Heartstopper - Historias breves

"Aniversario."

Charlie.

Cuando desperté, lo primero que hice fue ver si tenía un mensaje de mi novio en mi teléfono. Estaba muy emocionado esa mañana porque ese día se cumplía un año desde que decidimos hacer oficial nuestro noviazgo. Había despertado tan feliz que demoré muy poco en cambiarme y estar listo para disfrutar el día.

Nick me había dejado un solo mensaje antes de irse a dormir, que por cierto, no lo había visto porque me había dormido antes que él esa noche. El mensaje decía:

"Cuando despiertes, ve al buzón y busca allí una caja roja"

Las dudas comenzaron a invadirme, tanto que no me importó que mis padres me miraran raro por ignorar sus buenos días y su elaborado desayuno preparado encima de la mesa cuando decidí salir corriendo a buscar la misteriosa caja.

Y allí estaba, entre sobres de mismo color, resaltando entre medio como si fuese Nick Nelson hecho en un objeto.

—Es fascinante como puedes ser tú en todo —murmuré. No quería que mis vecinos pensaran que estaba loco por hablarle a un buzón.

Cuando volví a mi habitación luego de tragar mi desayuno para evitar problemas, lo primero que hice fue abrir la caja. Dentro de ella había una pequeña foto nuestra, la primera foto que nos habíamos sacado, nuestra favorita. Y cuando saqué la foto, debajo de ella había una nota escrita a mano.

"Sé, que nuestro amor puede durar para siempre. Y tenemos la ventaja de poder almacenar de varias formas todo el tiempo que esto dure, así que nunca me gustaría olvidarlo.

Esta es nuestra primera foto juntos, ¿qué tal si sumamos más a nuestro álbum de fotos? Prometo que estas van a ser épicas.

Feliz aniversario.

Te quiero♥. "

Mi corazón se desbocó en el pecho, no había pasado ni media hora desde que desperté y ya estaba muriendo de amor por ese chico. Sabía que no me decepcionaría olvidando una fecha tan importante para mí, y que empezara de esta forma ya estaba haciendo que mi amor por él se multiplicara exponencialmente segundo a segundo.

En la caja, debajo de la nota, estaba escrito con la misma letra una dirección que, al apenas verla, sabía lo que significaba. La anoté rápidamente en mi mano y salí corriendo en busca de mi padre para convencerlo de que me llevara a ese lugar.

Estuve intentando evadir todas las preguntas de mi padre respecto al viaje y por qué yo no conocía ese lugar al que estaba yendo. Y por suerte, tuve que dejar de hacerlo cuando en mi teléfono el gps indicaba que ya estaba situado en mi destino. Solamente le había dado las gracias a mi padre por haberme llevado, y me bajé del vehículo.

El lugar estaba rodeado de mucho color verde, habían árboles gigantes y pequeños, arbustos y muchas flores que hacían querer estar una vida entera entre ellos para renovar el alma de la paz que emanaban a simple vista. En el medio, llegando hasta la entrada de una pequeña cabaña, había un camino remarcado en sus bordes con dos hileras de grandes rocas. Otro detalle que me había gustado.

Al llegar a la cabaña, podía notar que dentro de ella las luces estaban encendidas y que la sombra de una persona se reflejaba en una de las paredes que podía  ver desde afuera por la ventana. Y cuando entré, mis ojos pudieron ver lo más hermoso que jamás habían logrado ver hasta ese momento.