La menor de los Diggory 2 (Draco Malfoy y tú) TERMINADA ✅

~1~

Observé a Minzie, mi lechuza, salir por la ventana de La Madriguera. 

Si, llevó 2 semanas aquí los Weasley me invitaron y pues duermo con Ginny, es muy maja.

Suspiré fuertemente.

-Esto no es normal, Diffy. Harry no ha contestado ninguna de nuestras cartas, estoy preocupado.- susurró Ron mientras miraba a Errol, una vieja lechuza, salir en dirección a Privet Drive. 

-Tengo una muy mala impresión de los tíos de Harry.- pronuncié con preocupación.

Hace dos meses que conocí a los "amigables" tíos de Harry y a su "adorable" primo.

*Eran horribles.*

-Seguro que no le ha pasado nada.- dijo Ron con poco convencimiento. 

-¿Y si está en apuros? ¿Y si sus tíos le maltratan o algo?- susurré, con preocupación. 

-Y si fuera así, ¿Que podríamos hacer nosotros, unos críos de 12 años?- preguntó Ron, con inseguridad. 

-No creo que podamos hacer nada, al menos solos.- dije mientras unas risas contagiosas entraban por mis oídos.

Sonreí malvadamente

*Los gemelos*

-¿No pensarás...?- puse mi dedo en mis labios, indicándole a Ron que callara, mientras me dirigía hacia los gemelos más locos y divertidos que una pueda conocer . 

-Fred, George, necesitamos vuestra ayuda.- detuve a los gemelos poniéndome en frente de ellos.

-¿Para que?- preguntaron ambos a la vez.

-Para salvar a Harry Potter de sus tíos muggles.- susurré en voz baja, viendo a Arthur Weasley, entrar a la cocina con aire cansado.

-¿Se puede saber que está haciendo Harry Potter? ¿Es que no conoce las reglas mágicas?- decía él con abrumación.

-¿Que ha pasado?- preguntamos Ron y yo a la vez, acercándonos a él.

Él se pasó una mano por la frente.

-Ha usado magia delante de los muggles, ha recibido un aviso por parte del Ministerio de Magia.- dijo el señor Weasley con aspecto derrotado.

Al oír esto, miré hacia Ron, Fred y George alarmada.

Los gemelos asintieron con la cabeza, uniéndose a nuestro plan para rescatar a Harry de las garras de su familia muggle.

Esa noche, en la cocina, Ron, Fred, George y yo estábamos reunidos.

-Tenemos que ir cuánto antes, no podemos dejarle más tiempo en esa casa.- empecé yo, con tono serio y adulto.

-Estoy de acuerdo, pero hay un obstáculo para llegar hasta Harry. El monstruo pelirrojo.- siguió Fred.

Reí por mis adentros, el monstruo pelirrojo era la señora Weasley.

-Te has dejado un obstáculo, listo. ¿Como llegaremos donde vive Harry?- añadió Ron.

George compartió una sonrisa extraña con Fred.

*Me dan miedo*

-Este problema ya está solucionado. Solo tenemos que ir, llevarnos a Harry y volver sin que nadie se entere de nuestra ausencia.- dijo George, en voz baja.

-¿Y cómo vamos a ir? ¿En coche?- ironicé yo, con burla. 

Fred y George me sonrieron enigmáticamente.

-Seguidnos.- ambos se levantaron, completamente sincronizados, y se dirigieron al extenso jardín trasero, donde un Ford Anglia estaba aparcado.

-Oye, que lo decía en broma...- susurré, viendo como Fred subía en el lugar de copiloto y George se ponía al volante, arrancando el motor del Ford.