Emilio dejó de creer en el amor el día en que aquel ojimiel murió en la cama de un hospital a causa de una leucemia terminal.
Lo había amado incluso más que a su vida y realmente no había palabras para explicar el dolor que había sentido cuándo se...
La alarma sonó y hoy era lunes así que no tenía ánimos de levantarme, pero tenía que hacerlo, me levanté e hice la misma rutina que todos los días, bañarme, vestirme y bajar a desayunar
Ale: Apúrate Emilio que vamos tarde
Emilio: Ya voy
Ale: Y porqué te levantaste tan tarde
Emilio: Lo que pasa es que anoche no podía dormir
Ale: Ya sé, no podías dormir pensando en Joaquín
Emilio: Que cosas dices Ale, mejor ya vámonos, ándale
Ale: Nos vamos, pero déjame decirte algo hermano
Emilio: ¿Qué?
Ale: Te gusta Joaquín, a mí no me engañas, ahora vámonos
Emilio: Vámonos
Prácticamente nos fuimos corriendo al colegio, llegamos y nos fuimos a platicar con Elizabeth mientras tocaban el timbre
Elizabeth: Hasta que llegan chicos
Emilio: Se nos hizo tarde, es todo
Ale: Todo porque Emilio no pudo dormir anoche
Ely: Hay amigo igual de despistado, sabes a quién me recuerdas
Emilio: A Temo *Cabizbajo*
Ely: Hay perdón amigo, enserio no te quise hacer sentir mal
Emilio: No importa
Elizabeth: Chicos, escuché que habrá alumnos nuevos, dos chicos y una chica.
Emilio: ¿Enserio? y ¿de qué grupo son?
Elizabeth: Creo que uno de los chicos y la chica van a estar en el curso de Ale
Ale: En el mío, cool, así hago más amigos
Emilio: Y el otro chico.
Elizabeth: ÉL estará en nuestro salón
Emilio: Me parece bien
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En otro lado
Joaquín: Mamá estoy nervioso
Leidy: Igual yo
Albert: Tranquilas todo saldrá bien, ya veran, aparte no están sólos, yo estaré con ustedes
Elisabeth: Ya ven, tu hermano los cuidará ¿verdad Albert?
