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_______ Brooklyn

Definitivamente la vida no me ama.
Fui tan ingenua en pensar que alguien como él se iba a fijar en mi.

—Terminalo —Habló Sara a través del teléfono

—Y cuando regrese le voy a partir toda su —La interrumpí

—Todavía no sé si anda con Renata —

—No te va a decir pendeja, aún así hables con él —Su voz se notaba molesta

—Bueno, mañana te marco para decirte que pasó —Me despedí

—Te quiero, no llores por él, no se lo merece —Se despidió Sara y luego colgó

Suspiré y observé la camisa de cuadros azul que llevaba como suéter, la llevaba puesta hace 2 días, no me la había quitado más que cuando me daba calor.
Me la quite y tome otro suéter, fui al cuarto de Aidan; quién no se encontraba en el rancho porque volvió a salir con Renata, y dejé aquella camisa en su cama.

Salí de la casa y me encontré con un gran terreno lleno de pasto, el cuál estaba bardeado para separar la calle del rancho de mi tío. Subí aquella barda que daba a la calle y me senté sin importar que me podía caer.

—______ —Gritó aquel rubio con el cabello desordenado

—Pásate Mauro —Dije al verlo

El rubio hizo caso, entró y subió a la barda al igual que yo.

—¿Ese suéter no es de Aidan? —Preguntó mientras fruncía el ceño

—Carajo —Susurre al ver aquel suéter

—No me di cuenta de que era de él —Hablé y desvíe mi vista a la calle

—Tienes que hablar con él, _______ —Dijo Mauro

—Pero le diría "Tenemos que hablar" o le diría "Terminamos" y luego me voy —Hablé

—Solo dile lo que sientes o algo así —Respondió

—Mira, ahí viene —Apuntó levemente con su cabeza

—Bien, hablo con él y ya después veo que hacer —Susurre

Baje de aquella barda, mientras que Mauro seguía ahí.
El ojiverde paso la puerta.
Con el corazón acelerado y el estómago revuelto, hablé:

—Aidan —Llamé y él se limito a caminar lentamente hacia mi

—Últimamente te he notado distanciado y raro. Te has estado viendo mucho con Renata, no me molesta pero ya no es de amigos que te diga "Mi amor" —Suspiré —Eso me causa cierta inseguridad y desconfianza, aunque me dijiste que nunca lo harías, tus acciones dicen lo contrario —Hablé mirando al piso

—Y si esto sigue así —Hice una pausa y mi mirada se fijo en él —No creo que pueda seguir funcionando —Me quité su suéter

—Te quiero pero me haces dudar —Terminé de hablar y le di su suéter

—Lo siento _______, ya no es lo mismo contigo —Se quedó callado un rato mientras que mi mente se volvía un caos total

—Creo que lo de nosotros solo fue una amistad confundida con amor, Renata me hace sentir mejor —Habló y se fue

Dios, fui tan ingenua.

—Corre Brook, habla con él —Habló Mauro sacándome de mis pensamientos

—Mauro, me acabo de crear una escena mental donde nada sale bien, mejor hablo con el luego —Empecé a jugar con mis manos

—Anda, yo te pagaré el psicólogo por un año y seguramente Sara querrá arrancarle los ojos si te engaño —Dio ánimos

Baje aquella barda y con el estómago revuelto, lo llamé.

—Aidan, tenemos que hablar —Dije seriamente

La última vez que me dijeron "Tenemos que hablar" fue cuando mis papás se divorciaron.

—Ultimamente has estado muy distante y raro, además de que has estado pasando mucho tiempo con Renata y... —Suspiré —Eso me causa cierta inseguridad porque ella te trata como si fueras su novio —Terminé de hablar

—He estado pensando muchas cosas y eso de alguna manera me distrae, salgo con Renata porque ella me ha estado insistiendo mucho y no sabía cómo decirle que no, pero el otro día en el campo de fútbol le puse un alto —Bajo su mirada al piso por unos segundos y luego me vio fijamente a los ojos —Yo nunca te llegue a engañar con Renata, te lo juro por mi guitarra

Aidan Gallagher

Dios, todos los problemas que me ha causado estar pensando en Lalito.

—¿Podríamos hablar de esto adentro? —Pregunté y ella solo asintió

...

Ya estando en el cuarto de ______ me dedique a responder sus dudas.

—¿Y cómo sabría yo que tú no me engañaste? —Preguntó con cierto tono de desconfianza

—Nunca se me ocurría engañarte —Me miró con desconfianza

—______, he estado pensando en mi hermano y... —Voltee a la pared —Simplemente me siento mal porque el ya no está aquí y yo ya no puedo hacer nada —

—He estado pensando mucho en él y se que debería de dejar de hacerlo pero esos sueños siguen llegando. No quiero que este tema arruine nuestra relación y mucho menos que pienses que salgo con Renata, el otro día le puse un alto cuando intento besarme —Expliqué

—Dios, no sabía que —La interrumpí

—Ya sé, Lalito nunca se va a ir, pero debo de hacer que me deje de dar miedo su recuerdo... Entonces ¿Seguimos o terminamos? —A lo que solo recibí un abrazo de su parte

—Para la próxima dime que ocurre —Susurro en mi pecho

Nunca me atrevería a engañarla, ni a ella, ni a nadie.

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Triste porque ya no voy a cantar "Y que no le digan en la esquina el venado, el venado"

Yo creo que unos capítulos más y se acaba esto.

Cómics Y Cassettes  [A.G]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora