Blood, Sweat & Tears [Freezer x Lectora]

Charla.

La vida da muchas vueltas y parecía que la suya estaba tomandose eso muy en serio, tan en serio que no le daba vueltas, la revolcaba como las olas del mar contra la arena. Primero es abducida, luego queda en manos de un tirano compuesto mayormente de piezas metálicas (aunque de eso ya no se queja, a pesar de todo era buen dueño) y ahora había perdido una pierna.-

¿Tal vez todos esos años en los que no se fracturó un solo hueso han sido porque el destino sabia que le esperaba algo peor?. Parecía así...

Se tardó en asimilar que había perdido de verdad más de la mitad de esa extremidad y ahora parecía ir a juego con el emperador. Que mala suerte terminar perdiendo su pierna por un simple malentendido. Podía acostumbrarse a la temperatura de la nave, la comida, los pequeños ataques cardíacos de vez en cuándo pero de esto si no estaba segura.-

Despertarse después de un evento traumático y descubrir que perdiste una parte importante de tu cuerpo no es algo que se asimile rapidamente. Pero esta experiencia le hizo preguntarse en silencio si así se sintió el emperador cuando le reconstruyeron su cuerpo. Ahora se le quedaba viendo más seguido, dándose cuenta que lo que debió haber ocurrido fue peor. Obviamente. Pero aun seguía siendo impactante, puesto que tiene entendido que ellos son seres superpoderosos.-

Su curiosidad por saber su historia era inmensa. Pero era más inmenso el dolor de cargar con esa pieza metálica y solo podía sentirse aliviada que Freezer no la obligó a caminar mucho los siguientes días, e incluso le daba la medicina que le recetaron los médicos para lidiar con los dolores. Aún así, los analgésicos no duraban mucho, se sentía muy débil. Y su amo podía notarlo, por lo que en lo que resto de la semana, se quedó a su lado con la excusa de que no había mucho que hacer en esa nave, puesto que su padre estaba mayormente a cargo de esa flota.-

Solo se desapareció por unas horas un dia de esos, ¿para qué?, no le preguntó y él tampoco le contó, solo entró a la habitación con una sonrisa satisfecha como un niño que acaba de cometer una travesura y nadie se daría cuenta que él fue el causante. Solo lo observó de reojo, mientras ella permanecía sentada con las piernas estiradas dejando que circulara la sangre, volviendo su vista al enorme ventanal, deleitandose con la maravillosa vista de las estrellas y el basto espacio exterior.-

Freezer: A menudo te la pasas observando las estrellas, ¿acaso nunca las viste así de cerca antes?.-Rompió el silencio con su elegante voz, sentandose junto a ella que se veía más apagada que los otros días.- O es que echas de menos tu antiguo hogar.-Intuyó monótono, atento a la expresión de ____ que frunció el entrecejo haciendo una mueca al pensarlo un poco.-

____: No, no realmente. Era un lugar muy aburrido, no hacia mucho en ese sitio... Lo único que extraño es la comida.-Movió de manera distraída los dedos de su pie mecánico, sin sentir nada abajo de esa pieza, solo... la sensación del movimiento.- Y las estrellas... Solo podía observarlas desde lejos, como pequeños puntos adornando el cielo. Siempre deseé viajar al espacio, observarlas de cerca y ahora que puedo, es una vista maravillosa, una... experiencia única como estar aquí con usted.-Dijó soltando una suave risa nerviosa, finalmente dirigiendo su mirada c/___  la carmín del tirano.- ¿Puedo seguir hablando?.-Él asintió, curioso por lo que diría.-... ¿Aún le duele?.-

Freezer: No, hace unos días dejó de ser un fastidio.-Respondió sin importarle en que su mascota supiera esto. Que él ha estado sufriendo el mismo dolor que ella porque su cuerpo se estuvo adaptando a las partes artificiales.-Y supongo que tienes curiosidad de cómo terminé en este estado tan humillante.-____ bajó la mirada algo nerviosa, pensando demasiado su respuesta al percibir que era un tema delicado.- Decidí darle una visita al planeta Namekusein por unas esferas que cumplían deseos... .-

Y sin que ella respondiera, Freezer le comenzó a contar lo ocurrido con lujo de detalle, enfatizando cada parte con bastante expresividad, externando su ira, su indignación e incluso, sin darse cuenta, su miedo por aquel Saiyajin. Se quedó escuchando toda la historia, mientras se comía en silencio una bolsa con frituras como si estuviese viendo una película. Era un poco difícil imaginar todo, sonaba surrealista, fantaseoso, pero aquí estaba, sentada en la cama de un tirano con sed de venganza.-