La Masacre del clan Hyuga

Chapter 5: Cena

Había preparado algunos postres para llevar a la casa de su Taicho, después de una reunión con su padre le había comentado que iría a casa de los Uchihas para presentarse con la familia de su ahora "prometido", nuevamente su padre le recalcaba que debía cumplir su misión, y que debía actuar de manera natural, que la familia le creyese todo, lo cual ella esperaba no fuese problema.

-¡Terminé! - exclamó jubilosa su hermana menor cuando terminó de arreglar la flor rojiza en su cabellera – te ves hermosa neesama.

Hinata observó su reflejo sonrojándose un poco, Hanabi la había maquillado y arreglado, vestía un kimono rojo con algunas flores bordadas y un obi ojo.

-Itachi-san se pondrá celosos cuando otros hombres te vean - comentó picarona la menor sin dejar de observar cómo se veía su hermana, sonrojándola bastante.

-No imagino a Itachi-san celoso- en el fondo ella sabía que él no sentía nada por ella, que esto era falso, pero estaba decidida en hacer todo lo posible por hacerlo feliz.

Cuando su hermana menor le iba a reprochar por el apodo, una de las criadas entró informando que su novio estaba esperándola abajo.

-Voy enseguida.

-Neesama mucha suerte - mencionó Hanabi abrazando a su hermana mayor.

-Gracias - respondió tanto las palabras de su hermana como su abrazo, dejándola sonriente, fue a encontrarse con Itachi.

- Estoy lista Itachi-san solo debo buscar unos postres que hice para su familia – el Uchicha se volteó al escuchar su voz, al verla arreglada quedó sin palabras, se veía hermosa - ¿cree que a su familia les gusten los Wagashi?

- ¿Hiciste Wagashi? - preguntó incrédulo, ya que son postres tan delicados que solamente hacen expertos.

-Sí, es que no sabía que debía llevar - comentó sonrojada.

- No te preocupes, eso es bastante difícil de hacer si lo lograste impresionaras mucho a mi madre, por cierto, Hinata-san luce hermosa - la chica solo se sonrojó lo más que pudo ante ese último comentario – no quise ofender ni nada, es que realmente luces hermosas – al darse cuenta de lo que había dicho se sonrojó levemente - yo creo que deberíamos ir a la cena – le tomó de su mano recordando lo que le dijo Shisui, si quería que la misión fuese un éxito debían actuar como una pareja real, él pondría de su esfuerzo para hacer de esta misión lo mejor para ambos.

Caminaron sonrojados por el trayecto desde los territorios Hyuugas hasta su hogar, en el trascurso del camino fueron vistos por algunas chicas que habían estado detrás de Itachi por años, las cuales avergonzaron mucho a Hinata por escuchar los lamentos de esas mujeres, observaba a Itachi, no podía creer que fuese tan popular con las mujeres, tenía vagos recuerdos de la academia, pero el que se robaba suspiros era Sasuke.

-No pienso que sea más popular que él, o que Shisui - respondía su "novio".

-¿Disculpe?

-¿Me preguntaste si era popular con las chicas? – la chica se sonrojó un poco al ver que había hecho su comentario en voz alta – mi primo y mi hermano realmente son los populares con las chicas, llegamos – estaban afuera de su casa, entraron y se quitaron sus zapatos – Okasan ya estamos en casa.

Un par de pasos se escucharon que venían desde la cocina, al momento en que Hinata entró a su hogar fue recibida por Mikoto Uchiha.

-Bienvenidos a casa Itachi, Hinata-chan – saludo la mujer observando a su futura nuera, sorprendiéndose un poco al ver su vestimenta, parecía algún tipo de princesa y ella solo se había arreglado un poco, su vergüenza aumentó cuando la chica se inclinó - no hagas eso por favor, es solamente una cena familiar, solo quería conocerte - reprochó un poco la mujer.

-¿Ahora te cohibes okasan? - comentó divertido Itachi al ver la reacción de su madre, claramente la Hyuuga no entendía nada.

-Traje unos Wagashi - comentó la menor extendiendo la bandeja hacía la madre de su prometido, al observar la caja Mikoto quedó perpleja, la forma elegante de esos postres hizo que la desconfianza que tuvo el día anterior se esfumara.

