Loliel - ¿Y SI?

Atrapados

En Global Radio aquel día ocurría un evento de bastante importancia. Estaban reunidos grandes empresarios y también famosos radialistas. Era momento del intervalo cuando Loli decidió bajar a tomar un café en la cocina de la empresa. Al llegar a la puerta del ascensor, se encontró con Rafael.

— ¿Subiendo o bajando? — preguntó Rafael.


— Bajando.


Él apretó el botón para bajar y en pocos minutos el ascensor llegó. Ambos entraron y luego comenzaron a bajar, hasta que de repente el ascensor se detuvo. Loli pronto se desesperó.


— ¿Que estás pasando?


— No lo sé. Ningún botón está funcionando.


— No me puedo quedar encerrada aquí.


— Cálmate.


— Tengo que salir. Tengo claustrofobia.


— Ok. Necesito que te calmes. Verás que no va a tardar.


— Ojalá que no.


Rafael siguió intentando los botones pero de nada sirvió.


— Nada todavía. Y estoy sin señal... Tienes algún señal, Loli?

Loli no respondió. Rafael se volvió y vio que Loli estaba inconsciente y luego se desesperó.

— Loli, Loli. Despierta, por favor.


Después de tres intentos, Loli despertó.


— ¿Que pasó?


— Te desmayaste. ¿Estás bien?

Por un momento sus ojos se encontraron.

— Si, estoy bien. ¡Me sueltas! — dijo Loli alejando a Rafael.


— Solo estoy intentando ayudarte, Loli.


— No necesito tu ayuda. No te quiero cerca de mí.


— Loli...


— Todavía estoy enojada contigo.


— Yo sé, yo sé..


— Porque te acostaste con ella, Rafael? No me amas más o que?


— Por supuesto que te amo, Loli.


— Entonces porque hiciste eso? Dime.


— No lo sé. Yo estaba enojado, bebí y hice lo que hice. Sé que no justifica... y te pido perdón por mi actitud.

— Me lastimaste tanto con esto.

— Me arrepiento de haber estado con ella.. No sabes lo cuanto.. — disse Rafael segurando o rosto de Loli — Perdóname, Loli. Yo te amo..


Loli lo miró fijamente y luego los dos se involucraron en un beso lento y súper intenso. Después de varios minutos con sus labios pegados, Loli detuvo el beso.


— Yo también te amo, Rafael.. pero estoy lastimada.


— Yo sé.


— No te puedo perdonar ahora.. Dame tiempo.


— El tiempo que quieras. — dijo haciendo una caricia en rostro de Loli — Solo saibas que yo no voy a desistir de ti.

Loli sonrió tímidamente y tocó la mano de Rafael. Por un segundo se miraron y fue en ese momento que el ascensor volvió a funcionar.

— Por fin volvió — dijo Rafael.

— Si, gracias a Dios. Morrería si quedara más tiempo encerrada aquí. — rió

Rafael rió

— Las puertas se abrieron. Vamonos.

Los dos salieron del ascensor y fueron al salón principal, donde Loli quedó sentada recibiendo atención debido al desmayo. Después de un tiempo Rafael se acercó.

— ¿Todo bién?

— Sí, sí. Fué solo un malestar.

— Que alívio. — dijo acariciando el rostro de Loli.

— Gracias, Rafael. Gracias por cuidarme.

— De nada. Aquí estoy siempre.

Rafael le dio un beso en la cabeza a Loli y luego la abrazó. Los dos se quedaron así por un largo tiempo hasta que se alejaron.

— ¿Piensas volver al evento?

— Claro, pero voy por las escaleras

Los dos rieron 

— Te acompaño.

Loli asintió y los dos se encaminaron al evento. En todo momento no dejaron de intercambiar miradas, era perceptible a los ojos de cualquier observador que todavía existía algo allí. Ellos se deseaban pero por cuenta de decisiones equivocadas estaban separados. ¿Tendría vuelta? Eso solamente el tiempo podría responder.