Cap 23

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Los cuatro niños se encontraban en el cuarto del menor el cual les servía té en pequeñas tazas de plástico, hacia una hora que su padre y el doctor habían entrado a la habitación del mayor y nadie salía.

-más té señor touya?- pregunto el pequeño shoto sosteniendo una tetera

-por favor pequeño señor shoto- respondio touya siguiendo el juego a su hermano menor

-yo también shoto- dijo natsuo llamando la atención de su hermano menor el cual asintió alegre

-yo igual shoto- dijo fuyumi mostrando su taza de té

Lo primordial era distraer al pequeño alfa para evitar que se pusiera nervioso aunque en realidad sus tres hermanos mayores parecían más nervioso que el.

Unos pasos fuertes se acercaron hacia la habitación haciendo que los pequeños voltearan viendo cómo su padre habría la puerta, una sonrisa en el rostro del alfa alertó a los menores que todo había salido bien.

-hawks Los llama, quiere que conozcan a su hermanito- dijo el alfa sonriente

Los cuatro pequeños sin hacerse esperar corrieron hacia el cuarto de los mayores, les emocionaba mucho imaginar que aspecto podía tener su hermano, podría ser muy pequeño?, el color de su cabello, sus ojos, acaso tendrá alas?.

El mayor se colocó frente a la puerta y la abrió poco a poco dejando ver a los pequeños a el rubio el cual sonrió ampliamente al ver a los pequeños.

-pequeños, vengan a ver a su hermano- comentó hawks con emoción haciendo que los menores se acercaran a la cama

Los niños subieron cuidadosamente a la cama y el rubio comenzó a desenvolver mantas que cubrían lo que el traía en brazos; los niños miraban atentos y emocionados hasta notar que lo que traía en brazos el rubio no era un bebé si no un huevo gigante.

-mamá, y mi hermano menor?- pregunto el pequeño shoto algo decepcionado sacando una pequeña carcajada del rubio

-el es tu hermano menor....el, a diferencia de ustedes mis pequeños va a nacer de un huevo, así que podremos cuidarlo entre todos, no es cierto?- comento el rubio con una sonrisa

los cuatro pequeños quedaron perplejos ante un huevo tan grande, incluso si sus cerebros intentaban asimilar que su hermano se encontraba ahí adentro seria mortificante imaginar como saldría. el pequeño shoto se acerco al rubio y puso delicadamente su mano sobre el huevo, este se removió un poco haciendo que el pequeño se exaltara pero no pudiera evitar sonreír ampliamente.

-hola hermano, soy shoto, soy tu hermano menor- grito shoto hacia el huevo viendo como este se removía

los demás pequeños se sorprendieron ante esto y no tardaron mucho en comenzar a presentarse igual. Los adultos contemplaban asombrados y enternecidos aquella escena, enji nunca había visto aquella face de sus hijos, incluso con shoto que fue el último pequeño no los había visto así, felices.

Las horas se fueron volando, los pequeños se quedaron dormidos en aquel lugar mientras hawks aún no podía dejar abrazar y mirar enternecido aquel huevo enorme, enji en cambio no podía quitar los ojos de su ahora prometido, de su omega, de su familia.

-wow- soltó enji de la nada

Hawks alzo la mirada notando como el alfa les acababa de tomar una foto a todos juntos, unas risitas no tardaron en salir y el alfa se dirigió hacia el rubio acercándose cuidadosamente.

-quieres tomarlo?- pregunto el omega hacia el pelirojo

La cara del alfa cambio a una pequeña mueca de miedo y disgusto seguida de un pequeño sonrojo, era cierto, era su hijo pero el nunca había tomado un bebé, recordaba que solo había cargado a touya y fuyumi al menos hasta los tres meses de nacidos y natsuo y shoto nunca lo hizo, se encontraba Yam sumergido en su trabajo y una rivalidad imaginaria que nunca se tomó el mínimo tiempo de estar por completo en los primeros años de la vida de sus dos hijos menores.

-no te va a morder, enji, es tu hijo también- volvió a hablar el omega

El alfa trago en seco y con el cuidado más mínimo tomó aquellas mantas que traían consigo el huevo, era extraño, un poco pesado; este comenzó a hacer pequeños movimientos casi irreconocibles pero eso bastó para que los ojos del alfa comenzaran a lagrimear, hawks lo tomó entre sus brazos y los abrazo, tal vez el pasado de ninguno había sido como esperaban pero el presente era tal y como querían.

Será mamá Donde viven las historias. Descúbrelo ahora