★Orfanato Midoriya★ •///•

5 章

Las luces de colores iluminaban todo el lugar al que los niños consideraban hogar, las Nochebuenas estaban dispersas por todo el orfanato dándole un toque elegante y hogareño, las coronas doradas en las puertas daban vida al igual que los dibujos que los niños hicieron para recibir está festividad navideña. En el salón principal los pequeños niños y su cuidador principal veían un enorme pino que yacía armado a lado de la chimenea. Estos pensaban seriamente como decorarán el principal símbolo navideño, no sabían si usar esferas doradas y rojas, o rojas y plateadas.

—¿Por qué no usamos ambos colores?— el pequeño Shoto hablo con simpleza. Izuku que murmuraba cosas dejo de divagar  y muro al más pequeño de los tres hermanos.

—Shoto...¡Eres un genio!— Izuku levanto al niño y comenzó a besar sus regordetas mejillas —¿Por qué limitarnos? ¡Hay que poner todos los colores que encontremos!— antes de bajar al bicolor le dio un beso largo en su mejilla aplastándola en el proceso.

—Entonces puedo poner esta Izu?— Denki se le acercó al pecoso, en su mano tenía colgado una esfera con su rostro pintado en ella —La hice yo— dijo sonriendo.

—Claro que si cariño, de hecho me diste una idea— Izuku levanto mas la voz para que todos lo escucharán —Como actividad navideña todos decorarán una esfera a su gusto, sus esferas servirán para decorar el árbol—

—¿Puedo hacer un panda?—

—Yo aré una bomba—

—Yo una roca— todos los pequeños gritaron sus ideas con entusiasmo, esto pasaba mientras el peliverde tomaba una caja de esferas blancas.

—Todas sus ideas son geniales. Tomen una esfera y vallan al taller a decorarlas— los niños se formaron y pasaron a tomar una esfera cada uno para después ir corriendo al taller donde hacían manualidades.

—Mi esfera tendrá pintada una abeja— Tamaki con timidez le dijo a Mirio después de tomar su esfera.

—Buena idea, yo tal vez haga un héroe—

—Hawks vamos, tenemos que hacer nuestra esfera— Tomura llegaba con sus compañeros a dónde estaba el peliverde, el pelinegro con una cicatriz llamaba a su amigo rubio, Takami, alias Hawks llegó corriendo junto con Dabi y Shindo. Y como se ve, el pequeño Takami descubrió su facinación por las aves, especialmente por los halcones, por ello pidió explícita mente ser llamado Hawks.

El grupito de niños mayores recogió su esfera y partieron, a excepción del rubio que se quedó de pie frente al peliverde.

—¿Qué pasa Ke..digo Hawks?— Izuku hacía el intento por llamar al chiquillo como el le pedía, era difícil ya que las semanas en la que lo llamo por su nombre no eran de mucha ayuda.

—Izu podrías darle esto a Hawks 2.0 por favor— el rubio le extendió a su cuidador una lombriz llena de tierra que se retorcía a más no poder. El pecoso se quedó congelado al ver al animal, no era muy fan de las lombrices, pero si eso hacía feliz al pequeño lo haría sin protesta —Tiene que comer y su comida favorita son las lombrices—

—Em. Claro cariño, déjamelo a mí— con más asco que nervios tomo al animal con la punta de sus dedos —Ahora ve a decorar tu esfera ¿Si?— y con su mano libre revolvió los cabellos dorados del niño.

—¡Si!— sonrojado Takami agarro su esfera y corrió al taller.
Izuku rió bajito, pero recordó lo que el niño le dió y su cuerpo se tenso nuevamente.

—Ugh, le daré esto a Hawks 2.0— Izuku salió al patio trasero, camino un poco hasta llegar a un árbol con ramas bajas, en una de ellas había una casita roja con naranja, con cautela se asomo y allí vio al pequeño halcón dormido —Hola chiquitín, te dejare este emm, delicioso aperitivo aquí— con delicadeza metió su mano con la lombriz dentro de la casita, el animal fue dejado a un lado del ave encima de la paja.