-Increíble, ¿en serio los hiciste tú? - consultó al ver la forma delicada de los postres, la chica solo asintió - déjalos en la cocina, por favor Itachi – la mujer le pasó los postres como si fueran de cristal – Hinata-chan – la chica miró curiosa a la matriarca Uchiha – tienes toda mi bendición llámame okasan si deseas – lo último dejó sorprendidos a los novios.

-¿Qué haces Mikoto? - Fugaku fue a investigar, ya que pensó que su esposa ya estaría en una batalla con la "novia" de su hijo, pero se llevó una sorpresa al verla abrazando a la chica, miró nuevamente a su hijo - ¿qué sucedió? - Itachi seguía desconcertado para responderle.

-¿Vamos a cenar Hinata-chan? - la mujer comenzó a arrastrar a la chica hasta el comedor donde se encontraba Sasuke – hijo mira ya llegó Hinata-chan.

-¿Hinata-chan? - cuestionó el menor a punto de decir que hace 15 min le había dicho roba hijos, la mujer al darse cuenta del comentario que iba a hacer le pescó sus mejillas.

-Sí dije Hinata-chan, desde hoy en adelante deberías decirle one-chan- el menor iba a refutar, pero su madre jaló sus mejillas, activando levemente el sharingan en forma de amenaza – ayúdame a servir la cena Sasuke-kun, por favor Hinata-chan siéntate como en tu casa, Tachi-kun atiéndela por favor nosotros volvemos enseguida - salió hacia la cocina con su hermano menor, cuando Fugaku se sentó a la cabecera de la mesa.

-Hyuuga-san – la aludida miro seriamente al líder Uchiha – como le comenté anteriormente en la oficina del Hokage quiero que esta misión pase lo más desapercibida posible, no quiero que mi familia se entere de esto.

-No se preocupe Fugaku-sama - mostró su dedo anular de la mano izquierda exponiendo un sello de juinjusto de la familia Hyuuga, sorprendiendo a los hombres – me he comprometido al éxito de esta misión, haré lo posible por hacer feliz a su hijo.

-Me alegro.

La cena transcurrió de manera tranquila, Mikoto realizando preguntas sobre el matrimonio o que cosas necesitarían, la chica mencionó que no se preocuparan, ya que su familia se haría responsable de los gastos de la boda, cosas triviales, pero su madre estaba tan contenta, porque pudo entender a su hijo, al ver a Hinata tan preocupada por él sabía que estaría en buenas manos, aunque al principio pensó que este matrimonio era una calentura de jóvenes que no sabían lo que querían, al verlos juntos compartiendo supo que ellos serían felices, aunque en el futuro se olvidaría que pensó de esa manera.

-Itachi-kun por favor lleva a Hinata-chan a su casa, se ve tan hermosa que quizás algún ninja te la quiera robar.

-Okasan – reprocho su hijo.

-Es verdad, eres una chica hermosa, el día que se casen te verás hermosa, y no dudes en venir cuando quieras, así te puedo enseñar recetas para que le cocines a Tachi.

-Gracias – se despidió la chica haciendo nuevamente una reverencia - disfruté mucho de la cena.

-Gracias a ti por traer esos postres, te quedaron realmente deliciosos.

-¿Vamos? - consultó Itachi, recibiendo una afirmación por parte de la chica.

Mientras caminaban observo el cielo estrellado, miro de reojo a la chica que también iba sumida en sus pensamientos, con su mano derecha volvió a buscar la mano de ella, sorprendiéndola nuevamente.

-Sé que nuestro compromiso es para evitar una guerra civil, pero – ambos se detuvieron e Itachi sostuvo su rostro con sus manos – realmente quiero que seamos felices, prometo que trataré de hacerte feliz Hinata.

-Yo deseo hacerte feliz... - susurró la chica cuando sellaron su pequeño pacto con sus labios, fue un beso tierno cómplice, Hinata derramó unas lágrimas, y volvió a besar a Itachi, por un instante sintió que él la salvaría, no sintió temor, a su lado cualquier misión por difícil que pareciera la haría por él - gracias - susurró sobre su boca.