𝐓𝐇𝐄 𝐒𝐎𝐍; heeseung

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El crujido de hojas y ramas debajo de mis pies era casi todo lo que podía escuchar mientras continuaba caminando por el desorden de árboles, hojas y ramas colgantes, con la esperanza de ir en la dirección correcta.

Suspiré de alivio cuando llegué a un claro familiar, mirando hacia arriba para ver la casa del árbol. Me cepillé los dedos por el pelo para deshacerme de las hojas pegajosas, escuchando atentamente. No escuché nada, pero de todos modos me dirigí a la escalera de cuerda.

"¿Heeseung? soy Min ¿Puedo subir?" Llamé.

"Sí" Fue la respuesta simple y apenas audible que recibí.

Heeseung se sentó en la esquina, las rodillas tiradas hacia su pecho mientras miraba por la ventana, las mejillas brillantes con lágrimas. Fue extraño para mí. No sabía qué hacer porque nunca lo había visto así, pero desearía no tener que hacerlo.

"¿Estás bien?" Pregunté, sentado a su lado. Comenzó a asentir con la cabeza antes de cambiar de opinión, sacudiendo la cabeza y dejando salir un silencioso "no"

"¿Quieres hablar de ello?" Le pregunté. Parecía vacilante, no estaba dispuesto a abrirse a mí antes de limpiarse las mejillas, despejándose la garganta.

"Mi madre" se rió, mordiéndose el labio antes de continuar. "Ella me trata más como a un maldito cliente que a su hijo"

"¿Qué quieres decir?" Pregunté, un poco confundida. Ella era terapeuta, así que claramente solo tenía la intención de ayudarlo.

Heeseung suspiró, extendiendo la mano detrás de él antes de entregarme un marco familiar con precaución. Miré la foto.

"¿Has sacado esto contigo?" Pregunté, estudiando las caras de la foto. Recuerdo haberlo visto en su habitación una semana más o menos antes cuando me atrapó donde se suponía que no debía estar.

"Sí" suspiró. "¿Sabes cómo hay algunas cosas en la vida que simplemente no puedes olvidar, no puedes superar? 'Sí adelante', dice mi madre. 'Está en el pasado' No es tan fácil".

Nos sentamos en silencio durante unos minutos, y una pregunta me pasó por la cabeza una y otra vez. Me preocupaba que me apagara de nuevo si iba demasiado lejos, pero no pude evitar preguntar.

"¿Dónde están ellos?"

No respondió ni por un momento, pero no parecía estar enojado o incómodo en absoluto. Seguía mirando por la ventana, observando el cielo. Finalmente se volvió para mirarme, con los ojos rojos y cansados.

"Murieron, Mi ... Era tarde y estábamos conduciendo y..." Terminó arrastándose, pero sus palabras hicieron que mi corazón cayera, golpeándome inesperadamente. Sabía lo que era perder a alguien cercano a ti, había perdido a Hea justo delante de mis ojos. ¿Pero toda una familia? ¿Un hermano y un padre? Eso sería casi imposible de manejar.

"Dios..." susurré "Lo siento mucho"

"Ella solo... Ella solo espera que lo olvide. Como si nunca hubieran significado una maldita cosa para mí, ¡y no puedo hacer eso!" Dijo, la voz crujida. "Es más terapeuta que madre. Nunca está allí, y cuando lo está, todavía está en modo de trabajo. Lo odio"

Nos sentamos en silencio durante un tiempo, no sabía qué decir. Consideré hablarle de mi hermana para que supiera que no estaba solo en la situación, pero decidí no hacerlo. Finalmente, le devolví el marco, y él suspiró.

"No voy a volver esta noche" me dijo. "Nos hemos peleado antes de irme, no quiero volver"

"No tienes que hacerlo" Dije, quitándome el suéter. Por suerte, no me había quitado ninguna de mis pulseras antes de salir de casa, así que no me preocupaba que viera nada que se suponía que no debía.

"¿Qué estás haciendo?" Heeseung preguntó nerviosamente.

"Si voy a dormir aquí esta noche, no voy a dormir en un piso duro, y no veo almohadas en ninguna parte" Me reí, doblando el suéter y colocándolo en el suelo. "Solo usaré esto"

"¿Te vas a quedar?" Asentí, temblando ligeramente cuando el aire fresco se arrastraba a la piel de gallina por mi piel. "Tienes frío" Heeseung frunció el ceño. Simplemente me encogí de hombros.

"No importan. He lidiado con algo peor"

"No, vuelve a ponértelo" dijo "Descansa tu cabeza en mi hombro o regazo o algo así, te congelarás sin suéter"

Asentí, tirando rápidamente del suéter hacia atrás antes de apoyar mi cabeza en el regazo de Heeseung, su espalda todavía presionada contra la pared de la casa del árbol.

"¿Realmente te has enfadado conmigo y Sunoo por lo de hoy?" Pregunté por curiosidad

"No estoy enfadado, solo un poco celoso, supongo. Quería pasar tiempo contigo, y luego te divertiste mucho con él.... Bueno, ¿Cómo estuvo la película?"

"¿The Damages In Our Galaxy?" Me burlé y él puso los ojos en blanco."Solo estoy bromeando. Estaba bien. Sunoo lloró mucho"

"¿Y tu no lo hiciste?"

"Exactamente lo que dijo"me reí. "Pero no, yo realmente no lloro en el cine"

"Oh"Fue todo lo que dijo. Sacó su teléfono de su bolsillo, encendiéndolo para que la pantalla se iluminara en la oscuridad. No parecía tener mucho que ocultar mientras revisaba algunos mensajes recientes de su madre, pidiéndole pacientemente que volviera a casa.

"¿Cómo conseguiste mi número?" Pregunté. No recuerdo dárselo en ningún momento. No se reunió con mis ojos porque me dio una respuesta rápida.

"Tu madre"

"¿Mi madre?" Pregunté y asintió con la cabeza.

"Cuando todos salimos a buscarte, ella te dio mi número pensando que podrías responderme más rápido, ¿tal vez? No estoy seguro. Pero me alegro de que me lo haya dado"

"¿Por qué es eso?" Pregunté

"Porque en realidad no hay nadie que prefiera estar conmigo ahora mismo que tú". Me sonrojé ante sus palabras, mirando a la pantalla. Gimé cuando vi que ya eran las 11:30, y nunca terminé mis deberes  de literatura. Aparentemente tendría que hacerlo antes de clase mañana.

"Vete a dormir. Te despertaré para que puedas llegar a casa al amanecer", dijo, apagando su teléfono y colocándolo junto a él. Asentí con la cabeza, antes de cerrar los ojos y caer en un sueño tranquilo.