombro del doctor por no poder soportar su desdicha.
—Sonic me odia —murmuró entre jadeos.
—¡No es cierto, Tails! ¡Yo te amo! —Dejó que Prower se mantuviera sobre sus pies, puesto que lo había cargado por la diferencia de altura, y se arrodilló delante de él con una mano entrelazada en la suya. Más o menos como si fuera a hacer una propuesta, Sonic carraspeó y lo miró con firmeza—. Mi vida, eres el zorrito más lindo que existe en el mundo y el único con quien quiero formar mi futura familia. Tus colas son lo segundo más bonito que he visto, porque lo primero fueron tus ojos, Tails, te quiero mucho como para dejar que mi conciencia te odie y nunca lo hará, porque lo que me he permitido sentir por ti ha sido más fuerte que las ganas que tengo de comer una chili dog o de darte... y realmente darte hasta que el reloj de tu taller indique las siete de la mañana. Tails, eres todo lo que necesito en mi vida, y mucho más...
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Desde otros ojos en SONIC BOOM
FanfictionLos capítulos de esta serie vistos desde el punto de vista de una Sontails shipper. <3