𝐓𝐇𝐄 𝐒𝐎𝐍; heeseung

05

"¿Eres sorda? ¿Qué coño estás haciendo aquí?" Preguntó de nuevo, claramente molesto. Diablos, no podía culparlo. Se suponía que debía estar aquí para una cita con el terapeuta, no para escabullirme por la habitación de un extraño.

"Yo..solo-"

"¿Siempre husmeas durante las citas con el terapeuta? ¿Para qué estás viendo a un profesional, de todos modos? ¿Problemas con la mudanza, problemas de daddy issues? No parecías muy dispuesta a decir mucho" Agité la cabeza, mordiéndome el labio y mirando hacia abajo mis pies.

"¿Y qué demonios estás haciendo con esto?" El marco de fotos me fue quitado y colocado de nuevo en su lugar original, y soltó un suspiro - ¿De alivio, tal vez?

"Lo siento, Heeseung" murmuré, y él me miró, pareciendo estar sorprendido desprevenido

"¿Cómo sabes mi nombre?"

"Chaeyoung de la cafetería me lo dijo.." Respondí, rascando el esmalte azul oscuro de mis uñas. Hace poco tuve mucho tiempo en mis manos, así que decidí pintarlas anoche por puro aburrimiento.

"¿Qué más te dijo?" No sabía si estaba enojado o no, pero si lo estaba, no era tan malo como cuando me pilló en su habitación menos de unos minutos antes.

"Nada" dije, dispuesta a mirarlo. "Ella no me dijo nada que no quisieras que supiera"

La habitación permaneció en silencio durante uno o dos minutos, y me sorprendió que no me hubiera exigido que saliera o que hiciera otro comentario negativo. El silencio no fue abrumador ni incómodo para ser completamente honesto. Estuvo bien. Me gustó.

"Será mejor que me vaya antes de que mi madre piense que morí en el baño" Dije, pasé junto a él. Jadeé cuando su mano me agarró la parte superior del brazo justo cuando llegué a la puerta, no lo suficiente como para doler, sino lo suficiente como para que supiera que quería mi atención de nuevo.

"Antes de irse, ¿cómo se llama, señorita gentilicia?" Bromeó. Mordiéndome el labio, forcé mis ojos a encontrarse con los suyos. No estaban enojados ni heridos como había visto varias veces antes, sino suaves y curiosos. Fue mi turno de ser sorprendida desprevenida.

"¿M-Mi nombre?" Pregunté, ¿Por qué quería saber mi nombre?

"Sí. Conoces el mío, es justo que yo también conozca el tuyo, ¿verdad?"

"Bueno, sí, supongo" dije, encogiéndome de hombros en respuesta.

"Okay, entonces ¿Cual es?" Preguntó por segunda vez

"Min" Respondí tímidamente, y él asintió, soltando mi brazo, antes de caminar por la habitación para sentarse en su cama.

"Bueno, nos vemos, Min" Solo asentí, antes de salir al pasillo, asegurándome de cerrar la puerta detrás de mí.

Eso fue definitivamente interesante.

*****

"¿En serio, Min? Media hora. Solo tenías que aguantarte y actuar a tu edad durante treinta minutos, ¿y esto es lo que tiras? ¡Maldita sea, estoy tratando de ayudarte!" Mi madre hirvió, con los ojos en el camino. Claramente, la señora Lee le había hablado de mi obstinado silencio o comentarios enojados, y mi madre no estaba contenta con eso en absoluto.

"¡Te dije que no necesitaba un terapeuta!" Casi grito. "¿Qué hay de esto, no lo entiendes? ¡Puedo manejar mis propios problemas!" Mi madre golpeó los frenos y tocó la bocina mientras alguien se retiraba frente a nosotros.

"¡Gilipollas!" Gritó, nuestra situación también parece jugar un papel en su acto de rabia en la carretera. Esperó hasta que estuvieran sobre un carril antes de pasarlos a toda velocidad, haciendo que mi respiración se quedara atascada en mi garganta.

"¿M-mamá? ¿Podrías ir un poco más despacio?" Tartamudeé, no me gustó la situación. Dejó salir un suspiro antes de aplicar presión a los descansos, la velocidad cayendo de alrededor de setenta a sesenta y cinco, y luego a sesenta.

"Esto es de lo que estoy hablando, Min" Suspiró, metió la mano en la guantera en busca de un pañuelo. Ni siquiera me di cuenta de que estaba llorando hasta que ella lo sostuvo para que yo lo tomara. "Apenas puedes estar en un viaje en coche de cinco minutos sin pensar en-"

"No" lo ordené, limpiándome los ojos y luego tirando nerviosamente de mis mangas "Tú no lo entendería"

"Pero ella es alguien que lo hace, cariño. Ella ve casos como los tuyos todo el tiempo. Por eso nos mudamos aquí. Ella es una de las mejores, y solo quiere ayudarte. ¿Por qué no dejas que te ayude?"

"¿Cómo coño entendería, mamá? Nadie lo hace. No estabas allí. Ella no estaba allí. Papá no estaba allí. Fuimos Hea y yo. Y Hea no lo hizo" Mi madre se endureció visiblemente ante el sonido del nombre de mi hermana mayor, y pude jurar que casi vi lágrimas en sus ojos, pero simplemente parpadeó y encendió una señal de giro para girar hacia nuestra carretera.

"No deberías maldecir, Min" Fue todo lo que dijo, y simplemente me mordí el labio y asentí.

Ella nunca lo entendería.

¿Quién lo haría?