Loliel - ¿Y SI?

¿No te importas conmigo?

En el sofá, Karen y Rafael veían una película juntos. Pero Rafael estaba con la cabeza lejos. Él aún intentaba procesar que Vicente, su amigo, era el amante de Paulina y ahora actual novio. Nunca imaginó que sufriría tamaña traición. Karen se dio cuenta de que Rafael estaba distante y preguntó.

— Rafa..¿Qué tienes? Está distante.

— Nada, es que solamente estoy cansado.

— ¿Seguro?

— Sí.

Karen asintió y volvió la atención a la película. Una hora después la película terminó, y Karen decidió irse a casa. Los dos se despidieron y Karen se fue. Solo, Rafael fue a su habitación. Un buen rato después decidió llamar a Loli. Él necesitaba hablar con alguien y ella era la única con la que se sentía cómodo. Loli, estaba en su habitación cuando recibió una llamada de Rafael.

— Hola, Loli. ¿Incomodo?

— Hola, Rafa. No, para nada.

— Yo te llamé pues quería te pedir un favor.

— Dime.

— ¿Puedes venir a mi departamento? Yo no estoy bien..y ahora necesito desahogarme.. necesito de una amiga.. te necesito..

— Por supuesto que puedo.. pero Rafa.. ¿Qué pasó?

— Te cuento cuando llegue.

— Ok. Yo llego en algunos minutos.

— Ok. Te espero.

Colgaron y Loli inmediatamente cambió de ropa, cogió sus llaves y avisó a Norita que necesitaba salir. Enseguida fue hasta Rafael. Así que llegó vio que Rafael realmente no estaba bien y lo primero que hizo fue abrazarlo.

— Que tienes? Que pasó?

— Yo vi Paulina y Vicente besándose.. y me enteré de que están juntos desde hace tiempo.. o sea el era el amante de Paulina.

— Rafa, yo siento mucho.

— Yo no esperaba eso de Vicente. Yo estoy muy mal. Me siento traído, con rabia.

— Y no es para menos. Vicente era su mejor amigo. — dijo acariciando el rostro de Rafael.

— Si, así yo pensaba que era. No puedo creer que los dos me hicieron eso. A mis espaldas todo este tiempo. Me siento un imbécil.

— Hey, no te sientas así. Tú no tiene culpa de nada. Ellos que no tuvieron el valor de hablar con la verdad.

Rafael suspirou. Loli o abraçou e ambos ficaram em silêncio. Depois de um tempo Loli confessou algo.

— Yo sabía que sobre Paulina y Vicente. Digo.. en la noche que regresé de la convención yo los vi besándose.

— ¿Sabías? ¿Y por qué no me dijo nada? Por Dios, Loli.

— Yo entiendo si te quedas molesto conmigo pero eso no cabía a mí decirte, ellos que deberían.

Rafael se levantó y fue a la cocina, Loli lo siguió.

— Perdóname, Rafael.

— ¿No te importas conmigo?

— Claro que me importo.

— Entonces debería haberme dicho. Yo preferiría saber de ti do que verlos como ví.

— Mira, Rafael. Yo me quedé en una posición muy complicada. No podría, perdón...

Rafael respiró hondo.

— Todo bien. Entiendo tú situación.

— Yo quería decirte pero Vicente y Paulina me pidieron que no hiciera pues ya te iban a contar..

— Todo bien..

Los dos volvieron al sofá y Rafael se desahogó por unos minutos más. Y todo el tiempo Loli le daba el apoyo que él necesitaba en ese momento. Después de un tiempo, Loli decidió irse.

— Bueno, yo ya me voy. Espero que te haya ayudado.

— Sí, me ayudó muchísimo. Me siento muchísimo. Pero no te vayas, todavía.

— Es que ya se va a poner tarde.

— Yo te acompaño. Pero quédate aquí conmigo un poco más.

Loli asintió. De repente, Rafael dijo algo.

— Te extraño, Loli.

— Rafael...

— No puedo negartelo

— Yo también te extraño...

— ¿Entonces porque no damos una chance?

— Ay porqué.. no lo sé. Rafael, es mejor no hablar de eso.

— ¿No sabes o qué? No sabe lo que quieres?

— Si, sé. Y tú también sabes lo que quiero.

— ¿Y que quieres?

— Quiero estar contigo, Rafael. Pero no puedo.

Rafael la miró fijamente.

— Si, puedes, Loli. Ya no estoy con Paulina, lo mío y de Karen no funciona pues yo no siento nada por ella. Todo lo que siento aqui adentro pertenece a tí. Es contigo que quiero estar.

Loli apenas miró y Rafael en la misma hora la tiró para más cerca y la dio un beso bien intenso. Ella no pudo resistir y se entregó por completo. Después de varios minutos disfrutando el uno del otro, se detuvieron.

— Danos una chance, Loli. No vamos dejar esto se acabar así. Vamos intentar..

Loli respiró hondo.

— Sí, vamos intentar.

Rafael sonrió.

— Pero vamos despacio.. ¿Si?

— Cómo tú quieras. — tocó la mejilla de Loli.

— Y una cosa muy importante... tú tienes que hablar con Karen. Tienes que ser honesto con ella.

— Si, claro. Voy hablar con ella. Voy a decir que no siento nada.

— Ok. Bueno, entonces ya me voy.

— Ok. Quieres que te acompañe?

— No, no es necesario.

Rafael asintió. Los dos fueron hasta la puerta.

— Gracias otra vez por venir. Por escucharme.

— Siempre que necesites.

Se abrazaron y se besaron rápido.

— Buenas noches, Rafa.

— Buenas noches, Loli.

Loli se fue. Rafael se sentó en el sofá y ya estaba mucho mejor después de haber desahogado con Loli, era. visible lo mucho que hacía bien para él. Y saber que ahora él y Loli tendrían una nueva oportunidad lo dejó extremadamente contento. Resulta que es bueno estar cerca de quien nos hace bien.