Surprised ♡ KeonJu

03

Kanghyun escuchaba atentamente todo lo que el chico, llamado Dongju, que había llegado junto a su hijo tenía por decirle. Sin interrumpirlo y reprimiendo las ganas de hacer preguntas o incluso soltar insultos, permitió que ese pelilila bonito terminara su historia. Escuchando sobre cómo sus padres se habían portado con él, poniendose de lado del chico que lo había engañado, y cuales habían sido las circustancias con las que conoció a Keonhee. Terminando por entender sobre la tardanza de su hijo el día de su cumpleaños.

—Que muchachito más irresponsable me tocó como hijo —.el hombre regañó cuando Dongju dió por terminado su relato. Keonhee, que estaba sentado junto a él, se mantenía jugando con sus manos.— ¿Qué es lo que voy a hacer contigo, Lee Keonhee?

-Bueno, papá, follamos muchas veces y sin condón, ¿qué querías como resultado? ¿arcoíris y unicornios?

—¡Lee Keonhee, no seas grosero! — Dongju intentó cubrir las orejas de Dongmyeong, que desde que él había llegado se había mantenido jugando junto a él, pero al niño le parecía más interesante escoger un juguete antes que la conversación que mantenían los adultos.

-Eres un sin filtro e irrespetuoso —le reclamó, y Kanghyun asintió a sus palabras. Keonhee se encogió de hombros, comenzando a jugar con las hebras lilas de su cabello.

-El caso aquí no es lo que hicimos, lo hecho hecho está y me haré responsable de todo -aclaró. Dongju golpeó su mano para que dejara de desvaratar su cabello pero el moreno comenzó a jugar con una de sus orejas, haciendolo rodar sus ojos.— Pero papá, no puedo solo.

-Lo sé, y te ayudaremos. Seguirás estudiando y con tu trabajo, que si quieres puedes conseguir otro - Kanghyun suspiró, cruzándose de brazos. Y Dongju decidió volver a hablar.

-Yo haré mi traslado de prácticas y buscaré una escuela en la que pueda seguirlas. Hace varios meses que mis prácticas son pagadas- Dongju desvió su mirada cuando Dongmyeong tocó una de sus mejillas, sonriendole y mostrándole sus pequeños dientecitos. El niño extendió su mano y le entregó un yoyo, quizás para que jugara con él. Lo tomó, dandole una sonrisa y luego vió como el pequeño volvía su atención a los juguetes.

-Que lindo yoyo tienes en tu mano — Keonhee dejó de jugar con su oreja y tomó el juguete que tenía en sus manos, comenzando a entretenerse con él. Kanghyun rodó los ojos y Dongju soltó una risita.

-Te estabas quedando en un hotel, ¿no? -el mayor le preguntó y él asintió—, entonces, ¿no tienes muchas cosas aquí?

—No, no tiene muchas cosas. Sólo como tres bóxers y algunas sudaderas. Creo que lleva el mismo pantalón que el día sábado -Keonhee habló mientras seguía jugando con el yoyo, haciendo que sus mejillas se sonrojaran y que Kanghyun se aclarara un poco su garganta.

-No traje muchas cosas porque tenía pensado quedarme en el departamento que compartía con mi novio

-Ex novio -Dongju le dió una mala mirada al moreno junto a él antes de continuar hablando.

-Bueno, el caso es que todas mis cosas están en Busan y sólo tengo unas cuantas prendas pero están en el departamento ese, y no quiero ir allí. Necesitaré hacer un viaje para traer mis cosas.

-Puedes hacerlo éste sábado, Keonhee irá y te ayudará con todo.

-Ajá, pero tienes que comprarme comida, mucha mucha comida - Kanghyun tomó un cojín dispuesto a lanzarselo a Keonhee, pero no lo hizo. Keonhee dejó de jugar con el yoyo para mirarlo más de cerca.

-Pueden quedarse aquí en lo que consiguen un departamento, y Dongju, no te preocupes por nada. Sé y entiendo por lo que estás pasando, pero quiero que sepas que tienes todo mi apoyo y estoy seguro que Yonghoon también estará de acuerdo conmigo.

-Le agradezco mucho, enserio y

–¡Está brillando, mira! —Keonhee celebró, haciendo asustar a los que estaban con él. Dongmyeong, estaba comiendo fresas desde hace algunos minutos, tomó una y se la lanzó.

-Bueno Dongju, pues bienvenido a la familia, ¿no? -el rubio sonrió avergonzado, y Kanghyun le regaló una sonrisa comprensiva mientras tomaba su mano. Dongju giró un poco su rostro, al no ver como Keonhee jugaba con el yoyo, y pudo notar que el juguete se le había enredado.El moreno mantenía una mueca en su rostro mientras intentaba arreglar lo que había causado, y luego lo miró, tomando su mano para dejar el juguete en su palma.

- Creo que alguien dañó tu yoyo — Kanghyun se puso de pie, tomando un cojín para lanzarselo.

—Suficiente, tienes que ir a la universidad.

Dongju rió mientras veía como Kanghyun hacía que Keonhee se pusiera de pie y que luego fuera hasta su habitación. Dongmyeong volvió a tocarle la mejilla y le señaló los juguetes.

-Juga conmigo.

-Está bien-le sonrió, y Dongmyeong tomó una de sus fresas para ofrecersela.

Después de que Keonhee se fuera, Kanghyun se había encargado de contarle como estaba conformada su familia. Keonhee era el mayor de sus cuatro hijos; luego venía Goeun, que tenía sólo diecisiete años y era la única mujer en la casa; luego estaba Seoho con doce años; y por último Dongmyeong, con tres añitos recien cumplidos. Su esposo, Lee Yonghoon, era dueño de un cyber café, que tenía
una mini biblioteca incluída la cual se encontraba en una sala insonorizada. Parecía ser que cuando el cyber tuvo éxito y les dió buenas ganancias, Yonghoon había agregado la sala para invertir en la biblioteca. Kanghyun trabaja allí también, pero sólo por las tardes después de dejar a Dongmyeong la guardería, aunque Kanghyun le dijo que habían días en los que Dongmyeong no tenía ganas de ir por lo que le tocaba llevarlo con él al trabajo, o dejarlo al cuidado de sus hermanos mayores.

Ese día por ejemplo, después del almuerzo, Dongmyeong se había negado rotundamente a asistir a la guardería, diciendole a su padre como escusa que no quería dejar a "hyung bonito" sin compañía. Kanghyun se había reído y luego le había pedido su consetimiento para dejarlo a su cuidado. Por supuesto, no se negó, y Dongmyeong pasó toda la tarde junto a él. Incluso cuando Keonhee llegó y tuvieron que ir a buscar sus pocas pertenencias al hotel, Dongmyeong los había acompañado.

Conoció a los otros dos hermanos de Keonhee y le resultaron extremadamente agradables. Goeun le había dicho que gracias a ella Keonhee y él se habían conocido, pues el moreno sólo había ido para acompañarla a ella. Tambien, después de decirle que estaba esperando un hijo de su hermano, se había burlado diciendole que estaba muy felíz de que no hubieran perdido el tiempo en chocolates y cartitas de amor. Keonhee la había regañado después, enviandola a preparar la mesa para el almuerzo. Seoho era un niño muy inteligente y reservado, que tenía una actitud muy aldulta para la edad que tenía. El castañito le había presentado a Hoon, una gato blanco, grande y gordo, del cual él era el dueño. Sin preguntarle, Seoho le había respondido que se llamaba como su padre porque eran iguales y no sólo en apariencia, sino también en el aura amargada-juguetona que ambos tenían. También le había dicho que el próximo gato que tuviera se llamaría Keonhee, y que estaba seguro de que sería tan estúpido como su hermano mayor. Lo último se lo había susurrado para evitar que su padre lo escuchara.

Por último, pero no menos importante, había conocido a Yonghoon, el padre de su... de Keonhee. El hombre lo había tratado muy bien, y le había dicho que contara con ellos para todo, claro, le dijo todo eso después de haber llamado a Keonhee y regañarlo por lo irresponsable que había sido, y luego lo había regañado a él por seguirle los juegos a su hijo. Asustado, pensó que Yonghoon estaría en desacuerdo con todo pero el mayor había sido muy comprensivo.

-Creo que eres igual de torpe y estúpido que tu hijo - Kanghyun le había dicho cuando dió por terminada la llamada. El castaño se mantenía con sus brazos cruzados, mientras su esposo lo miraba con el ceño fruncido.

-¿Por qué me dices eso?

-¿Cómo es posible que lo hayas castigado con no tocar al gato por una semana?

Estaba bien, todo estaba bien por ahora.

♡♡♡

Bueno, solo aclarar que me decidí mejor y sus cabellos serán de la era de Twilight, porque amo el pelo lila de Dong, entonces ya corregí el cabello naranja del capitulo anterior 👉👈

Espero les esté gustando y graciaas