Capítulo 12

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No sé cuántos segundos pasaron hasta que su respiración irregular comenzó a cesar, yo solo me limitaba a cubrir su su espalda con mis manos en forma de consuelo. Supongo que se dio cuenta de que me había abrazado con todo su cuerpo, sin que pudiera escapar, así que se separó mucho antes de lo que necesitaba para calmarse.

Seguí teniendo la sensación de haber abrazado su cuerpo varios segundos después de eso. Él era suave y su aroma era dulce.

Lo siento, es lo primero que dice cuando comienza a separarse. Su voz se encuentra tan bien como su estado anímico. Lo siento, repite con insistencia, como si deseara que yo admitiera en voz alta que lo perdonaba.

ㅡNo sabía que el cine pudiera ser tan... emotivo, tan inspirador... tan cruel. Me afectó más de lo que pensaba, por favor, perdóname ㅡ Chanyeol está apunto de hacer una venia en el suelo y me levanto inmediatamente para evitarlo. No quería que me hiciera sentir peor, le ayudo a sentarse.

ㅡEstá bien, está bien. El cine es así ㅡle trato de dar palabras amables que aligeren el ambienteㅡ. También hay películas de comedia, de terror, de todo tipo de emociones, poco a poco las conocerás todas ㅡtrato de sonreírle, pero solo hasta que él asiente es que me siento mucho más tranquilo.

Se ve más que apenado, se separa y puedo ver como vuelve a ponerse rígido, como cuando está en el aula o como cuando vimos a su padre entrar. Yo no quería que se sintiera así conmigo. No quería que nadie se sintiera así conmigo, así que me puse de pie para buscar lo que había robado. En cuanto levanté la botella vi cómo sus ojos se abrían sin control. Parecía demasiado sorprendido.

ㅡ¿Estás seguro? ㅡ pregunta susurrando, como si las paredes escucharanㅡ. ¿Qué tal si... Qué tal si tus padres lo notan?

Le respondí que jamás tocaban la vitrina del alcohol, no lo notarían antes de que pudiera conseguir una nueva.

ㅡNo puedo creer que haya algo que asuste al gran Park Chanyeol ㅡle dije entre sonrisas. Su respuesta fue un ceño preocupado pero decidido.

ㅡNo le temo a nada...

Una vez aceptada mi propuesta, me dispongo a explicarle la dinámica. Si teníamos que conocernos, por lo menos que fuera de una manera divertida.

ㅡTe haré una pregunta incómoda ㅡprosigo a servir dos vasosㅡ.  Si respondes, yo debo tomar uno de los vasos. Si no quieres responder, entonces tendrás que beber en mi lugar.  ¿Te parece bien?

Él asintió confiado. Comencé preguntando qué sentía al controlar su poder. Pregunta tonta, ¿no? Pero en mi defensa, yo no sabía que era aquello. Quería saberlo todo: ¿Cómo se siente transformarse? ¿Qué suele hacer cuando quiere transformarse en algo específico? ¿Hay algún límite de tamaño para transformarse?

Chanyeol se mantuvo pensativo durante bastante tiempo, veía hacia la ventana intentando descifrar cómo se sentía al transformarse y luego comienza a relatarme todo. Su madre tenía ese don y cuando supo que él también lo tenía se emocionó tanto que llegó a las lágrimas. Con ella siempre estaba bien llorar, decía con una sonrisa temblorosa, o jugar, o tontear.

Puede convertirse en lo que quiera siempre y cuando tenga la energía para hacerlo. Si quiere convertirse en una ardilla, debe haber comido tan siquiera una ensalada, pero si quiere transformarse en una persona, mínimo debe haber comido bien y merendado.

ㅡY verduras, no como te gusta comer a ti.

Ahí estaba ese Chanyeol típico que expresaba sus opiniones con desprecio y acidez. Sin embargo, ya no me hacía daño, lo había visto llorar hace una hora entre mis brazos por una película y además, me había llamado atractivo. Ya no creía en esa imagen que le gustaba proyectar.

Como sea, divagamos un poco más. Él me preguntó sobre mi recuerdo más vergonzoso, cosa que creo que después podrá usar en mi contra, y yo le pregunté sobre su miedo más extremo. Bebimos un par de vasos hasta que decidí preguntarle sobre Irene.

ㅡ¿Ya la olvidaste? ㅡen ese momento reflexiono que me había equivocado, debí preguntar qué había sucedido realmente. Podría confirmar los rumores de primera mano.

Ambos nos miramos el uno al otro, su expresión comenzaba a verse afectada por el alcohol, al menos me parecía más graciosa. Chanyeol tarda un par de segundos en responder y en esa eternidad deseé que mi don fuera leer la mente.

ㅡCreéme, ya la superé ㅡañade con un tono bastante tajante. Como si hubiese sido un error mencionarloㅡ. ¿Y tú? ¿Alguna vez has salido con alguien?

Su inquietud me descoloca un poco, estoy pensando en si debería pagar su pregunta, o tan solo responder igual de cortante cómo él lo hizo. Se ve bastante bien, tranquilo.

ㅡNo ㅡdigo con sinceridad. Me costaba demasiado entablar relaciones sanas con los demás. Seulgi era una bendita excepciónㅡ. Y antes de que lo digas, sí, sí me han invitado, pero no he querido.

ㅡ¿Por qué? ㅡpregunta calmado mientras bebe su vaso correspondiente.

ㅡTienes que esperar tu turno.

ㅡKyungsoo ㅡdice con insistencia y con su mano me baja el vaso.

Es una piedra en el zapato, molesto e irrita mi paciencia obligándome a decir la verdad.

ㅡToma otro. Es la regla ㅡél lo hace, bastante adaptado al juegoㅡ. Creo... que tengo miedo. Miedo de que la persona que quiera, no me quiera de vuelta. Miedo de romper su corazón o romper el mío. Prefiero, mantenerme al margen, por seguridad.

Chanyeol guarda silencio un momento intentando procesar todo lo que me ha costado decir.

ㅡ¿Te gusta alguien?  ㅡle pregunto ansioso. Ya que las preguntas estaban yendo hacia esa dirección, ¿por qué no saber? Él comenzaba a parecerme una persona interesante, ¿serán los efectos del alcohol?

ㅡSí ㅡdice y me señala que debo tomar el vaso que tengo sostenido en la manoㅡ. Lo conoces, es de la clase.

De repente siento como si me hubieran lanzado un balde de agua fría. ¿Acaso él dijo "lo conoces"? ¿Es un chico? ¿Le gustan los chicos?

Resoplo tratando de evadir la presión e intento que mi semblante se mantenga neutral, no quisiera que pensara que lo trataría diferente por admitir en voz alta que alguien le gustaba. Yo no era así. Por lo menos, podría hablar conmigo, porque éramos iguales: dos gay o un gay y un bisexual que no tenían poderes.

Por suerte, él habla, salvándome de tener que pensar en otro tema de conversación.

ㅡMi turno ㅡdice bastante animado por el licor y por primera vez en toda la noche es él quien sirve los vasosㅡ. ¿Puedo besarte?

Comienzo a reírme. Es obvio que esto ya se nos subió bastante a la cabeza.

ㅡCreo que ya fue suficiente ㅡlevanto los vasos y la botella sintiendo como una ola de calor impacta mi frente y mis mejillasㅡ. El alcohol te está haciendo decir incoherencias.

Chanyeol toma mi mano fuertemente y me mira a los ojos.

ㅡYo creo que me esta ayudando a decir la verdad ㅡsus iris profundos son como un breve hechizo hipnotizante. Su otra mano sube hasta mi cuello y me empuja contra sus labios.

Puedo sentir su timidez, pero también su ternura y dedicación.

Todo había sucedido en unos instantes, ni siquiera supe qué decir o qué hacer. Solo sentía las caricias de sus labios y mi corazón latiendo al mismo ritmo. Me quedo quieto completamente, tan impactado que no me podía mover ni un poco, hasta que noto que Chanyeol se aleja con una cara preocupación y corre hacia mi baño.

Me siento tan confundido, analizo si lo que acaba de pasar ha sido un sueño, imaginación o tan solo realidad. Después de unos segundos, me acerco un poco para confirmar que todo está en orden y entonces lo veo a devolviendo todo lo que había bebido en el excusado.

¿Tan mal estuvo mi beso?

Devuélveme Mi Don [ChanSoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora