solo de nosotros [EN PAUSA]

21. cadáver no muerto

SIN CORREGIR

FAELYNN

oscuro, todo estaba demasiado oscuro.

¿Donde estaba? ¿Que había pasado? ¿Había perdido mi vuelo? ¿Dónde estába Harry?

—hay que dejarla aqui— dijo un hombre

Había mucho movimiento, estábamos en una carretera.

—¿Y si le cuenta a alguien?— dijo otro hombre

Intente moverme pero estaba atada, mi cuerpo dolía y ardía, me picaba como si tuviera sarpullido, no me sentía bien.

—ah recibido tantos golpes en la cabeza que no debe de saber ni su nombre— hablo el primer hbre otra vez

Soy Faelynn Dolha ¿Cómo se me iba a olvidar mi propio nombre? No e recibido tantos golpes.

Escuché como se acercaban, pretendí que estaba inconsciente, el carro se detuvo de golpe y mi espalda se golpeó con el metal haciendo mucho ruido. Escuché como abrieron una puerta, mucha luz me golpeó de pronto en la cara pero me abstuve de hacer una mueca, me desataron y aproche ese momento para darle una patada al hombre, se sorprendió e intento tomarme, pero salí corriendo de allí, escuché unos gritos pero no me detuve, mis pies ardían pero seguí corriendo, voltee un momento pero no había nadie...

No había nada.

Pare en seco y empecé a mirar a mi alrededor, solo había... Monte por todos lados, correr no había Sido tan buena idea, por dios en que pensaba, divise un camino de tierra a lo lejos y corrí hasta allí, tal vez allá algún pueblo cerca, pero era extraño, esta tierra no estaba caliente, estaba húmeda y fría, tal vez allá algún conducto de agua subterráneo o algo asi.

Seguí caminando, como por dos horas, intentaba no mirar mi cuerpo, me sentía sucia, tenía moretones y como ronchas, dolían mucho, tenía marcas en mis muñecas, tal vez debí quedarme a preguntarle a los hombres que había pasado.

Aunque el que golpee no se veía amigable.

Estaba tan sumida en mis pensamientos que no me di cuenta cuando choque con un trozo de madera.

Acaso es... ¿Un cartel?

Lo tome con mis manos como si fuera una gran maravilla y leí lo que decía.

"Bienvenido a Biertan"

Sabía que este era un pueblo que estaba algo muy lejos del mío, seguí caminando pero cada persona que me encontraba me miraba raro, me sentía demasiado incómoda, llegué a una especie de plaza donde había una enorme pared con folletos pegados, me acerque a esta y la verdad que todas eran promociones de ventas, concursos, rifas, hasta que Vi que en uno de estos estaba una dirección de una señora que estaba alquilando un cuarto, no tenía dinero, pero tal vez podría trabajar para ella, arranque el folleto y empecé a guiarme por el nombre de las calles, llegué hasta una casa que se veía muy muy antigua.

Me acerque a esta y una chica o señora de cabello blanco estaba tendiendo la ropa, estaba de espaldas, no podía definir que tan mayor era. Me acerque a la cerca y ella volteo hacia mi sonriendo, hasta parecía que me esperaba. Sus grandes ojos morados me sorprendieron un segundo, creí que era una señora, pero se veía muy joven, ella borró su sonrisa y me miro alarmada, yo no dejaba de verla, se me hacia conocida de algun lado.

—hola en yo... Vengo por el anuncio de que estabas alquilando una habitación ¿Todavía está disponible?—dije dudosa

—¡Por supuesto! Me alegra que estés interesada tengo un sexto sentido y puedo ver lo agradable y buena que eres, también hay otra cosa pero eso lo descubriré después, entra cariño te ves muy mal, oh dios que te paso.