𝖢𝖾𝗈 𝖨𝗇𝖿𝖺𝗇𝗍𝗂𝗅 -𝖭𝖺𝗆𝖩𝗂𝗇

Capítulo Diecisiete.

-Deberías fijarte en las personas que contratas.

NamJoon frunció el ceño cuando YoonGi interrumpió el silencio tan denso que se hizo, SeokJin aún no regresaba de cualquier lado al que fue y TaeHyung simplemente siguió sus pasos convirtiéndose en fantasma, pues tampoco se había escuchado de él.

-¿Qué?- preguntó con tono golpeado, se giró lentamente notando a su amigo encogerse de hombros.

-Entiendo que SeokJin sea su mejor amigo, pero cuántas veces JiMin se involucró en tu relación.

-Oh vamos Min, solo cierra la boca- se dirigió a su escritorio y sin ganas de tomar asiento revisó papeles sin atención-. Siempre haces lo mismo.

-Tú también, sé lo que estás pensando ahora y te preocupas por él.

-¿Y por quién más debería preocuparme? ¿Por tí?- rió sin gracia-, No lo creo.

-¿Lo ves? Eres igual, siempre pones a todos antes que a ti, deberías cambiar eso NamJoon porque nadie hará lo mismo por ti...

El silencio se hizo tenso, hacía mucho tiempo que las cosas no se ponían así entre ellos dos apesar de que siempre que se encontraban había incomodidad.

-Yo debería dejar de poner a los demás sobre por mí- aseguró el moreno, enderezandose un poco para así conectar mirada con la de su amigo-. Y tú, deberías dejar de pensar solo en tí. Siempre es lo mismo, siempre buscar las manera de beneficiarte sin importarte qué es lo que piensen los demás.

-Si yo realmente hiciera eso ¿crees que tú estuvieras aquí?- retó bastante enojado mientras su ceño se volvía a fruncir.

-¿Ahora me vas a reclamar esto? ¿Quieres hacerlo enserio, YoonGi?

El mayor quedó en silencio por algunos segundos, antes de que NamJoon suspirara cansando y frotara el puente de su nariz con los dedos índices.
-Hubieramos hecho historia, Kim, lo hubiéramos hecho- continúo-. Pero tú siempre preferiste que los demás lograran lo que quieren qué hacer lo que tú querías hacer.

-Yo no tenía tiempo de seguir mis sueños.

-¿Qué tan difícil era? Era nuestro momento, incluso HoSeok estaba emocionado-

-Lo sé- interrumpió-. Pero qué querías que hiciera.

-Quería que siguieras tu sueño, eso hubiera estado bien. Todo estaba hecho una mierda en ese momento NamJoon, pero tú debiste ignorarlo.

NamJoon rió, mientras negaba lentamente con la cabeza y se dirigía al mini bar por una botella de soju artesanal. Estaba cansado, la espalda le dolía por lo tensa que estaba y quería salir corriendo de la oficina para buscar a SeokJin. Pero ahora su amigo staba generando problemas y por sobre todo le tenía que aclarar la preferencia que tenía en ese momento.

-Pues qué crees- se acercó hasta estar frente a frente con el mayor-. Que SeokJin ahora es mi sueño, ¿No querías que fueras atrás de ellos? Pues lo estoy haciendo.

-¿Y qué tan difícil era hacer eso hace diez años?- frunció el ceño y se acercó otro paso para estar más cerca.

-¿Qué tan difícil era? Lo bastante como para que tú te estuvieras muriendo de hambre, y yo tuviera que estar en el funeral de mi padre y contestar las llamadas del doctor sobre el cáncer de mi madre... Así de difícil era.

-Tú hermana-

-¡No YoonGi!- gritó y aventó el vaso hacia el suelo haciendo que se rompiera de inmediato-. ¡Mi hermana tenía quince años, y yo no iba a retenerla en algo que no quisiera hacer! Incluso si eso significaba que yo renunciara a mis sueños haría que los demás no sufrieran. Y perdóname, perdóname si ví primero por mi familia y no por el amigo que me dejó de hablar por dos años cuando no cumplí sus caprichos.