28 - compañeros de pesadillas

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Tras la orden de William de irse a dormir los niños tomaron rumbo a sus habitaciones, a mitad del camino Evan detuvo a Charlie.

—¿P-porque no... te quedas conmigo... esta noche?— pregunto nervioso, ni el estaba seguro de lo que decía.

Charlie dudó —¿Porque?— devolvió la pregunta.

—q-quiero ayudarte con... Lo de las p-pesadillas— habló desviándo la vista por la vergüenza.

Elizabeth lo escucho, se sorprendió un poco pues Charlie no le había contado sobre eso, y no la podía culpar, tampoco es que ella hubiese estado muy atenta esos días. —me parece buena idea— interrumpió la conversación y ambos la vieron confundidos —charlie ya estuvo en mi habitación, creo que ahora le toca a Evan ser el anfitrión— excusó para "ayudar" a su hermano y amiga.

Pese a volver a dudar, Charlie aceptó la ayuda de Evan con un suspiro —bien, me cepillaré y estaré allí— dije caminando hacia el baño.

Elizabeth empujó a su hermano a su habitación cerrando la puerta detrás de ella. Miró de forma amenazante a su hermano —¿Tu? ¿Ayudando con las pesadillas? ¿estás loco?— cuestionó la rubia sería —sin ofender, pero eres la persona menos indicada para "enfrentar" pesadillas— agregó tratando de regular su voz.

—se que soy un miedoso, pero por eso puedo ayudar, tengo experiencia en esto— explicó recordando lo que Michael le había dicho. —a-además, si pensabas que no podia ayudar ¿Porque dijiste que era una buena idea?— replicó.

Elizabeth suspiro —porque sé que no la dejaras sola— dijo en voz baja —pero tampoco quiero que empéores las cosas— agregó.

Ambos hermanos se quedaron viendo el uno al otro por un rato antes de que Evan respondiera —no lo haré, te lo prometo— dijo, sin estar seguro en el fondo.

•••

Cerca de la medianoche la casa estaba en total oscuridad, a excepción de la habitación de Evan. Allí se encontraba el junto a Charlie, ambos sólo jugaban y hablaban, esperando para ir a dormir.

Al cabo de un rato William se asomó a la habitación encontrando a ambos niños jugando en el suelo, tras mantenerse callado unos segundos observando la escena se decidió a hablar —a dormir, y no hagan ruido— sentenció para luego salir y cerrar la puerta detrás de él.

Charlie comenzó a sentirse nerviosa, en su rostro se podía notar que tenía miedo, no sabía si esas cosas eran reales o solo pesadillas y no quería que los demás salieran lastimados. Su remordimiento fue interrumpido por la mano de Evan apoyada en su hombro.

—N-No te preocupes...— dejo nervioso dedicándole una tierna sonrisa —N-nada... Malo va a p-pasar— agregó para reconfortarla, aunque en realidad aquellas palabras eran para el.

—¿Que pasa si vienen?— pregunto temerosa, su mente empezó a llenarse de imágenes, imágenes de ella o Evan siendo destrozados por esos monstruos. Aquello le erizó la piel.

—n-no te preocupes... no vendrán— dijo forzando una seguridad inexistente —a-además si quieres podemos dejar l-la luz encendida— señaló la bombilla que iluminaba la habitación, en un instante la luz se apagó dejando todo a oscuras.

Charlie ahogó un grito cubriéndose la boca con las manos, mientras, Evan se movió torpemente en la oscuridad hasta su cama donde de debajo sacó la linterna que Michael le había dado.

—a-aun tenemos luz— expresó para luego encenderla apuntando hacia Charlie quién se acercó corriendo a él abrazándolo con fuerza. Evan la sentía temblar e incluso la escucho sollozar “en verdad tiene miedo” se dijo a si mismo. Correspondió al abrazo y se quedó apuntando al techo con la linterna.

Problemas Del Pasado (Fnaf AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora