05. ocean eyes

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Ese día estaba muy  emocionada, recuerdo claramente que brincaba por todos lados con mucha emoción  y a pesar de que Félix y yo habíamos acordado de que yo iría a su casa a ultima hora me avisó que no podría ser en su casa puesto a que hoy estaban haciendo unas reparaciones en su casa y estaban taladrando y no sé que más porque no presté mucha atención realmente.  Yo solo sabía  que estaba muy emocionada y no sabía a que se debía pero, supongo que era por el hecho de que nunca había llevado un chico a casa. Era la primera vez que había un chico en mi casa.


Mmmmm... bueno, por mi parte

 Es decir la casa siempre estaba llena de chicos pero siempre era por Taehyung,yo nunca había invitado un chico a casa y no porque no me dejasen o bueno, realmente no sé si me den permiso de llevar chicos a casa ya que mis padres nunca están y siempre suelo hacer lo que quiera es decir,salgo cuando quiero, falto a la escuela si quiero y siempre voy a casa de mis amigas al igual que ellas conmigo. Aún así nunca había traído un chico a casa porque siempre me acordaba de mi padre,es loco sí pero mi padre cuando era chica me decía "No vas a tener novio hasta los 30" y siempre hacíá juegos con que se sentía celoso de cualquier chico que se me acercase, eso me daba mucha risa porque sabía que todo era mentira pero, me daba miedo igual.

No me importaba que no me diesen permiso ya que al final todo era con fines académicos solamente solo haríamos un trabajo y ya no mas así que por si acaso debería sobornar a alguien para que no dijera nada y sí, iba a sobornar a Taehyung por si pasaba algo pero, eso lo dejaría para luego. 

Ese día hice galletas de chocolate rellenas de dulce de leche, ayude a las señoras Cheng y Jung a limpiar la casa, eso sí yo tuve que insistir mucho pero no me importó en lo absoluto fui feliz ayudando,también había hecho jugo de fresas y realmente no sabía si a Félix le gustaba la fresa pero ¿A quién no  le gustarían las fresas?

Cuando Félix avisó que estaba cerca de llegar a casa estuve muy ansiosa y empecé a dar vueltas por todas partes como una tonta.


Ahora que lo pienso, fuí muy estúpida ¿cierto?

Cuando escuché el timbre fuí personalmente a abrir las puertas de casa con una sonrisa de oreja a oreja y ahí estaba el, con sus llamativos ojos sonrientes y una sonrisa de labios cerrados. Una sudadera azul y un pantalón chandal color gris. Se veía guapo luciendo tan simple.

—Hola Lix ¿como estás? — saludé en un tono alegre

—hola Yi. ,muy bien ¿que tal tú? —respondió con el mismo tono

—más que bien. Adelante Lix, puedes entrar— me hice un lado de la puerta dejándolo pasar y el con gustó pasó al porche

Luego cerré las rejas de la casa para irnos dentro y comenzar el trabajo. Comencé a guiarlo dentro de la cada y nos quitamos los zapatos al entrar, le dí unas pantuflas que con gusto aceptó y me dí cuenta de que sus pies eran muy grandes, se veía tan cómico con sus calcetines de batman que me fue imposible no soltar una carcajada.

—¿Que?—preguntó con asombro al verme riendo— ¿hice algo chistoso?—preguntó esta vez algo apenado y yo negué

—no,no. Para nada, es que... —hice una pausa— tus calcetines—le señalé estos y volví a reír

—Ahh... si, mis calcetines. Son mis favoritos—dijo con pena y quise reír más pero, contuve la risa y le negué con una sonrisa acercándome a el

ℳ𝓎  𝐁𝐎𝐘 |Lee Félix •En Edición •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora