Capítulo Veintidós.

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YoonGi viró los ojos por milésima en la mañana, llevaba tres horas de trabajo y su secretario seguía suspirando con mirada decaída; caminaba más lento y habían ocasiones en qué dirigiendo su vista hacia afuera lo veía hacer corazones con los post-it y guardarlos en su bolsa.

Que ridículo.

Se frotó las sienes por última vez antes de que la puerta de su oficina fuera abierta y ver al susodicho que lo había estado molestando toda la mañana con solo existir. Ni él en sus peores días se ponía de esos ánimos.

-Señor Min, ya redacté el correo para confirmar la colaboración con Kim's Oc, lo mandé a su correo para que pueda revisarlo por última vez antes de que lo envíe.

El mayor asintió con un movimiento de cabeza.
-Espera aquí en lo que leo el correo.

El moreno soltó un ujum desganado y recargó todo su peso en una de sus piernas, volvió a suspirar lamentable y esta vez YoonGi no aguanto.

Lo volteó a ver con mirada sería y se acomodó mejor en su enorme silla.

-Secretario Kim- llamó su atención y este enderezó su postura.

-¿Ocurre algo? ¿Le falta más redacción al correo?- Min negó y el menor frunció el ceño.

-Dígame que lo tiene así el día de hoy.

-¿Eh?

-Usted, suspira cada cinco minutos y parece ser tristeza de intensamente ¿Qué lo hizo sentirse así de mal?

TaeHyung agrandó un poco sus ojos con vergüenza, hizo una reverencia de inmediato y preocupado por su trabajo se disculpó.

-Una disculpa, dejaré de comportarme así si le molesta. A veces no puedo controlar mis emociones y soy muy evidente.

YoonGi alzó una de sus cejas.
-Secretario Kim, usted lleva trabajando para mí un mes exactamente y seguirá por más de diez años. Si le pregunto qué es lo que le ocurre no es para que deje de hacerlo, es para que pueda ayudarle.

-Bueno...- olvidó por completo que YoonGi era su jefe con esas palabras, a veces TaeHyung era muy confianzudo y le contaba toda su vida a desconocidos.

-Hagamelo saber para darle una solución.

-Lo que pasa...- suspiró triste recordando todo-. El vicepresidente Jung ha estado muy ocupado todos estos días, no he podido verlo ni siquiera un rato y usted nos prohibió las llamadas si no eran para trabajo. Pero ¿Por qué el vicepresidente se tendría que comunicar con el secretario de presidencia? Es ridículo así que lo único que sé es gracias a SeokJin hyung.

YoonGi volvió a virar los ojos, el amor si que te hacía verte como un estúpido. Y si pensaba así era porque él ya no se tenía que ver más de esa manera, JiMin y él habían iniciado una relación después de aquella noche, y pensando en las palabras de su secretario se dió cuenta que habían pasado dos días desde la última vez que vio a JiMin.

Realmente la empresa de NamJoon estaba en sus ventas más altas del año así que era normal que Park como jefe de departamento fuera el más cargado con trabajo, aunque en comparación con su amigo y secretario él podía estar en contacto con su novio por teléfono.

-¿Eso es lo que lo tiene así?- preguntó y TaeHyung asintió como cachorro regañado-. Entonces prepare el auto.

-¿El auto? No tenemos ninguna reunión por el día de hoy.

-Claro que si, será buena idea ir con el presidente Kim y confirmar en persona la colaboración- continúo el mayor poniéndose de pie y siendo observado por el menor.

𝖢𝖾𝗈 𝖨𝗇𝖿𝖺𝗇𝗍𝗂𝗅 -𝖭𝖺𝗆𝖩𝗂𝗇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora