final

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Y una vez más, HeeSeung conducía su auto. Todo se sentía distinto, como si fuera una especie de despedida.

Jake abrió la ventana y encendió el último cigarrillo de la noche.

Sabía bien a dónde se dirigían: al medio de la nada, de esos lugares a donde HeeSeung le gustaba ir.

Reposó su codo en la puerta del auto y miraba el camino concentrado, por su parte, Lee lo miró de reojo apreciandolo cómo se debía. Se dio cuenta de su gusto por mirar al menor, así no le hablara ni lo tocara, era lindo observarlo, le traía una especie de paz mental a su constante desastre.

El único sonido que había era el del auto y el del papel quemándose entre el fuego del cigarro de Jake cada vez que le daba una calada.

── ¿Sabes? Me gustó besarte ──dijo el menor de la nada, poniendo nervioso al mayor.

── Uhm, a m-mi también, sí, fue bueno ──titubeó.

Jake sonrió con sus ya conocidos aires superficiales, aumentando su ego pero al mismo tiempo sintiendo su corazón palpitar rápidamente.

── También... Sería bueno que no pensaras mucho todo lo que te conté anoche. No me gusta que la gente se preocupe, eres la primera persona que le conté como me siento realmente, apreciaría que... Trates de borrarte la memoria o algo así.

HeeSeung soltó una risita y desvío el cambio fuera de la carretera, estacionando el auto con cuidado y recostándose en el asiento una vez lo apagó. Jake terminó su cigarro y lo metió en una bolsa de plástico que tenía en su pantalón.

"Puedo ser una mierda, pero al menos no contamino más el planeta" se dijo a él mismo.

── ¿Jake?

── Dime.

Era difícil describir el ambiente dentro del lugar, todo era silencio y las almas de dos chicos con un flechazo uno por el otro. ¿Qué se supone que debían hacer?

── Ven acá ──el mayor señaló su regazo y Jake sonrió internamente.

Hábilmente se cambió de asiento con cuidado de no pegarse en la cabeza contra el techo y se aferró al cuerpo del mayor tal y como lo hizo anteriormente en su casa.

Sus piernas se guiaron a cada lado de HeeSeung y descansó su cabeza en el hombro del contrario mientras este comenzaba a dejar caricias en su espalda y masajeaba su cintura con la mano desocupada.

Todo era oscuridad a su alrededor, el ambiente solitario que caracterizaba el lugar además de sus pechos juntos, sintiendo sus corazones. Era demasiado.

Las emociones que comenzaron a golpearlo.

Felicidad, tristeza, angustia... Su mente era un sin fin de pensamientos y reproches.

Pero, dejando de lado todo aquello, se sentía amado.

La conexión que había entre ellos dos a cada segundo se hacía más fuerte y eso comenzó a asustarle. Después de SungHoon se sentía algo extraño. En cambio, con HeeSeung era una sensación algo compleja.

── HeeSeung... Te quiero ──el mayor, quien recargaba su oreja contra el cálido rostro de Jake detuvo las caricias ante sus palabras──. No puedo decir que te amo, pero realmente te quiero...

Lee soltó un suspiro profundo ya que no sabía que hacer, debía dejar de pensar tanto las cosas. Reanudó el suave movimiento de su mano contra la figura de Jake, estaban entrando en calor.

── Yo también te quiero, te amo. En realidad... Ni siquiera sé que siento por ti, pero creo que tú... Lo sientes, ¿sabes que lo hago?

Jake asintió en silencio, con una sonrisa en el rostro, sonrisa que Hee no pudo ver.

Se aferró más al cuerpo del mayor y comenzó a sollozar, temblaba con cada gemido que salía de su boca y HeeSeung se asustó.

── ¿Jakey?

── N-No me sueltes... ──murmuró abrazándolo.

Porque Jake, aunque sentía poder con todo y contra todos, llegó a un punto que no sabía que hacer de su vida, su mente y todo aquello que le rodeaba.

Entonces llegó HeeSeung y todo cambió, sonaba dramático, pero así lo llegó a sentir.

Estuvieron así unos minutos más hasta que Shim se cansó de llorar, prefirió volver a su asiento pero Hee le propuso cambiarse a los asientos de atrás para estar más cómodos. Este aceptó sin más.

Prendió la radio a un volumen bajo. Una vez los dos estuvieron sentados, esta vez fue HeeSeung quien encendió el último cigarrillo de la noche, abriendo la ventana y pasándole el objeto a Jake, ofreciéndole una calada. Shim se negó.

── ¿Qué va a pasar entre nosotros...? ──cuestionó el menor y HeeSeung se quedó callado unos segundos.

Ni siquiera él sabía que pasaría.

─ Silencio bebé. ─dijo Heeseung dando una calada a su cigarrillo y pasando su diestra por el suave cabello de Jake. El menor solo se aferró más a su pecho, sonrió.

La música en el auto se reproducía a bajo volumen mientras el humo del tabaco huía por la ventana. Y entonces, en medio de aquella cálida noche de mayo, Jake se dió cuenta de que Lee Heeseung era la persona de deseaba.






A fin de cuentas, solo fueron un amor de verano.























































ahora sí, fin de esta historia ‹3
gracias por leer, espero les haya gustado.
mil gracias a hyukind  por haberme permitido adaptar este fic, rocío te quiero ‹3
bye cuidense.

mil gracias a hyukind  por haberme permitido adaptar este fic, rocío te quiero ‹3bye cuidense

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denle a la estrellita bitches

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