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Los siguientes días Montgomery no pudo ver a Chica por algo más fuera de los ocasionales ensayos y las presentaciones, no porque no la buscara fuera de esos espacios, sino porque no la encontraba y cada vez que iba a su habitación y tocaba la puerta ella no le abría. Además de eso, ella bajaba las cortinas en las noches.

Había pasado una semana así y el lagarto recordó la idea que le dió su buen amigo Sundrop ese fin de semana, por lo que puso manos a la obra para utilizar al Pizza Bot de la forma menos desastrosa posible para así hacer una pizza con todo lo que se pudo imaginar para el agrado de la Glamrock. Sin embargo, no quería solamente darle una pizza con todo, por lo que con mucha delicadeza y una paciencia que jamás había tenido en su existencia usó una de sus garras para cortar la pizza y darle forma de corazón. Tomó el plato y se dirigió a la habitación de la plumífera.

Chica logró captar el aroma de la pizza cuando el lagarto se acercaba a la puerta, razón por la que dejó su práctica diaria con la guitarra sumamente deprisa lanzando el instrumento al sofá de su habitación para correr hasta la puerta y abrirla, logrando ver primeramente la pizza en forma de corazón y luego al alto reptil antropomórfico que estaba boquiabierto, con los lentes puestos y la mano libre aún mantenida en el aire cómo si fuese a tocar la puerta que ya estaba abierta.

- Wow, abriste rápido... Ah, te traje...- la sorpresa lo tenía algo lento, pero no sólo eso, sino que la cara llena de alegría de la más baja lo tenía hipnotizado.

- ¡Me trajiste pizza!- chilló alegre tomando el plato con una sonrisa.- ¡Y tiene de todo! ¡Te amo! - ella sonreía y aspiraba el aroma de la pizza que funcionaba en ella cómo el más fuerte elixir del amor. Unos segundos después, puso atención al detalle de la forma de la pizza, quedándose callada y mirando atentamente a la pizza y luego al gator.

“Piensa rápido” se reclamó a sí mismo, pensando que la hembra emplumada esperaba algo claro de su parte, pero era difícil pensar cuando la escuchó decir "te amo" tan deliberadamente.

Sin darse cuenta, la gallina ya había comenzado a comer, mirándolo expectante mientras masticaba con calma.

- ¿Quieres entrar? -preguntó ella aún sonriente, haciéndose a un lado de la puerta para dejarlo entrar.

Entonces fue que, con una leve sonrisa, el cocodrilo asintió y avanzó cerrando la puerta detrás de sí. Sin embargo, la calma no duró mucho cuando vio algunas cajas de pizza en el rincón que parecían haber sido picoteadas.

- Chica... ¿Sigues comiendo basura?- preguntó algo nervioso por la posible reacción que podría tener la más bajita. Pero estaba preocupado por lo del otro día aún, así que no podía dejar esos detalles pasar.

- Ehm... ¿No? -Ella no estaba muy segura de lo que decía, a veces, comía cosas que no alimentaban en nada sin darse cuenta, por pura manía, estrés, o cualquier sensación abrumadora. Desvió la mirada mientras daba otro mordisco a la rebanada de pizza que agarró, viendo al piso mientras temblaba y sus plumas se erizaban un poco.

Monty suspiró, no había algo que él supiese para ayudarla. Prestó atención a las plumas erizadas, que sobresalían del resto del plumaje y rió bajo, acercándose lentamente a la ave para aplacar el plumaje, pasando las manos por sus hombros hasta sus codos, mirándola fijamente a través de sus lentes.

- Listo.- rió, con confianza.- Te peiné.- bromeó.

Mientras, la Glamrock estaba mirándolo de vuelta bastante sorprendida.

La cercanía era bastante, demasiada para ser tan repentina; Chica sólo pudo comer un poco más rápido mientras que sentía que el gator se la iba a comer.

Aunque no sabía en qué sentido sería exactamente.

- Quería volver a verte.- rompió el incómodo silencio, acariciando los suaves brazos de la gallina con delicadeza y firmeza a la vez.- No me dejabas acercarme mucho a tí en los ensayos.

- Es que... Ya sabes. Roxy es celosa conmigo cómo amiga. No quiero que ustedes se empiecen a pelear.- reveló tímidamente, encogiéndose de hombros. Se sentía intimidada por el, claramente mucho más alto que ella, reptil.

- Comprendo.- dijo, y asintió levemente  antes de soltarla.

- Gracias otra vez por la pizza.- murmuró con una media sonrisa, mostrando sus diminutos dientes.

Gator no sabía si hacer lo que estaba pensando, ¿Sería muy rápido? ¿La iba a espantar y necesitar mucha pizza para que lo perdonara? Antes de poder siguiera terminar de formular todas las preguntas, Chica se subió a uno de los pubs para alcanzar su rostro y darle varios besos-picoteos suaves en la parte lateral de su boca. En los labios. Y su pico sabía a queso.

Los besos siguieron por algunos segundos y luego la Glamrock se bajó del pub para sentarse en el mismo y seguir comiendo.

- Eso... ¿Eso por qué fue? -sorprendido, el enorme cocodrilo la miró creyendo que soñaba.

- Porque me diste pizza.- respondió sencillamente ella, feliz.

***

-Grrr...- gruñó, moviendo su pie de forma impaciente.- Freddy, ¡Ya solo elije que ponerle y ya!- gritó la can, cruzándose de brazos.

- Espera, quiero que no pase frío.- respondió el oso, luego de ponerle una segunda camisa a Gregory.

- Freddy- lo volvió a llamar- no hace frío esta noche.- dijo mientras se levantaba del piso para luego ir al lado del oso para apartarlo y rebuscar en los cajones, sacando una pijama de una pieza con tema del oso.- A ponerle esto y listo.

- Hey, ¡Es mi favorita! -Exclamó el niño castaño mientras la loba se acercaba a él para ayudarlo a ponerse el pijama.- Gracias, Roxy.

- De nada, ya sabes que soy la mejor.- sonrió con agrado y orgullo, colocándose las manos en las caderas. Su cola se movió sola por la felicidad que le daba el ser halagada.

- Eh...-el oso suspiró y luego se dirigió a arropar a Gregory, haciéndolo acostarse en la cama llena de peluches con rapidez.- Cualquier cosa, grita, vendré tan rápido cómo pueda.- le sonrió dulcemente al niño y acarició su cabeza.

- Buenas noches.- bostezó Gregory y cerró los ojos, acomodándose.

- Que lindo eres siendo el mejor papá. ¿De casualidad no quieres que sea la mejor mamá? - se señaló así misma con el pulgar, sonriendo en grande mostrando sus colmillos. Esto mientras ambos depredadores salían de la habitación del oso.

Freddy suspiró nuevamente. Estaba acostumbrado a ese trato de parte de la loba desde hace unos cuantos meses, a veces sentía que era su puro egocentrismo, le confundía mucho, pues no estaba seguro de si ella solo buscaba más aprobación o si de verdad le interesaba cuidar a Gregory... O pasar tiempo con él. Le dolía porque de verdad estaba desarrollando sentimientos por ella, con todo lo bueno y lo malo, tanto así que enamoramiento era un eufemismo para lo que sentía.
Mientras caminaban tranquilamente por el Mega Pizza Plex Roxxane no dejaba de hacer cosas para impresionarlo, levantando Staff Bots para presumir su fuerza, metiéndose a algunas de las tiendas para robar algo de comida y ofrecersela, incluso haciendo comentarios referentes a qué ni los pósters ni los peluches le hacían honor a lo suave de su pelaje.
El Glamrock sentía siempre su rostro arder al ver y escuchar todo eso, no tenía otra opción que decir que sí a todo y llenarla de tímidos cumplidos.

Sin embargo, había un cumplido que jamás podía decir fácilmente.

- Estás preciosa hoy...- comentó de la nada entre el silencio, mirándola encogido de hombros, maravillado por la forma en que ella flexionaba los brazos mientras hablaba de su rutina de ejercicios quizá por milésima vez desde que la conocía.

La loba solo sonrió.

- Ay, ¡Gracias! Ya lo sé, ¿Me quedó muy bien el cabello hoy, verdad? -Ella se regocijaba, y la forma en la que sonreía felíz tenía embobado al oso.

- Toda tú, no solo tu cabello.- murmuró, negando con la cabeza lentamente.

No siguió sus halagos, pues Roxy continuó su alardeo, que, personalmente para el Glamrock, era agradable porque podía escucharla hablar.

Pizza & Love || MontyxChica.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora