Cuéntame de papá

Mamá ya he vuelto

Porque el Señor Hargreeves solo pudo conseguir 6 hijos con poderes y un nieto llamado Cinco... igual con poderes.

En el Pasado

- ¡Papá yo no quise! ¡no qui...!

La bofetada que recibió el joven Klaus lo hizo retroceder y caer contra el duro suelo de aquella sala tratando con sus brazos cubrir su cara de la golpiza de su padre.

La mirada horrorizada de sus hermanos no tenía comparación. Sus 5 hermanos estaban callados, llorando en silencio de lo que veían y uno de ellos ardía en rabia de lo que presenciaba.

- ¿Quien fue?.- pregunto seriamente causando miedo en el joven vidente.- ¿¡quién fue el que te embarazo!?

- Y-yo.. y-yo me haré cargo de el, no dejaré que nada le falte.. solo déjame de golpear.- se justificaba, pero el señor Hargrevees no pensaba coherentemente en ese momento.

- ¿Y que serás? ¿¡padre soltero o más bien una asquerosa madre soltera!?

El pequeño estaba llorando ante aquellas palabras, pero no podía delatar a esa persona, aún no.

Ya era tarde, se había declarado solo.

- ¡Fui yo, padre!.- grito Ben poniéndose frente a Klaus que aun estaba en el suelo. El mayor abrió los ojos asombrado de sus hijos.

- Quisieron jugar a ser grandes ¿cierto?.- el tono de sarcasco y culpa era palpable. Se paro recto y los apunto a ambos con el bastón.

- ¡Ben, Klaus.- hablo firme.- Ustedes dos! Más les vale hacerse cargo de esa cosa.- suspiro por unos segundos regulando su respiración- perdónenme, solo que.. no es como si todos los días te dijeran que vas a ser abuelo.. tiene solo 13 años, no es la edad para hacerlo.

Ambos jóvenes bajaron la mirada, estaban en problemas, pero los solucionarían juntos.
Habían pasado varios meses desde aquella confrontación y su relación había mejorado con su padre y hermanos.
Klaus ya tenía 6 meses de embarazo y juntos estaban más que felices de este bebé.

- ¡se está moviendo! ¡Ben, mira!.- grito Klaus a Ben quien se acerco corriendo hacia su pareja poniendo su oreja en el vientre de Klaus.- es tan fuerte, pero muy pequeño aún.

- Es papá quien te habla, pequeñín.- susurro Ben al bebé dentro de Klaus quien cuando le dijo pequeñín dio una fuerte patada justo en la mandíbula de su padre.- auch!

- T-te lastimo?

- Solo u-un poco, no es grave. No le gusta que le diga pequeñín ¡auch!.- otro golpe.

Luther miraba en silencio desde arriba como sus "hermanos" disfrutaban de aquel hermoso milagro de la vida, algo que el ansiaba con su pareja Diego Hargreeves.

Para el era sumamente adorable el imaginar ver a su Diego con pancita de embarazo, aunque este se negaba rotundamente a tener un bebé.

Y hablando del rey de Roma.

- ¿Qué estas haciendo grandulón?.- pregunto bruscamente Diego hacia Luther sacándolo de sus pensamientos.- no me digas que quieres ser la madrina de esa cosa.- rio con burla.

- No es nada, solo... ya sabes. Miró a los chicos con su nuevo bebé.

- Ay ya Luther! Ya se a donde va a este asunto, de una vez te digo ¡yo no tendré ningún bebé! Somos héroes! no tenemos tiempo para cambiar pañales y esas cosas.

Luther quedo dolido ante esa confesión, obviamente no ahora, pero cuanto deseaba formar una familia con el chico que amaba. Aunque este solo era deseo de parte de el.

Klaus

Ojalá así haya sido todo, tan lindo, tan perfecto, pero cuando cumpliste los 13 años ocurrió una tragedia para todos, sobretodo para mí porque fue el día en que te perdimos...

- Lo siento amor

- ¡Nooo! ¡Ben! ¡nosotros te necesitamos! ¡nuestro hijo! ¡nuestro Cinco te necesita!

Ese horrible día perdí a mi pareja, a tu padre... y tiempo después te perdí a ti.
Cuando desayunabas de repente discutiste conmigo sobre tu poder, papá me recrimino de ser mala madre porque descubrió que hace tiempo me empecé a drogar para aliviar un poco el dolor de perder a Ben.
Me gritaste, sé que no quisiste hacerlo, tuviste miedo y saliste corriendo justo cuando estábamos comiendo.

- ¡Cinco ¿a donde vas!.- grité más no me escuchaste o más bien no quisiste hacerlo.- ¡ven aquí ahora jovencito!

Fui detrás de ti..

Pero ya no estabas...

Por ningún lado de la calle..

O de nuestra época..

El dolor solo lo pude entender yo mismo, me faltaba el aire y sudaba frío, justo cuando todos te amaban incluido tu abuelo y abuela, pero por mi culpa todo se acabo.

- ¡No esta! ¡no lo encuentro! ¿¡a donde fue!?.- los gritos de desesperación se escuchaban a mil kilómetros, sus hermanos trataban de calmarlo corriendo Luther y Diego por las calles mientras Allison iba al parque cercano a la casa convenciendo a las personas de ayudarla.

- Oí el rumor de que me ayudaran a encontrar a un pequeño de 13 años llamado Cinco...

Aún así no lo encontraron y ante la indiferencia de su padre fue el primer detonante para que los jóvenes se separaran y cada quien tomara su rumbo.

Presente (hace un par de minutos antes)

El día que Cinco volvió a casa después de el "descuido" de su madre lo primero que paso esa tarde del enorme agujero en su patio trasero. Klaus y el fantasma de Ben volvieron a ver a Cinco.

Cinco era todo un joven de 13 años como aquella vez que se fue. El vio a Klaus y sonrió sincero hacia el vidente.

Más felices no pudieron estar hasta que Cinco recordó por que estaba ahí.

- Carajo...

Ahora si, en el presente

- ¿Quién te dio el permiso de hablar así de mi?.- pregunto Klaus enfadado hacia su pequeño.- pequeña mierda ¿Quién diablos te crees?

- Auch, así reaccionas después de perderme ¡por tu culpa!

- ¡Yo no te pedí que salieras corriendo como un lunático! ¿¡que acaso estas mal de la cabeza!?

- Pues tomando en cuenta la madre que me toco..

- ¡No me hagas darte otra!.- amenazo levantando la mano, pero este ni se movió de su lugar. Esa mirada de arrogancia, la había visto antes en alguien más.- ¡deja de mirarme así!

- ¿Por que? ¿acaso te recuerdo a papá?.- retó.

La demás familia escuchaban atentos atrás de la puerta de la sala aquella pelea familiar.

- Si ambos tienen el mismo carácter esta pelea jamás terminara.- dijo Allison cruzándose de brazos.- como sea, debo irme para ir a ver a mi hija. Ellos lo atenderán cosas de familia jajaja

Luther ante ese comentario bajo un poco la mirada, Diego se dio cuenta de esto de inmediato, aquí venía otra vez, Allison reacciono tarde.

- Diego...

- No.