Cap. 86

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Meses Después

En el cuarto de la casa de su madre se encontraba un castaño de ojos mieles, estaba realmente nervioso y cómo no estarlo si en sólo 1 hora se convertiría en el futuro señor de Osorio. Sus amigas trataban de calmarlo y sobretodo a sus nervios, pues sino lo hacía pronto terminaría en el frío suelo e inconsciente a causa de los nervios que lo comían por dentro

Leidy: Ya cálmate Joaquín, no es para tanto 

Joaquín: No es para tanto, estoy a punto de casarme, joder estoy cómo todo novio antes de su boda

Joaquín: No es para tanto, estoy a punto de casarme, joder estoy cómo todo novio antes de su boda

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Ale: Yo no estuve así en mi boda con Albert

Leidy: Eso lo pudimos notar todos, porque mira que actuar cómo si fuese un día cómo cualquier otro está jodido

Joaquín: En eso tienes razón Leidy, digo, no pudiste si quiera emocionarte ó algo por el estilo

Ale: Saben cómo soy, además yo no soy la que se casa, yo actúe cómo si nada el día de mi boda y Joaquín está por desmayarse, así son las cosas chicos

Joaquín: Eso no ayuda en nada

Leidy: Ale dame ese peine de allí, no puedo peinar bien a Joaquín, se mueve peor que un gusano fajando

Ale: ¿¿¿Los gusanos fajan???

Joaquín: A quién le importa si fajan ó no, sólo pásale el peine, la boda está por empezar y yo aún no estoy listo

Ale: Alto ahí papito, eso fué tu culpa, sólo a tí se te ocurre aventarte una maratón de telenovela que terminó a las 5 de la madrugada el día de tu boda

Joaquín: Deja de repetirme que soy estúpido, sólo arréglenme y ya 

Leidy: No te me pongas en ese plan, dios, estás con un genio que ni tú mismo te soportas y luego críticas a Ale por lo del día de su boda

Joaquín: Y cómo quieres que esté con los nervios que traigo encima

Ale: Sólo piensa en la luna de miel y su noche llena de pasión

Joaquín: Eso no ayuda a calmar mis nervios, sólo los alborota más

Leidy: ¿Saben qué? sólo callénse y déjenme terminar de arreglar al chico mil nervios

Joaquín: Después de la boda juro que te mataré

Leidy: Te estaré esperando querido

Ale: Aquí nadie vá a matar a nadie, por dios, ambos ya son madre y padre, maduren 

Joaquín: No me hagas recordarte que tú estás por serlo en sólo 3 meses y que aún así le hiciste un berrinche a Albert en la heladería porque él no quería darte más helado cuándo ya te habías comido 18 conos de helado, ¿quién es la inmadura aquí?

Me Devolviste Las Esperanzas // Adaptación  EmiliacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora