Capítulo 5
En todo el trayecto del restaurante al edificio donde se encontraba su departamento, Gulf se sintió nervioso. Para él era una sorpresa y algo muy difícil de creer, pues en todos los años conociendo a Mew jamás se había sentido de esa forma en su presencia. Conforme transitaban por las calles fue consciente que su tiempo con él se estaba acabando y no quería. Jamás imaginó que alguna vez desearía no separarse nunca de Mew Suppasit.
- Llegamos señor Suppasit, ¿Seguirá siendo usted un caballero y me acompañará hasta la puerta de mi departamento para asegurarse de que llegue bien a casa? – lo decía bromeando pero Gulf deseaba que el mayor le dijese que sí.
- Vamos – respondió Mew apagando el motor y desabrochando su cinturón de seguridad.
Aquella simple respuesta hizo feliz a su corazón. Estaba muy confundido y ni él mismo sabía exactamente lo que quería, lo único que deseaba era que su tiempo con Mew no terminara, al menos no todavía, al menos no así.
Cuando llegaron a la puerta, las excusas para retener a Mew se habían agotado. Tal vez si le pidiera repetir la cita fuera del contexto del día de San Valentín, éste aceptaría, pero el mayor no había comentado nada con respecto a la misma ¿La había disfrutado tanto cómo él? Primero querría corroborarlo antes de pedir una segunda reunión.
- Fue una gran noche, lo pasé increíble – comentó Gulf antes de abrir la puerta de su departamento.
- También yo lo pasé bien a pesar de que alguien robó porción de mi cena – era raro que Mew bromeara pero cuando lo hacía se permitía sonreír más.
- No me detuviste en su momento, así que no hay delito que perseguir, soy inocente – alegó Gulf mientras metía la llave a la cerradura y se giraba de nuevo hacia Mew para despedirse.
- Mucho más inocente de lo que imaginé – susurró el mayor acercándose a él.
Gulf pudo ver que esta vez Mew no tenía intención de detenerse. Y él no iba a hacer absolutamente nada para detenerlo. Observó como el rostro de quién antes había sido su archirrival, se aproximaba al suyo y un montón de sentimientos lo atacaron sin previo aviso. Estaba asustado porque desear tan intensamente que Mew lo besara, y al mismo tiempo quería apresurar al hombre en su misión de probar sus labios.
Con suavidad, Mew tocó sus labios e instó a que él los abriera para un roce mucho más íntimo. Desde el primer contacto, algo dentro de Gulf explotó pues aunque más de una vez había imaginado un escenario en donde él y Mew compartían un beso, la realidad estaba superando a su imaginación con creces.
La exaltación subió de nivel cuando sintió la poderosa mano de Mew acariciar su nuca y la necesidad de tocarlo lo volvió loco. Rodeó su cintura con los brazos y se acercó más a él para sentir su calor. Sí, había dicho que nada de relaciones fugaces y nada de sexo casual pero ¿Era demasiado tarde para arrepentirse de sus palabras?
- ¿Qué dirías si te digo que quiero invitarte a pasar? – preguntó Gulf con la respiración entrecortada. Había sido solo un beso, pero sin duda quería llegar a más. No sabía que tan lejos, pero deseaba avanzar con él.
- Diría que entraría siempre y cuando realmente estés seguro de que eso es lo que verdaderamente deseas – respondió Mew con sinceridad. Jamás haría algo que Gulf no quisiera y mucho menos lo presionaría para que tomase una decisión.
El menor lo miró a los ojos tratando de encontrar una respuesta clara porque sabía que no estaba pensando con claridad. Una parte de él le decía que no era buena idea dejarse llevar por la pasión que estaba sintiendo por Mew, pero al mismo tiempo, el hambre que tenía por aquel hombre amenazaban con hacerlo perder la razón.
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Cita a ciegas
FanfictionMewGulf Se supone que una cita a ciegas es aquella en la que dos personas que se reúnen aún no se han conocido ¿No? Pero Mew y Gulf tienen más de veinte años conociéndose entonces ¿Cómo puede ser eso posible? "Queda prohibido, salvo excepción previs...