𝕊𝕎𝔼𝔼𝕋 ℂℍ𝔸𝕆𝕊 - SeongJoong/WooSan [EDITANDO]

siempre estaré aquí

NARRA SEONGHWA

No había hablado con Hongjoong desde aquella noche y realmente lo quería volver a ver. Le escribí ayer, pero parece que no ha visto mi mensaje. ¿Me estará ignorando? No estaría sorprendido si es cierto, todos siempre se alejan... ¿cuál será mi problema? Le volví a dejar otro mensaje y dejé el celular por ahí. Tenía bastante hambre así que bajé a la cocina a buscar algo de comida, no esperaba encontrarme con mi madre allí. Iba a volver a mi habitación sin que se diera cuenta, pero ya era tarde, me había visto.

-Alto ahí, jovencito.-me di la vuelta y la encaré.

-Dime....

-¿No piensas saludar a tu madre?

-Hola madre... ¿ya me puedo ir?

-¡Espera! Estuve hablando con una amiga que es psicóloga...-ya sabía hacia dónde se dirigía esta conversación.-Me dio estos folletos, solo quiero que los leas...-miré los folletos que me pasó, eran de terapia de conversión, eso solo hizo que mi sangre hirviera, ¿podían terminar de aceptarme alguna jodida vez?

-Y por eso no te saludo, hasta luego madre.

Ignoré los llamados de mi madre pidiendo que volviera y salí de mi casa. No sabía a dónde iría, pero no podía seguir allí.

NARRA HONGJOONG

Mientras caminaba a mi casa, pensé en todo lo que me había dicho Wooyoung, ¿cómo es posible que haya pasado por todo esto? La gente puede llegar a ser tan asquerosa, no sabía cómo apoyarlo, sentía tanta impotencia. Estaba tan perdido en mis pensamientos que no noté que había llegado a mi casa y menos a la persona que se encontraba en la puerta.

-¿Seonghwa?-el chico levantó la cabeza y lo vi, mi corazón comenzó a latir rápidamente. Se paró de la escalera y se acercó a mí, enfrentándome.

-Hongjoong... ¿cómo has estado?

-Pues... bien, supongo... ¿y tú? ¿Qué te trae por aquí?

-Bueno... no he sabido nada de ti desde aquel día y... quería saber si es porque ya no estabas interesado en verme o...

-¿Qué? ¡No! ¡No! No me malentiendas... de hecho te he extrañado demasiado estas dos semanas...-lo tomé de las manos, no entiendo por qué, pero necesitaba su tacto.-...pero es que no soy muy bueno en esto de comenzar conversaciones y socializar...-subí mi mano hacia su rostro y arreglé algunos pelos rebeldes colocándolos detrás de su oreja para luego dejar la mano en su mejilla y acariciarla con mi pulgar, era tan suave.-Lamento que te hayas sentido así, créeme que es todo lo contrario a lo que piensas, no quiero alejarte....-Seonghwa finalmente sonrió y colocó su mano sobre la mía mientras cerraba los ojos ante mi tacto.-Ahora estoy algo ocupado, ocurrió algo y solo vine a buscar algunas cosas... pero prometo que no volveré a desaparecer. ¿Te parece si salimos mañana?

-Está bien, no me dejes plantado...

-Nunca lo haría...

-Bien, hasta mañana...-se dió la vuelta para comenzar a caminar, pero yo lo volví a atraer a mí para darle un abrazo, necesitaba uno desesperadamente.

-Hasta mañana.-susurré en su oído.

Finalmente nos separamos y él se fue, yo entré a mi casa. Busqué algo de ropa, dinero y tomé todo de mi gabeta de snacks, esperé unos minutos en la sala, quería darles algo de espacio y no sabía cuánto les tomaría. Saqué mi celular del bolsillo de mi pantalón y entré a las redes para entretenerme. Cuando sentí que ta había pasado bastante tiempo, tomé mi mochila y salí de allí para dirigirme a la casa de Wooyoung. Cuando finalmente llegué, toqué la puerta, pero nadie me respondió. Luego de esperar unos minutos, decidí entrar, me encontré extraño que la puerta no tuviera seguro. La casa estaba en total silencio, me dirigí a la habitación de Woo a ver si estaban ahí y efectivamente se encontraban allí. Wooyoung dormía y San se encontraba a su lado observándolo, noté las lágrimas cayendo por su rostro.

-Hongjoong...-no estaba acostumbrado a ver a San tan débil, tan perdido... me dolía, San siempre había sido el fuerte del grupo, el que nos consolaba a Wooyoung y a mi... ahora, debo estar yo para él.

-Ven aquí...-él se acercó y yo lo tomé en mis brazos, con esas palabras San dejó salir todo su dolor. Yo también lloraba, me sentía el peor amigo del mundo y pensar en todo lo que Woo tuvo que pasar durante estos meses...

-Esto es mi culpa, si tan solo lo hubiera protegido mejor, si tan solo....

-San, no es tu culpa...

-Es que Hongjoong, ese día él se fue de mi casa muy ansioso, si tan solo no lo hubiera dejado ir en esas condiciones...

-Entiendo por qué te sientes así, pero no lo es, ¿sí? Ese bastardo es el único culpable. Tú no predices el futuro, ninguno lo hacemos.

-Hongjoong yo... le fallé, prometí protegerlo por siempre, pero no pude, yo...-apreté el abrazo, entiendo que San nunca dejará de culparse, por más que lo intente.-No sé que hacer... quiero denunciar a ese imbécil, quiero que se pudra en la maldita cárcel...

-Lo entiendo, pero Wooyoung es el que tiene que hablar, sino, no harán nada al respecto...

-Es que sé que no va a querer, lo conozco. .. Wooyoung ahora mismo necesita de nuestro apoyo y creo que es necesario contactar a un psicólogo...

-Sí... pero sabes que no es así de sencillo, él tiene que estar dispuesto a tomar ayuda profesional, empezar terapia puede llegar a ser aterrador... tendremos que convencerlo...

Nos quedamos cada uno en nuestros pensamientos, viendo a Wooyoung dormir tranquilamente. ¿Cómo habíamos llegado a esto?
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NARRA SAN

Sentí cómo la luz del sol entraba por la ventana haciendo que abriera mis ojos. A mi lado vi a Hongjoong, nos habíamos quedado en el piso durmiendo sin darnos cuenta. Alzo la mirada para buscar a Wooyoung y me alarmé al no encontrarlo. Me paré rápidamente y comencé a buscarlo en la cocina, en la sala, no estaba. Subí a mi habitación y escuché ruido en el baño, me apresuré a entrar y la imagen que vi me rompió el alma. Wooyoung, con lágrimas cayendo por sus ojos, estaba sentado en la bañera restregándose de manera muy áspera el cuerpo con una esponja, se estaba haciendo daño.

-¡Wooyoung! ¡Woo! Para por favor te estás lastimando.-yo intentaba quitarle la esponja, pero él me ignoraba, seguía restregándose agresivamente.

-N-no, no, no, no puedo, es-estoy sucio.-dijo Wooyoung temblando.

Mis ojos se aguaron y algunas lágrimas comenzaron a salir.

-Wooyoung... por favor, te estás haciendo daño...-finalmente le pude quitar la esponja y Wooyoung lloró más fuerte mientras ocultaba su rostro en sus rodillas. Busqué una toalla y lo tapé con ella para luego cargarlo entre mis brazos; lo coloqué en mi cama y busqué algo de ropa para ponérsela. Iba a comenzar a cambiarlo, pero el me detuvo.

-No me toques, por favor...

Yo solo asentí y salí de la habitación para que tuviera algo de privacidad. Esperé unos 5 minutos para entrar y me encontré con Wooyoung hecho un ovillo en mi cama oliendo una de mis camisas.

-Wooyoung...-este se dio la vuelta y empezó a llorar nuevamente.-¿Me puedo acercar?-este solo asintió y yo me senté a su lado. Nos quedamos en silencio, yo esperando alguna reacción y Wooyoyng mirando hacia la nada, como perdido en sus pensamientos.

-Yo... lamento haberte alejado hace un rato, no estaba en mis cinco sentidos... ¿puedes acercarte más? Te necesito...

Yo solo le regalé una pequeña sonrisa y me senté en la cama, me senté a su lado y lo atraje hacia mis brazos.

-¿Qué pasó hace un rato? Digo, si se puede preguntar...

-Yo... tuve una pesadilla... era sobre todo lo que ha pasado... entré en una especie de crisis cuando desperté, por eso viste eso.

Asentí, y acaricié su cabello mientras repartía mimos en su cabeza. Nos quedamos así un rato, ninguno hablaba, solo disfrutábamos la compañía del otro como solíamos hacer.

-Amor... quiero ir a terapia...-yo lo miré sorprendido.-Lo estuve pensando y quiero mejorar, me aterra demasiado, pero quiero estar bien, sé que muchas cosas no volverán a ser como antes, pero solo necesito paz y estabilidad.-sonreí grandemente al escuchar esas palabras.

-Yo estaré aquí para lo que necesites, ¿sí? Siempre lo estaré...