Mi Amor Imposible (Eunbo) PAUSADA

10. El alumado llora ¿Eunseo enamorada? Part. 2

—Es sorprendente —opina Exy, compañera de clase de la presidenta, a Luda su amiga—, no puedo creer que la reina no oficial de la escuela, esté saliendo con alguien como ella. 

Seola les escuchaba con atención, ya que las tenía enfrente suyo hablando del par de chicas que estaban tan embelesadas hablando bajo en marco de la puerta de la clase 3-A. Los rumores ya no eran rumores, habían pasado ya varios días, y el mundo entero había notado que Eunseo y la chica nueva estaban saliendo; si no es que ya eran novias. 

—No entiendo que le vio —Exy trataba de encontrar una explicación. 

—Es muy bonita —expresa Luda. 

—Sí, pero es callada, no es tan buena en case ni en ningún deporte, simplemente no lo entiendo. 

—Quizá no la conocemos muy bien —concluye Luda. 

—Pueden dejar de hablar de ellas, por favor —pide la presidenta—. Hay muchas cosas más importantes en las que debemos de pensar como miembros del consejo estudiantil. Por ejemplo, los clubes que no cuentan con tanto presupuesto y que están a nada de ser cancelados si no hacemos nada. 

Exy, regañada, hizo un puchero, cediendo al pedimento de su autoridad. 

De hecho, en su interior, Bona tampoco comprendía por qué le gustaba a Eunseo. Antes ya las habían visto comer juntas en el almuerzo, pero nunca tan acarameladas como lo estaban haciendo recientemente. También ya había escuchado decir a otras de sus compañeras que las veían paseando por varios lugares cada fin de semana; seguro cuando Eunseo tenía tiempo, o se hacía tiempo para salir con esa chica. 

Seola sacudió su cabeza una vez más para desvanecer esos pensamientos que no le incumbían, porque claro, ella y Eunseo ya no eran ese tipo de amigas cercanas. Aun así, cada vez que se lo recordaba le dolía. 

**** Tres días después****

—Escuché que le han visto ir y venir de casa de Eunseo cada día —comenta Dawon, quien llegó con otro chisme que recién escuchó, respecto a Bona.

—¿Creen que estén viviendo juntas? —Luda cuestiona. 

—Mi familia conoce a su familia —revela Exy—. Hace poco me enteré de que la casarían con un guapísimo chico que regresó del extranjero, pero el compromiso se rompió. 

—¿Qué creen que haya sucedido? —Dawon se miraba muy curiosa. 

—Creo que la respuesta está ante nuestros ojos —responde Exy. 

—Bueno... no la culpo —opina Luda—, yo también hubiese roto un compromiso arreglado si me dieran la oportunidad de salir con Eunseo. 

El resto de las chicas concordó. 

—Entonces... seguro que echaron a Bona de casa y Eunseo la acogió—supone Exy. 

—Yo también quisiera quedarme en su casa —Dawon se imaginó a sí misma cayendo en los brazos de Eunseo. 

Seola estaba allí escuchando en silencio una vez más, aunque trataba de enfocarse en su estudio, sin conseguir el éxito de ignorarles. Las palabras de sus amigas entraban por sus oídos como una canción pegajosa. Si ella le hubiese dicho a sus padres que también gustaba de Eunseo hace años... seguramente ya la hubieran desheredado o sacado de esa escuela, y todo para alejarla para siempre de su vieja mejor amiga. Lo mejor, para ella, sin duda fue alejarse. 

Una tarde, luego del descanso del medio día, cargando un par de pesajas cajas con guías universitarias, se encontró con Eunseo.