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Este sábado, se suponía que iba a ir a la casa de Sunoo a estudiar para un examen de ciencias que lo tenemos el lunes después de que mi madre terminara de hacer recados. En este punto, ambas habíamos aprendido a movernos por la ciudad bastante bien, lo que significa que ella podría hacer todo en una hora en lugar de una hora y cincuenta minutos.

Sin embargo, tuvo una segunda entrevista de trabajo al día siguiente, así que insistió en que llegara a casa a las diez a más tardar. Recordándole que solo íbamos a estudiar y posiblemente ir por la ciudad a cenar después, le dije que no esperara más allá de las ocho o nueve, haciéndole saber que tenía mi teléfono móvil encendido en caso de que llegara tarde por alguna razón.

La casa de Sunoo estaba a poca distancia a pie de la mía, una milla o milla y media... En algún lugar de ese rango de distancia. Sin embargo, esperaba la calma habitual del lugar que normalmente se mostraba, no la música sonando desde un cuarto de milla de distancia o los coches que rodeaban el camino de entrada y aparcaban ilegalmente junto a la acera.

Me preguntaba si Sunoo había recordado que iba a venir hoy, o simplemente decidió al azar....¿Hacer una fiesta?

Eso no fue muy de Sunoo...

Me quedé afuera durante al menos unos cinco minutos, preguntándome si debería entrar, llamarlo o simplemente darme la vuelta e irme a casa. Revisé dos veces la dirección en el buzón antes de sacar mi teléfono de mi bolsillo trasero, buscando debajo de mis contactos a 'Sunito :)'

Rápidamente golpeé la llamada y sostuve el teléfono hasta mi oído derecho, cubriendo mi izquierda para tener la oportunidad de escuchar lo que mi mejor amigo estaría diciendo, si contestaba su teléfono móvil claramente.

"¿En serio, Sunoo?" Murmullé amargamente cuando me apareció el buzón de voz, colgando y decidiendo que no tenía otra alternativa que entrar. No tenía que ser gran cosa. Todo lo que tenía que hacer era entrar, rastrear a Sunoo y tal vez arrastrarlo de vuelta para la sesión de estudio, o simplemente reprogramarlo para mañana.

Suspiré, abriendo la puerta, evitando golpear a un chico que estaba allí, que me dio una mirada sucia cuando lo obligué a dar dos pasos hacia la izquierda, así que tenía suficiente espacio para encajar en el interior.

Qué gran cosa. No.

Empujé mi camino a través de la gente, sintiéndome extremadamente fuera de lugar. Llevaba una sudadera casual, lisa y gris y un par de vaqueros al azar que encontré en mi armario, llevando una bolsa de libros de texto de ciencia, mientras que las otras chicas presentes llevaban vestidos ajustados a la piel, o simplemente camisas que apenas eran suficientes para cubrirse el culo, con una copa roja en sus manos.

Como mi padre habría dicho: Los vestidos eran bonitos, solo me preguntaba qué pasaba con el resto de ellos.

Me apreté las escaleras, deseando que la familia de Sunoo viviera en una casa de un piso en lugar de dos. Seguro que habría facilitado las cosas por mi parte.

Evité a las personas que básicamente tenían sexo seco en la escalera, y murmuré que encontraran una habitación mientras pasaba. Por supuesto, estaban demasiado "preocupados" para escucharlos.

Después de una eternidad, finalmente logré llegar a la habitación de Sunoo, llamando dos veces. Gemí cuando me di cuenta de que probablemente no podía oír y abrí la puerta.

"Hey, ¿qué demonios está pasando? Pensé que se suponía que íbamos a estudiar" dije, encontrándolo sentado en el escritorio de su habitación. Cerré la puerta y caminé hasta el pie de la cama, mirando hacia él antes de sentarme.

𝐓𝐇𝐄 𝐒𝐎𝐍; heeseungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora